LA FORMACIÓN INTEGRAL EN UNA ESCUELA DE IGNORANCIA

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En este sentido, Ruiz Lourdes habla de la formación integral como,

“(…) proceso continuo de desarrollo de todas las potencialidades del ser humano que lo orienta hacia la búsqueda de su plenitud, el aprender a ser, aprender a hacer, aprender a aprender, aprender a emprender y aprender a convivir (...) La formación del ser humano comprende el desarrollo del espíritu, a través de la cultura; del intelecto, mediante la vida académica; de los sentimientos y emociones, por la convivencia y la vida artística; de la integridad física, a través del deporte y la orientación para la salud; y de la vida social, mediante actividades cívicas” (Ruiz Lugo, 2007)

Asimismo Freire sugiere que el maestro debe practicar una “educación problematizadora en lugar de ser el acto de depositar, amarrar o transferir conocimientos y valores, supera la contradicción educador-educando mediante la creación de una relación dialógica” (Freire, 1968). De esta manera, el docente, no va ser la persona que transmita todo al alumno, sino, que en conjunto con él va ser un co-aprendiz o “el guía que ayuda al estudiante a aprender la verdad para sí mismo” (Kasper, 2008) No todo se va centrar en el contenido, sino en enseñar a cómo aprender. Wilhoit clasificaría esta propuesta dentro de lo que él llama “desarrollismo”, una corriente que promueve el uso instrumental del conocimiento, que se pueda hacer algo útil con lo aprendido (Education: 78).

“La expresión “formación integral” implica dos cambios grandes frente a la educación tradicionalmente practicada en nuestras escuelas, universidades y seminarios. Habla de “formación” en vez de “educación”, de modo que se refiere a algo más que la transmisión de información. El vocablo tiende a relacionarse más con el carácter y las habilidades prácticas y menos con la capacidad mental. Además, la frase habla de una formación que es “integral”, para toda la persona en cada aspecto de su ser, en lugar de solamente un dominio de conocimientos para la memoria o la mente. En verdad, las dos palabras enfatizan que la educación debe impactar la totalidad del educando.” (Kasper, Educación bancaria vs. formación integral, 2008)

En definitiva, el sentido de la formación en la actualidad derivada sólo del verbo formar, se centra en transmitir contenidos que los estudiantes utilizaran para su vida y la profesionalización donde posiblemente muchos de ellos nunca lleguen a constituir un mercando rentable. Y aunque es casi imposible que el papel de la educación no se vea sometida sólo en producir profesionales “competentes” , como maestros hacernos conscientes de la proximidad de tan considerable problema: educar seres competentes profesionalmente, pero poco íntegros que reducen sus valores a un campo meramente cívico.

Referencias bibliográficas

Kasper, Roberto. (2008). Educación bancaria vs. formación integral. Common Ground Journal, 6, 43- 57.

Ruiz Lugo, Lourdes. (S.f.). Formación integral: desarrollo intelectual, emocional, social y ético de los estudiantes. Revista Universidad de Sonora, s.v., 2.

Quintero Trujillo, Daniel. (2014). LA TAREA DE LA FAMILIA EN LA FORMACIÓN DE LOS HIJOS. 2016, Sitio web: http://www.danielqt.com/www2/

Freire, Paulo. (1968). Pedagogía del oprimido. Río de Janeiro: New York: Herder & Herder.