RELATORIA DEL LIBRO MÁS ALLÁ DEL VER ESTÁ EL MIRAR (PISTAS PARA LA SEMIÓTICA DE LA MIRADA), DE FERNANDO VASQUEZ RODRIGUEZ
Enviado por Kate • 28 de Junio de 2018 • 848 Palabras (4 Páginas) • 505 Visitas
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La mirada puede catalogarse como un acto simbólico ya que se le considera como la primera manifestación artística del hombre, como argumenta el libro “del ver no proviene la belleza; es el mirar a quien le corresponde la gestación, el anhelo de lo perfecto”. Es la capacidad que el hombre posee para crear todo un escenario ante sus ojos con lo que se le ha dado. También encontramos diferentes tipos de miradas, están aquellas que agobian e intimidan; otras que dan paz y alegría; pesadas y livianas, aquellas que se dan como castigo o bendición.
Fernando Vásquez cita en su libro al escritor Milan Kundera., el cual expone tipos de miradas que clasifica en cuatro categorías. La primera es aquella que anhela la mirada de un público, la segunda desea la mirada de la persona amada, la tercera que pretende estar rodeada de miradas conocidas y la cuarta y que el escritor considera la más significativa es esa que tiene la mirada presente en la imaginación de aquellos que se han ido o están ausentes, los llamados; soñadores. Otro aspecto de la mirada es que es una flecha o un rayo, puede ser lanzada o recibida. La mirada flecha apunta, dirige y persigue; intimida. La mirada rayo, ilumina, impacta, transciende e hiere. Con la mirada se puede hablar sin pronunciar una sola palabra, es un lenguaje especial que es capaz de comunicar y transmitir sentimientos y pasiones, solo un buen mirador tiene esa habilidad de entender todas sus fases, su tonalidad, su razón.
Así como encontramos varios aspectos entre ver y mirar también están los que son mirones y miradores, el primero es un curioso, que se aburre fácilmente de lo que ve porque busca el placer inmediato, es superficial y no alcanza a distinguir ni la mínima parte de aquello que visualiza, pasa de largo muchas cosas. Luego se encuentran los miradores esos que hacen espectacular aquello que ve, nunca se cansa de ver lo mismo porque siempre encontraran algo nuevo y viven largamente el goce. Por ultimo esta la firmeza o la torpeza al mirar. Miramos desde lo que somos, desde los sentidos. “todo es según el color del cristal con que lo miramos” es decir, hay miradas que son muy obvias y no tienen esa perspicacia de aquellas que son tan agiles y captan el más diminuto detalle.
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