Casos identificados del Feminicidio

Problemática elegida: Feminicidio en Lima Metropolitana

Título: Casos identificados del Feminicidio

Durante la supervisión realizada se logró identificar a 45 expedientes judiciales relacionados al delito de homicidio o tentativa de homicidio, cometidos por varones contra mujeres con las que sostenían o habían sostenido alguna relación sentimental o íntima.

La gran mayoría de los agresores tienen, entre 21 y 35 años de edad al momento de cometer el crimen, lo cual corrobora los resultados obtenidos del MIMP. No obstante, se pude observar agresores de todas las edades, la cual afirma la noción de que la violencia contra la mujer es una problemática intergeneracional. Asimismo, los aspectos analizados en los casos fue el grado de instrucción del agresor. El 29% cuenta con estudios secundarios completos y el 27% incompletos. Por otra parte, también se ha encontrado a algunos agresores que cuentan con educación superior completa (10%) o incompleta (9.5%). Como se muestra, la violencia fue ejercida tanto por personas que solo cuentan con estudios secundarios completos o incompletos como por quienes cursaron estudios superiores, por lo que se confirma la falta de instrucción no puede ser considerada como una de las causas de la violencia en estos casos.

En el perfil de la agraviada el 50% de víctimas son de 18 y 30 años de edad. En cuanto, el 17% tienen entre 35 y 52 años, mientras que el 10% son personas seniles. Esta jerarquía coincide con la estadística en el caso del agresor respondiendo dicha razones ya explicadas. Sobre la ocupación de la víctima, los resultados muestran que, en la mayor parte de los casos estudiados, no se cuenta con la información adecuada. La mayor parte de los agresores eran conocidos y, de hecho, mantenían relaciones sentimentales con la agraviada. En la totalidad de casos, el promedio de mujeres que conocían a sus agresor remota al 90%. Por lo tanto, gran parte de crímenes fueron relacionados por personas muy cercanas a ellas. Por otra parte la estadística de los casos muestra que el 50% de mujeres sufrió la agresión en sus propias casas y un 25% en donde vivía su agresor. Es decir, que gran parte de los asesinatos fueron cometidos en espacios físicos y sociales que garantizan la seguridad de las personas y especialmente de las mujeres. Por esa razón el otro 25% de los crímenes en promedio fue cometido en hoteles; lo cual sugiere la existencia de situaciones de índole sexual entre víctima y agresor. Finalmente, según datos de 2019, solo el 25% de agresores se encuentran detenidos. (PP. 421)