La familia y su educación.

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La buena crianza de nuestros niños, permite ellos sean seguros de sí mismos, capaces de afrontar diferentes situaciones en todos los espacios de sus vida. Por ello que identificado algunas características de los padres que pueden ser muy permisivos y otras a los que ejercen con estricta disciplina. Sabemos que todos los extremos son malos porque no permite que los niños logren un sano crecimiento y un desarrollo integral.

Los padres permisivos son aquellos que ejercen un escaso control sobre sus hijos, mantienen una buena comunicación con ellos y es en ocasiones hasta exagerada, hasta el punto de que estos tratan a sus padres como sus iguales, se caracterizan por ser padres amoroso y se diferencian de los padres negligentes porque les brindan apoyo a sus hijos.

Los padres autoritarios ejercen gran control sobre sus hijos, dialogan poco y siempre se hace lo que ellos dicen, ellos se caracterizan por dar órdenes y esperar a que estas sean obedecidas; la obediencia es premiada y la desobediencia, castigada. Estos padres crean ambientes sumamente exigentes, con reglas establecidas. En casos extremos, el estilo autoritario puede volverse abusivo.

Para concluir podemos decir que; el desarrollo de cada niño está influenciado por el grupo al que pertenece y por la cultura de su familia. Existen determinados factores de estimulación, valores sociales, entre otros. Debemos destacar que influye mucho el nivel socio económico del niño. Este nivel determina las oportunidades de desarrollo del muchacho

La educación es responsabilidad es de los padres, pero el compromiso debe ser de todos, incentivemos a nuestros pequeños con afecto, atención, proveámosle un sano ambiente donde tengan un buen descanso y una buena alimentación, seamos padres democráticos, suministrémosle una educación con control pero flexible.