“La enseñanza escolar de los mexicas” Alfredo López Austin

...

Para ellos la obediencia representaba la buena crianza y la nobleza la cual los hace honestos y honesta y recogida eso haría que no fuesen desvergonzadas y livianas.

Como se mencionaba anteriormente los padres hacían un ofrecimiento de su hija a sus Dioses porque para ellos era algo sagrado hacer eso, era la creación más grande y preciosa de su Dios por eso la importancia de ello.

Los padres los inducían hasta cierto punto hasta los 8 años debido a que los inducían al buen camino y se creía que a esa edad ya estaban preparadas para hacer adoración a sus Dioses, ya los habían conducido al templo , coronado de flores y vestido a su usanza, galanamente donde eran recibida del sumo sacerdote.

REPORTE DE LECTURA 3

“Educación de las mujeres entre los indios de Yucatán”

Fray Diego de Landa

En esta lectura habla igual de la educación de las mujeres, además habla de las cualidades, la economía, su devoción y las costumbres de partos que se hacía en el pueblo. Acostumbraban a dar las espaldas a los hombres cuando se topaban por el camino y le daban preferencia a ellos y las atendían para darle de comer y darle agua. Ellos criaban a sus hijas de una forma muy estricta, pues ellos los castigaban dándole pellizcos en la oreja y si miran a los hombres los untan con pimienta y cuando el pecado es grave les untaban pimienta en sus partes reproductoras.

Ellas tenían una enseñanza estrictas, desde su niñez les enseñan a trabajar en el campo, en ese tiempo eran las sustentadoras de la casa y tenían que educar a sus hijos. La costumbre de las mujeres eran de que a temprana edad eran casados como a los 12-13 años, ellos creían que en esa edad era la etapa de la fertilidad, además eran fecundadas a esa edad y era el tiempo de parir, pues en esa edad eran los años que se podían tener hijos. Les hacían bebidas de manzana caliente para que produjera mucha leche mamaria para darle de comer a sus bebes. Algunas no podían tener hijos, ellos se basaban en sus dioses para pedir le el milagro para su fertilidad con dones y oraciones.

En el día de su parto ellas eran atendidas por hechiceras, donde ellas le hacían creer que tenían que poner debajo de su cama el demonio Ixchel, pues ese demonio era el de la buena suerte para la cría. Una vez que haya nacido eran bañados luego para la pureza de su vida después de eso eran levados a los sacerdotes para presentarlos con sus dioses y asignarle un nombre.