Una acción civil La película

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La demanda crece a tal magnitud que llega a la televisión y el caso torna cada vez más interesante. Cuando se torna la primera junta donde se habla de una moción, la supuesta regla 11, la cual es la respuesta evasiva por la firma defensora de WR GRACE. El juez parece tener una amistad con el dueño de la fábrica. Jan Schlichtmann, no bajo los brazos y el juez consideró ambigua la moción y denegó la misma.

La demanda inicio de manera práctica, los testimonios, las pruebas geológicas así como los considerables gastos que se realizarían a lo largo del caso.

Los testimonios resultaron provechosos para la firma de Jan Schlichtmann y con esos testimonios tomaron la ventaja necesaria para que el caso siguiera creciendo y a favor de la firma.

Con la evolución favorable para la firma de Jan Schlichtmann, era momento de continuar reforzando el cazo, y con ello vendrían más gastos, por ello la firma seguía consiguiendo recursos económicos solicitando préstamos y créditos.

Dentro de la continuidad de la película Jan Schlichtmann hace un análisis en el tema de “ganar un caso”, pues dice: “Toda idea de una demanda, es llegar a un acuerdo, ligar a que la otra parte llegue a un acuerdo, y se hace gastando más dinero del que debes, lo que los forza a gastar más dinero del que debería, y el primero que se rinde es el que pierde.”

Al darse cuenta que la firma de Jan Schlichtmann tiene una ventaja considerable, la firma contraria opta por comentar la opción al juez de que el juicio se detenga con el fin de evitar revivir el dolor de los afectados, el juez toma la decisión de dejar que el jurado tome la decisión, la cual más tarde se determinaría que si se detendría el juicio.

La firma de Jan Schlichtmann invirtió todo lo que tenían para poder darle fuerza nuevamente al caso, tanto así que viajaron a la oficina del dueño, el cual tuvo una junta con Jan Schlichtmann para hablar de un posible acuerdo económico. El dueño determina que 8millones de dólares sería suficiente para solventar los gastos, lo cual para la firma de Jan Schlichtmann sería irse con las manos vacías, con eso apenas y cubrirían los gastos que hicieron y sus deudas.

La situación se volvió contraria para la firma, que sus socios denegaron la continuidad del caso.

Al final de la película, Jan Schlichtmann logra abrir su propia oficina y logra encontrar una persona que fue testigo y pieza clave del caso. Por falta de recursos envía toda la documentación recabada a lo largo del caso, así como las pruebas que se recabaron, y se las enviaron al gobierno de los EEUU y así, el gobierno de EEUU revivió el caso.