El diario de Sofía El Jardín del Edén

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Los filósofos de Mileto decían que había una sola materia de la cual estaban compuestas todas las demás cosas. Parménides opinaba que todo lo que existe ha existido desde siempre y no se puede convertir en otra cosa, este se fiaba más de su razón que de sus sentidos. Heráclito opinaba más por sus sentidos que por la razón, este fue el que explicó “La razón universal” todo ser humano tiene una razón y esta razón es común en todos y que mediante esta nos guiamos. Empédocles decía que Parménides y Heráclito tenían razón en una cosa, pero que también estos se equivocaban. Sólo se tenia que rechazar la idea de que hay un solo elemento del cuál surgen todas las cosas, Empédocles decía que lo que une a las cosas es el amor y lo que las separa es el odio. Anaxágoras opinaba que las cosas estaban formadas por piezas que ni siquiera se podrían o lograba ver.

Al final de esta carta Sofía pudo darse cuenta de algo que era favorable para ella, le gustaba la Filosofía por que esta no tenia que ser estudiada o memorizada sino que es más uso de la lógica.

Demócrito

En esta carta el escritor anónimo le plantea un nueva pregunta a Sofía y ella comenzó a pensar en una respuesta concreta a la pregunta.

Al día siguiente Sofía tenia otra carta esperando por ella, en esta le hablaban de Demócrito, Quien decía que todas las cosas están formadas por unas partículas pequeñas a las cuales llamo “Átomos”. Estos átomos no son todos iguales, tienen formas distintas para poder combinarse y formar infinitas cosas. Cuando los átomos se separan porque dicho objeto, forma, etc. Ha muerto, se dispersan y vuelven a juntarse con otros para formar algo completamente nuevo y distinto.

Ahora, la ciencia ha llegado a que los átomos están divididos en unas subpartículas denominadas pro tones, electrones y neutrones.

Sofía mientras iba leyendo la carta iba entendiendo a lo que Demócrito se refería y pensó que este había actuado de forma muy astuta. Sofía llego a la conclusión de que Heráclito tenia razón cuando dijo que todo ”Fluye” porque los humanos, animales y plantas mueren ; incluso como estas se desintegran.

El destino

Otra carta que recibió Sofía estaban planteadas tres preguntas. Ella estuvo investigando, pensando, dándole vueltas a su cabeza hasta que llegase su próxima carta u nota; tras reflexionar ante todo decide mandarle una carta a su misterioso profesor de filosofía. Se intercambiaron cartas mediante el buzón. Lo que el profesor le entrego a Sofía le explicaba varias e importantes cosas. Comienza por explicarle todo acerca del destino. Habla sobre el Oráculo de Delfos: loas griegos creían que Apolo lo sabia todo sobre el pasado y el futuro. Sofía también lee en la carta que muchas personas piensan que el curso de la historia esta dirigido por el destino, que las enfermedades son castigos de Dios. La medicina intenta buscar explicaciones naturales a las enfermedades. Comentan el juramento que hizo Hipócrates: nunca utilizará su tratamiento para hacer daño, nunca envenenará a nadie aunque se lo pidan, ni ayudara al aborta, entre otras cosas.

Sofía después de todos estos eventos se despierta el sábado por la mañana y ve debajo de su cama un pañuelo rojo que decía “Hilde” Era la primera vez que veía ese pañuelo por lo cuál Sofía se queda con la duda de quien sería Hilde.