RESEÑA: LAS FANTASÍAS HISTÉRICAS Y SU RELACIÓN CON LA BISEXUALIDAD.

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Por ultimo Freud le da un lugar a la bisexualidad planteando que para el tratamiento de los síntomas es necesario dos fantasías una de carácter femenino y otra de carácter masculino, mientras que la otra corresponde a una moción homosexual, con lo cual el síntoma histérico corresponde a mociones libidinales y mociones represoras, así mismo estos síntomas podrían responder a la unión de dos fantasías libidinales de carácter contrapuesto, dichos planteamientos son sostenidos por la tesis de la formula número nueve la cual plantea que “un síntoma histérico es la expresión de un fantasía sexual inconciente que es masculina por una parte y femenino por otra parte” (Freud, 1908, p. 146). Dicha fórmula a diferencia de las anteriores según Freud es el estadio más alto de la complicación del síntoma histérico y solo se puede encontrar si la neurosis (psiconeurosis) que llevan un largo tiempo lo que implica que dentro de ella se ha realizado una organización, aun así el autor plantea que esta formula no debería tener un valor universal todo lo contrario no se podría aplicar a todos los síntomas ni a todos casos dado que es difícil encontrar casos en los que las mociones contrapuestas se expresen juntas en un mismo síntoma, no obstante plantea que si es fácil encontrar casos en los las mociones contrapuestas como la homosexualidad y la heterosexualidad se pueden dividir en expresiones sintomáticas diferentes. Aunque Freud no quiso ilustrar a través de casos clínicos lo planteado diciendo que se lo reservaría si una analogía con masturbador quien en su fantasías conscientes busca empáticamente estar en el lugar del hombre y la mujer.

Freud concluye estableciendo como estas disposiciones bisexuales pueden se pueden manifestar durante el tratamiento psicoanalítico diciendo que se debe comprender el significado bisexual de un síntoma, debido a que éste puede aparecer a pesar de que se haya tratado uno de sus significados sexuales porque utiliza el significado sexual contrapuesto, lo que implica que el enfermo durante el análisis de uno de los significados utilice el significado contrario durante el mismo análisis.

En conclusión se puede decir que el articulo expuesto como un capitulo logra abordar de manera profunda el lugar preponderante que tiene una fantasía inconciente o conciente “sueño diurno” en relación con la sintomatología patológica en éste caso de los histéricos, dado que Freud logra exponer todos los por menores de ésta privilegiando el lugar de la sexualidad ya que ésta se encuentra en el contenido de la fantasía buscando cumplir deseos de carácter sexuales así como también se encuentra en el síntoma aunque en este lo que busca es reproducir la satisfacción sexual que produjo la fantasía. No obstante es importante establecer que Freud no logra en éste artículo presentar de manera ejemplificante el lugar de la bisexualidad con relación a las fantasías de los síntomas histéricos, dado que si bien les da un lugar al final del artículo como un elementos secundario que aparece en relación con las ultimas formulas planteadas para establecer la naturaleza de los síntomas histéricos, pese a esto se puede decir aunque de manera superficial se logra dilucidar algunos elementos relacionados con el lugar de la bisexualidad como dos mociones contrapuestas féminas y masculinas que se deben a fantasías inconcientes y que se pueden expresar en un mismo síntoma o que pueden expresarse de manera separada.

De esta manera se puede decir que con este artículo logra profundizar más en todos los elementos relacionados con los síntomas histéricos, permitiendo que el lector logre encontrar varios elementos importantes sobre la naturaleza de dichos síntomas dejando que éstos puedan ser estudiados de manera más profunda dado que no solo se presenta el síntoma como una expresión corporal si no que se logra abordar lo que subyace a éste dándole un lugar a las fantasías que se pueden presentar en las instancias psíquicas consientes e inconcientes.

Es importante establecer para finalizar que mediante lo presentado en el artículo se deja espacio para que se piense el lugar que tiene lo patológico y lo normal con relación a las fantasías, dado que Freud en momentos sitúa a éstas tanto como normales cuando se presenta desde el conciente “sueños diurnos” pero a la vez como patológicas cuanto éstos emergen de manera inconsciente o cuando por represión se deja en el inconciente después de estar en la instancias psíquicas de conciente lo cual implica que entre lo normal y lo patológico no hay una diferencia plenamente tangible lo cual implica que la patología no se podría presentar como una anormalidad ya que lo normal no siempre se presentaría al margen de lo patológico.

Referencias

Freud, S. (1906-1908)[1]. Las fantasías histéricas y su relación con la bisexualidad. En: El delirio y los sueños en la Gradiva de W. Jensen y otras obras. Vol. IX. Traducción: José Etcheverry. Argentina: Amorrortu editores. (Pp. 138-147).

Yo: Expresión de las pulsiones auto-conservadoras e incluye los ideales de su propio ser

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