Los Grupos Pequeños y la Solidaridad
Enviado por karlo • 13 de Febrero de 2018 • 2.715 Palabras (11 Páginas) • 348 Visitas
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III. APLICANDO EL TEXTO
DISCUTA CON EL GRUPO:
1.Piense en sus motivos o razones para servir. Pregúntese: ¿Qué me mueve?
2.¿Cómo puede fortalecer el estudio de hoy, aún más, su experiencia cristiana?
PARA PENSAR:
Cuando nos despojamos de nuestro yo para servir al prójimo, tenemos una experiencia práctica de lo que es ser un discípulo de Jesús. “Al socorrer al pobre, simpatizar con el afligido y oprimido y amparar al huérfano, os colocáis en una relación más estrecha con Jesús” (El ministerio de la bondad, p. 327).
Debemos recordar que nuestro servicio debe ser hecho como si lo estamos haciendo para Jesús:
• “De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis” (Mateo 25:40).
• “Todo acto de misericordia hacia los necesitados, los que sufren, es considerado como hecho a Jesús” (El ministerio de la bondad, p. 330).
Ese pensamiento debe generar e impulsar nuestras acciones, de modo que todo servicio prestado a nuestro prójimo, sea completo, de calidad, hecho con dedicación dando lo mejor de nosotros.
TEMA 3:
Consolidando relaciones a través de acciones solidarias
ROMPIENDO EL HIELO
Además de Jesús, nuestro mayor ejemplo, piense en un personaje (bíblico o no) que usted admira como un ejemplo de solidaridad. Comparta con el grupo una frase, una acción, un momento que le llama la atención en la vida de ese personaje.
INTRODUCCIÓN
Destacaremos aquí a una mujer y a un hombre cuyos corazones eran solidarios por esencia: Dorcas, una mujer que era parte del ministerio de Pedro, y el Buen Samaritano, un hombre mencionado en una parábola relatada por Jesús. La Biblia no les dedica muchos versículos, pero menciona lo suficiente para remarcar el ejemplo de amor al prójimo ejercido por ambos.
TEXTO PARA ESTUDIAR
1. Hechos 9: 36-43 “La resurrección de Dorcas”
2. Lucas 10: 30-35 “El Buen Samaritano”
DISCUSIÓN
I. CONOCIENDO EL TEXTO
DISCUTA CON EL GRUPO:
1.¿Qué características especiales encontramos en la vida de esos dos personajes?
2.¿Cuál es la tónica en la vida de ambos?
PARA PENSAR:
En cuanto a Dorcas, en el libro El ministerio de la bondad, p. 148, leemos: “En Jope había una [mujer llamada] Dorcas, cuyos hábiles dedos eran más activos que su lengua. Sabía quiénes necesitaban vestimenta adecuada y quiénes necesitaban simpatía […] Y cuando murió Dorcas, la iglesia de Jope se dio cuenta de su pérdida”. En cuanto al Buen Samaritano, en el mismo libro, página 48 leemos: “Tanto el sacerdote como el levita profesaban piedad, pero el samaritano mostró que él estaba verdaderamente convertido”.
DORCAS
EL BUEN SAMARITANO
Era práctica: acción en vez de palabras.
Era práctico: acción en vez de palabras.
Tenía habilidad manual.
Estuvo dispuesto a servir aún en una situación desagradable.
Tenía buen discernimiento: percibía necesidades reales.
Servía con calidad.
Supo prestar los primeros auxilios.
Cultivaba la empatía y simpatía hacia los demás.
Era altruista, dispuesto a sacrificarse en beneficio del prójimo.
Estaba llena de energía.
No hacía acepción de personas: prestó ayuda independiente-mente de la raza, color, clase social o religión del necesitado.
Era liberal con relación a sus bienes.
Dedicó tiempo y recursos propios para resolver la situación.
Fue una bendición para otros.
Servía en armonía con la voluntad de Dios.
Estaba verdaderamente convertido.
II. INTERPRETANDO EL TEXTO
DISCUTA CON EL GRUPO:
1.¿Qué motivó a Dorcas y al Buen Samaritano a servir, y cuál fue la base para la construcción de sus relaciones?
PARA PENSAR:
Ambos tenían un espíritu de servicio motivado por el AMOR.
La muerte de Dorcas conmovió a los que la conocían y a quienes había servido. Fue resucitada para continuar sirviendo a los necesitados, no por el dinero que poseía, sino para que sus habilidades y energía pudieran continuar siendo una bendición para otros.
En la historia del Buen Samaritano, Cristo ilustra la naturaleza de la verdadera religión. Muestra que ésta consiste, no en sistemas, creencias o ritos, sino en realizar actos de amor, en proporcionar a otros el mayor bien, en la bondad genuina.
Dios, todavía hoy, continúa llamándonos para ser agentes de esperanza a través del ministerio de la compasión. “Hay que aliviar a los pobres, atender a los enfermos, consolar a los afligidos y dolientes, instruir a los ignorantes y aconsejar a los inexpertos. Hemos de llorar con los que lloran y regocijarnos con los que se regocijan” (El ministerio de curación, p. 102).
III. APLICANDO EL TEXTO
DISCUTA CON EL GRUPO
1.¿Cómo estoy ejercitándome en las virtudes cristianas de la compasión, del altruismo y de la solidaridad?
2.¿Mi
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