Emociones básicas y sociales.Brito.

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El asco, por su parte, prepara al organismo para que refute las condiciones ambientales potencialmente dañinas, movilizando la energía necesaria para ello y dirigiendo la conducta al alejamiento del estímulo desencadenante. Algunos autores restringen la emoción a estímulos relacionados con alimentos en mal estado pero puede aparecer ante cualquier otro tipo de estimulación, tiene una moderada elevación de la frecuencia cardiaca, así como el nivel de conductancia de la piel y ciertas reducciones en el volumen sanguíneo. Se aprecia con un descenso y unión de las cejas, elevación de las mejillas, nariz fruncida, reducción acentuada de la abertura de los párpados, también puede aparecer la elevación del labio superior, el descenso del mentón y de la comisura de los labios.

En relación con las emociones básicas, se presentan las emociones sociales que son producto o resultado de éstas, las cuales son; la culpa, la vergüenza, el orgullo, el enamoramiento, los celos, la envidia y la empatía. A partir de ellas no sólo se conforma el estado de ánimo diario de un individuo, sino que también influyen radicalmente en sus acciones.

La culpa surge de una evaluación negativa del yo más específica, referida a una acción concreta. Desde el punto de vista fenomenológico: experimentan dolor, pero en este caso el dolor tiene que ver con el objeto del daño que se ha hecho o con las causas de la acción realizada. En ella se experimenta dolor, asociado con el objeto del daño que se ha hecho o con las causas de la acción realizada o pensada. Físicamente se manifiesta con movimientos inquietos alrededor del espacio, como si tratara de ver qué puede hacer para reparar su acción. El proceso cognitivo- atribucional se centra en la conducta y no en la globalidad del yo, por tanto, la experiencia de culpa no es tan displacentera, como puede serlo la vergüenza, ésta es ocasionada por una evaluación negativa del yo como una atribución global, al fallar en alguna acción realizada y para que exista la vergüenza es crucial que exista cierto grado de socialización, por sus normas y su significado. La vergüenza provoca el deseo de escapar de la situación, de desaparecer, la culpa mantiene a la persona ligada a la situación interpersonal, señalándole el camino hacia la acción reparadora: deseos de confesar y pedir perdón. Mientras que el embarrassment (traducida al castellano como vergüenza Pero lo más correcto sería, embarazo, bochorno o corte) se puede sentir en situaciones positivas por ser el centro de atención de mucha gente.

Por otra parte, el orgullo surge como consecuencia de la evaluación positiva de la acción propia. La experiencia fenomenológica de la persona que siente orgullo por algo es de alegría, de satisfacción, por lo tanto, la persona tratará de reproducirlo, al ser un estado positivo, placentero. Conlleva una tendencia a la reproducción de las acciones que lo suscitan, visto que está conformado por el hubris, designando una especie de orgullo exagerado, surge como consecuencia de una evaluación positiva del yo de carácter global. La experiencia fenomenológica es muy positiva y reforzante, en este estado, al contrario que en el de la vergüenza, la persona se siente estupendamente y satisfecha consigo misma.

En cuanto al enamoramiento es una experiencia casi universal, debido a que estudios antropológicos sobre 166 culturas diferentes constataron que esta experiencia aparecía en 147 de ellas. Es un sistema emocional asociado a circuitos distintivos de actividad cerebral activados por estímulos específicos, la seducción física es fundamental para que la otra persona nos induzca una suerte de fascinación que facilite el enamoramiento, actúa con la similitud ya que nos sentimos más cercanos con los que compartimos actitudes y valores esenciales, y por tanto es más probable que iniciemos una relación con éstos, que con quienes mostremos discrepancias notables, y en él puede presentarse los llamados celos, los cuales son una emoción que alude al temor, creencia o sospecha de que algo preciado está en peligro de perderse, una de las características que lo rigen es que se percibe que una relación significativa está amenazada y puede llegar a desaparecer o deteriorarse como consecuencia de la acción de una tercera persona.

La envidia es otra emoción social, que significa la consideración de algo con malicia, es hedónicamente desagradable y moralmente no aceptada, pero principalmente se caracteriza por una inmensa animadversión, hostilidad y deseo de infortunio hacia quien posee el objeto del deseo. Por su parte la empatía aparece cuando en una situación en la que se encuentran los demás genera reacciones emocionales congruentes incluso similares, en nosotros mismos. Inclusive somos capaces de entender cómo se encuentran, y actuar en consecuencia, y se puede presentar ya sea centrada en el bien común o en el de los demás.