Los vínculos de apego en niños institucionalizados ¿Cómo hacen los educadores para mejorar las relaciones de apego con los niños?

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El apego puede formarse con una o varias personas, pero siempre con un grupo reducido y no necesariamente con la madre. La existencia de varias figuras de apego ayuda a un buen desarrollo afectivo, ya que el ambiente de adaptación del niño es el clan familiar y no únicamente la relación entre madre e hijo.

Está demostrado que aquellos niños que reciben buenos cuidados, un apego seguro y de calidad durante su primer año de vida desarrollan mejores aptitudes para controlar el estrés, forman relaciones con otros más saludables, tienen una mejor capacidad cognitiva y tienen más autoestima; es decir, en general tienen una vida más equilibrada y se sienten más realizados.

Pero esto no significa que los bebes que tienen un apego inseguro están predestinados a tener problemas. Otras circunstancias del entorno pueden ser relevantes en las competencias posteriores del niño, en algunos casos todos los problemas producidos por el apego inseguro se ven solucionados con la experiencia de la guardería.

Los niños que crecen en familias tradicionales tienen varias figuras de apego como los padres, hermanos, abuelos… en cambio, los niños institucionalizados tienen como figura de apego al cuidador habitual, siempre que le inspire estabilidad y apoyo al niño. Es por esta razón por la que podemos hablar de flexibilidad y no de determinismo en relación con la experiencia de relaciones de apego, ya que éste no implica únicamente estar físicamente junto al niño, sino que también se ha de crear en él un entorno de afectividad que le produzca al bebe una sensación de seguridad.

Concluiremos diciendo que el buen apego en la crianza de los niños implica entrega de cariño, afectividad, contacto físico… a los niños. Todo ello influirá a los niños a enfrentarse al mundo de un modo adecuado.

Aunque en mi opinión, a pesar de todo lo que hemos dicho con anterioridad, no podemos olvidar otras influencias que recibe el niño que al igual que el apego influirán en él. Entre muchos otros factores podríamos mencionar la relación de pareja que tienen los padres, el nivel cultural, la situación económica en la que viven, el apoyo o no de la familia extensa u otro tipo de apoyos sociales…

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