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COMO SON LOS MERCADOS Y SU EVOLUCIÓN EN MÉXICO

Enviado por   •  13 de Diciembre de 2018  •  2.371 Palabras (10 Páginas)  •  323 Visitas

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y las instalaciones de la merced han dejado de ser atractivas para la mayoría de las personas, porque se ha inclinado a la mala fama de que en este barrió se suscitaba a la explotación de las sexo servidoras, la delincuencia, el tráfico, etcétera. Los comerciantes de la merced compraban sus productos en lo que es el lugar muy conocido como la “Central de Abastos”. A principios de la década de los años 70 la ciudad tenía la urgencia de un nuevo mercado para la sustitución de la merced, la petición de este favor tardo unos 10 años. Por fin en marzo de 1981 se inició la construcción de la central de abasto. Prácticamente la central de abasto esta interrelacionada con todos los estados que conforman la República Mexicana con un grupo de productores, agricultores, sociedades de campesinos, cooperativas, granjas, huertas que hacen posible llegar los productos a la central de abastos para que posteriormente sean adquiridos por la sociedad y lleguen hasta la cocina de su casa. Entre los tianguis de la ciudad de México hay 2 que han logrado crear tradición e historia. El “tianguis de la Lagunilla” y el “tianguis del Chopo”, cada uno con clientela distinta.

Ya mencionados anteriormente algunos ejemplos de los mercados antiguos y actuales dentro de la ciudad de México, daré mención sobre algunos de los que podremos encontrar actualmente en la capital de Veracruz.

En la ciudad de las flores los mercados más comunes que podremos encontrar se establecen en el centro y a los alrededores de este mismo, algunos de ellos son: el “mercado Jauregui”, “mercado Galeana”, “mercado de San José”, “Central de Abastos” , “Rotonda” y el de los “Sauces”. Al ingresar ya sea en algunos de estos, haciendo referencia al mercado Jauregui, podremos observar milésimas de secciones que dividen al mercado en lo que serían los dichosos puestos. Si alguna persona turista o que no sea de la comunidad urbana de Xalapa que se encuentre en el centro de la ciudad y quisiera entrar a conocer el mercado Jauregui puede entrar desde diferentes vías, por ejemplo: Revolución, Lucio, Altamirano y Tamborrell. Si se decidiera entrar por la parte de Revolución se toparía desde un instante con el típico olor a gorditas que venden a un costado de los teléfonos públicos. Después de degustarse unas deliciosas gorditas de frijol, chile seco, salsa roja con papas y un refresco de manzanita avanzara al siguiente paso que es conocer cada rincón de dicho mercado. Este consta de 2 plantas. En esta planta la persona podrá observar desde primera vista (entrando por la calle Revolución) a las personas, tanto mujeres como hombres, sentadas esperando a que llegue alguna clientela o armando coronas, ramos de flores recién naturales, arreglos con flores artificiales o naturales y cruces de maderas o de flores. Adentrándonos un poco más al corazón del mercado podemos ver pequeños negocios de pollerías, pescaderías, carnicerías, zapaterías y artículos de piel, abarrotes y semillas, dulcerías, cerrajerías, acuarios, pollerías, vestidos de XV años, escritorio público, etcétera. Posteriormente en una mitad de la planta alta se encuentra la ropa que luego solemos vestir y la otra mitad de restaurantes.

Los precios que se establecen en los productos que venden los comerciantes, varían de acuerdo a que si es de temporada o a la bolsa de valores. Por ejemplo, el mango es una fruta que se suele dar en la estación de verano, si la producción de esta fruta es buena implementan un costo accesible para la venta del mango, pero si la producción fuera escasa el precio sería alto. Al darse cuenta la gente que esta carísimo el precio del kilo del mango suelen quejarse provocando que luego regateen (suele pasar también en los tianguis) el precio con los comerciantes. Esto hace que los vendedores luego no ganen por lo menos lo que invirtieron en sus productos. La sociedad suele decir que si las personas que se encuentran en el mercado venden caro es porque ganan mucho dinero, esto es totalmente una contradicción, los comerciantes no suelen ganar tanto, por lo mucho solo ganan unos cuantos pesos eso ni les alcanza para poder comprarse un dulce.

En los puestos solemos ver al vendedor y a los “ayudantes” (por así decirlo). Estos, suelen ser: los hijos, nietos, sobrinos o tíos/cuñados del vendedor. Hay casos en que luego los hijos de los comerciantes dejan a un lado sus estudios para poder incorporarse a vender dando como problemática que luego se atrasen en sus grados escolares. Para este tipo de familia, el principal elemento importante para su desarrollo es la venta, la escuela es solo para poder educar a los hijos.

Ahora ya no solamente existen los mercados sino que nos podemos topar en cualquier lugar alguna tienda de autoservicio, siendo este como la competencia para los mercados. A pesar de esto, siempre nos encontraremos a personas que digan que para poder comprar cualquier cosa a mejor calidad y precio es el mercado, ya sea por cercanía o el trato que se les da a los clientes, pero también nos encontraremos con personas que prefieran más los supermercados. Algunas de las razones que tienen las personas que luego suelen comprar en las tiendas de autoservicio son: 1) por la publicidad, 2) por la higiene que tienen en sus productos, 3) que tienen la posibilidad de manipular y elegir los productos a comprar, 4) la velocidad de compra, 5) la amplitud del espacio y 6) por la comodidad en los horarios de servicio. A las tiendas de servicio ya sea Wal-Mart, Chedraui, Costco, Aurrera, Sam´s o algún otro tipo de supermercado yo las podría considerar como un factor que atribuye a la globalización.

Para un porcentaje de la sociedad el ir al mercado es considerado como parte de una tradición familiar que se ha llevado a cabo desde años anteriores y que actualmente aún se sigue dando a cabo. Podemos ver a las abuelitas comprando en compañía de sus nietas o en otro caso a las mamás con sus hijos. Personalmente cuando solía ir al mercado con mi abuela y mi mamá me estaban explicando la manera correcta de comprar, de que tengo que preguntar los diferentes precios para poder ver finalmente cual me conviene más comprar, que me fije muy bien cuando me estén pesando ya sea fruta o verdura, si llegase a ser el caso de que en algún momento me tendría que comprar ropa que me fije en el tipo de tela y la talla porque luego no suelen hacer cambios, como debo de escoger la fruta o verdura, etcétera. La gente dirá que son cosas pequeñitas, pero si no las sabes hacer bien te pueden llevar al baile (es decir que te den tranza).

Para concluir puedo decir que los mercados han sido de gran aportación cultural para nuestro país, por toda la demostración de cultivo que nuestros antepasados nos han ido dando. Gracias a esto y nuestro desarrollo de la inteligencia

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