La republica es uno de los diálogos más importantes que escribió Platón

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Por consiguiente no se tendría necesidad en los cantos y melodías, de instrumentos de muchas cuerdas o escala panarmónica, por tanto no se alimentarían a los fabricantes de estos instrumentos con cuerdas y armonías múltiples. Solo quedarían la lira y la citara para usarse.

La excelencia del discurso, de la armonía, de la gracia y el ritmo, son compañeras de la simplicidad del alma, esa reflexión que verdaderamente organiza el carácter bien y bellamente, por ello se debía vigilar y obligar a los poetas y demás artistas a producir solamente la imagen del buen carácter.

Educación

La educación que se pretendía era la educación soberana, para que quien fuera educado así, pudiera percibir con agudeza la negligencia y fealdad tanto en las obras del arte como de la naturaleza, con justicia sentirá repugnancia hacia eso y por el contrario alabara cuanto es bello, a fin de llegar a ser el mismo bello y bueno. Lo feo lo censurara con rectitud natural, y desde su nacimiento lo tendrá por objeto de odio.

Pero ésta educación no se podía dar sin antes distinguir las formas de la templanza, el valor, la libertad, y demás virtudes, así como los vicios en todas sus combinaciones.

Gimnasia

Después de la música, la gimnasia era lo mejor para educar a la juventud.

No era el cuerpo por muy bien constituido que estuviera lo q hacia el alma buena, sino el alma buena procuraba al cuerpo el mejor estado posible. Debían guardarse los educandos de la embriaguez, tener una gimnasia simple, moderada y un entrenamiento militar, así como restringirse de ciertos alimentos y por supuesto de cualquier condimento, pues la variedad engendra el desorden, la simplicidad de la gimnasia produce la salud del cuerpo.

Decía que la música cuidaba el alma así como la gimnasia al cuerpo, y estas procuraban armonía en el alma para que fuera templada y valerosa, y Dios había dado estas artes para aplicarlas al valor y la filosofía.

Moradas y posesiones de los guardianes

Se les impedía manchar el oro divino con el deseo del moral, se conservarían así ellos y a la ciudad, desde el momento en que adquirieran alguna propiedad se convertiría en empresarios y en lugar de aliados de los demás ciudadanos serian tiranos y enemigos del resto, odiados y asechados.

Los guardianes eran auténticos guardianes, que por ningún modo podrían hacer mal a la ciudad. Otro mandamiento que se les imponía es que vigilaran pos todos los medios que la ciudad pareciera ni pequeña ni grande sino suficiente y una.

Los ciudadanos debían por su parte aplicarse en una sola tarea, cada quien debía hacer lo que le correspondería.

Su ciudad será la única en donde encontraran personas que solo sean una cosa.

Después de todas estas normal se menciona en el texto la alegoría de la caverna, que habla sobre la constitución del conocimiento.

A los fundadores de la republica les incumbiría el labor de llevar las mejores naturalezas hacia el conocimiento que declaraban el mayor de todos: ver el bien y subir por aquella subida, y después de haber visto el bien no permitirles lo que se permitía, tampoco quedarse ahí abajo a lado de los cautivos ni formar parte de ellos.

Los filósofos serian pues los guardianes, los que cuidarían de la ciudad y los ciudadanos.

Comentario:

La republica de platón fue su utopía de ciudad perfecta, a mi parecer extremista pero coherente en cada una de sus exigencias, que creían justas pues procuraban darles a todas las clases la felicidad en el mayor grado posible, una ciudad fuerte y personas virtuosas.

La educación a la que hace referencia es decir, la soberana para mi limitaba esa libertad que tiene cada ser, y ese libre albedrio que todos poseemos. Para ellos lo que se hacía con todas estas prohibiciones era “purificar” pero no estoy de acuerdo con imponer y tratar de cambiar lo que ha sido establecido por tantos años ni de eliminar a las personas que no se adecuen a este modelo de vida.

La república estaba llena de “buenas” intenciones, pero eso no era suficiente.