INFLUENCIA DE LA MODERNIDAD Y POSMODERNIDAD

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Partiendo del postulado anterior se puede inferir entonces que existe algo así como una especie de mercantilismo religioso donde diferentes iglesias ofrecen sus productos espirituales a potenciales compradores que se convierten en seguidores de la fe que más beneficio le deja para su placer. Más en el entorno argumentativo de la posmodernidad se radicaliza un poco más esta definición, debido a que no solo se le permite al individuo optar por el sistema de credo que más convenga para sus intereses, sino que estos al no hallar satisfacción en dichos sistemas pueden decidir en formas su propia creencia, sin límites y acorde a sus necesidades espirituales, lo que crea una autonomía religiosa en cada individuo.

Todo lo anterior ha dado origen a la secularización del sistema religioso donde hoy por hoy muchos acuden a las definiciones de la posmodernidad para acceder a un sistema ritual según sus propias interpretaciones, dando lugar a dos problemas fundamentales de una parte, el desplazamiento de masa religiosa como consecuencia de las esquirlas de una “Posmodernidad” (con todos los problemas que dicho rótulo conlleva) y con la “inteligente” reacción de algunas iglesias y religiones a dicho fenómeno con miras a engrosar sus filas. En segundo lugar, las consecuencias que todo este boom de credos trae consigo: la pregunta por un discurso interreligioso, motivacional y personal, que cuestiona la validez del discurso tradicional en la actualidad.

Las manifestaciones de las corrientes provenientes de los dos periodos en los cuales se encuentra inmerso el individuo vislumbran un cumulo de necesidades atrofiadas en este en periodos antiguos, siendo una excusa o plataforma para dar rienda suelta a la diversificación y modificación de su vida a razón de las propuestas comportamentales que tales periodos sugieren.

Por ello con el creciente pensamiento de autonomía declarado por la posmodernidad se deja al hombre a expensas de su propio albedrio para adquirir su forma de credo, lo que conlleva a una combinación de lo mal sano con lo puro dando origen a una mutación de un nuevo culto que satisface las demandas del hombre sin tener en cuenta los límites del sistema.

Otro aparte importante por mencionar es la gradual variación que se permite desde el punto de vista posmoderno donde una persona puede modificar su conducta con base en su estado de ánimo, lo cual sucede casi a diario, constituyéndose en una población ambivalente e inestable en sus principios religiosos, proponiendo una definición de hombre enmarcada en un contexto de libertinaje y desenfreno total.

Para concluir es obvio que la migración de lo tradicional a lo secular de lo religioso trae consigo deformidades en los pensamientos y comportamientos de algunos individuos que más que buscar un beneficio común, sus formas de culto traducen sus propios intereses, los cuales al final terminan migrando al sistema tradicional sin aspiraciones.

De igual manera, la pluralidad religiosa es un fenómeno que no necesita ser demostrado: hay gran diversidad de religiones que se mantienen activas, alrededor del mundo y resulta muy interesante y surge como efecto de una globalización cultural que esta diversidad religiosa se hace más latente en lo cotidiano; es decir, se puede encontrar lo que se quiera, lo que se necesite en términos de multiplicidad de credos. Por lo tanto se puede deducir de esto que la pluralidad religiosa a razón de la posmodernidad no es solo un asunto nacional o internacional, si no interpretaciones propias de un contexto local.

Y por último, todo el fundamento de los nuevos credos bajo la teoría de la posmodernidad hace imposible una de las cualidades más influyentes del sistema tradicional tal como lo es la solidaridad con los necesitados, fragmentando y separando lo religioso de lo social, separación que evidencia cierto egocentrismo pasivo, alejando al hombre de su verdadera razón de ser como un individuo social.

BIBLIOGRAFÍAS

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- Damen, Franz. (2003) “La pluralidad religiosa actual en el mundo y en América Latina.” En Por los muchos caminos de Dios. Desafíos del pluralismo religioso a la teología de la liberación, por F. Damen, 19-23. Quito: Centro Bíblico Verbo Divino y Asociación Ecuménica de Teólogos y Teólogas del Tercer Mundo. http://tiempoaxial.org/textos/PorLosMuchosCaminos-I.pdf

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