TALLER DESCARTES

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YO:

En la segunda de sus meditaciones metafísicas, Descartes vuelve sobre lo más fundamental de la filosofía, a establecer los puntos de partida para la investigación. Se vale de la analogía del genio maligno; aquel hado que se ha dedicado a engañar, hace creer a quien piensa que está dotado de sentidos, un cuerpo hecho de carne y sangre. Habitando entonces un mundo que veo pero que no existe; percibiendo espejismos que solo existen en nuestros sentidos, queda una cosa cierta: estoy pensando y dado ese solo acto, deduzco que soy algo. Pienso luego soy. Este yo que piensa dicho en palabras de Aristóteles es algo que existe en cuanto que existe, una sustancia pensante.

El descubrimiento más importante de Descartes es la subjetividad; el hombre se descubre a sí mismo como centro gracias a una peculiar experiencia del yo que le posibilita una nueva forma de hacer filosofía diferenciada del modo griego, fundamentado en la admiración de la naturaleza y orientado hacia la búsqueda de su origen, sus principios, sus causas y sus regularidades. (Miguel, 2011 p. XIV).Es entonces, una primera verdad que se da no como un razonamiento sino una existencia producto de un descubrimiento.

En Descartes se refleja toda su época. Al seguir la historia de su espíritu se sigue al unísono la historia de la llamada modernidad. El individuo Descartes « ejemplifica» su tiempo, y por eso hablar de él es hablar de la modernidad. Con él se constituyó la modernidad, y en ella asistimos a un nuevo comienzo de la filosofía, que va a colocar al hombre en su centro. Ahí reside la gran tarea del filósofo Descartes, que abrió el camino a la ciencia y a la técnica modernas (Miguel, 2011, p.XI y XII).

VERDADES MATEMÁTICAS:

Durante su permanencia en La Fleche la única disciplina que satisfacía a Descartes eran precisamente las matemáticas, que acabaron convirtiéndose en la base de su manera de pensar, así como en el instrumento que le serviría de fundamento de todos sus trabajos. (Miguel, 2011 p. XII)

El propósito mas ambicioso que Descartes Tenía era el de generar una ciencia generalizada: Mathesis universalis. Una vez establecido en Holanda, comenzó a trabajar en su primer tratado sobre física: El Mundo o Tratado de la luz. El objetivo de Descartes en este texto consiste en explicar todos los fenómenos de la naturaleza construyendo una ciencia unificada que haga posible la descripción de un nuevo mundo (Miguel, 2011, p. XVI)

Sólo las matemáticas -argumenta- son ciertas, de modo que todo debe basarse en ellas. (Miguel, 2011p. XVII) Formular las verdades, mediante este nuevo método es organizar con un orden ya verdadero del ejercicio racional. La matemática universal es capaz de lograr la verdad basándose en sustancias para las que no cabe la duda de su existencia, con reglas bien establecidas y fundamentadas en la unificación de las ciencias bajo un método general. Esto facilita la búsqueda de la verdad en la generalidad del método cartesiano. Todas las ciencias se encuentran encadenadas y dependen unas de otras.

El saber científico puede tener objetos muy diferentes, pero su importancia radica en que tiene un lenguaje común que es el contenido del método y el que da a los distintos saberes unas características metodológicas comunes. Así pues, el rasgo distintivo de la filosofía cartesiana que va a pasar a toda aquella filosofía moderna que sigue un método genético es el de la axiomatización (Miguel, 2011 p. XXVIII).

El pensamiento no será más relativo sino matemático construido bajo un modelo axiomático de intuiciones superpuestas y deducciones Matematizadas que relacionaran a la sensación, intuición, razonamientos y las sustancias como existencias a partir de las cuales se establecerán en un orden a la diversidad de las posibles experiencias del mundo.

DIOS:

El método en Descartes es fundamental ya que este permite establecer una verdad que surge del interior del alma humana, la cual concede esa capacidad para entender las cosas. Es allí donde soy consciente en la medida en que pienso. Las verdades son eternas y es Dios quien las establece, él se manifiesta en el momento que yo pienso. El sujeto pensante al alcanzar la verdad afirma su propia existencia. Al mismo tiempo, Dios es aquello que se manifiesta mediante mis pensamientos y me dirige hacia la verdad; es el creador y fundamento último al que el sujeto pensante pretende llegar para salir del principio de duda. En la tercera etapa de sus meditaciones descartes, establece lo siguiente: si soy yo, ser imperfecto, tiene que existir Dios como ser perfecto y no falaz. En esta parte Descartes luego de separar la mente de los sentidos, el sujeto cartesiano, llegar al conocimiento de la verdad del mundo. Y es Dios quien le ha proporcionado ese conocimiento verdadero de la realidad. El pensamiento llega a su esplendor gracias a Dios entendido como luz natural, conduce por el ordenamiento de nuestras razones y que Dios ha creado y fundamentado para acceder al conocimiento de la realidad.