Derechos de las personas refugiadas y migrantes

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Asimismo, existen prácticas discriminatorias en torno a la matriculación escolar de niños chipriotas hablantes de turco. A los padres se les exige que matriculen a sus hijos en el centro escolar más cercano a su residencia; no obstante, los niños greco-chipriotas no tienen problemas a la hora de ser admitidos en centros lejos de su residencia.

A pesar de que la ley establece que todos los niños, sin discriminación, tienen derecho a la educación, incluidos aquellos cuyos padres no son residentes legales en Chipre, los centros escolares denuncian ante las autoridades a los niños de familias inmigrantes, lo cual pone de manifiesto qué padres residen en el país de manera ilegal.

Trabajo infantil

El gobierno chipriota ha ratificado el convenio 138 relativo a la edad mínima para trabajar. En virtud de dicha convención, un niño puede trabajar a partir de los 15 años de edad en empleos que no supongan un peligro para su salud. No obstante, los niños a partir de 11 años pueden trabajar después de las clases y durante las vacaciones escolares en negocios familiares.

Dado que el gobierno es incapaz de erradicar el trabajo infantil, el ejecutivo debería definir esta práctica para que los menores puedan trabajar en condiciones apropiadas, con descansos y con un salario. Por ello, el Comité para los Derechos del Niño recomendó que el país ratificara la convención 189 relativa a la protección de trabajadores del país y que prestara más atención a las necesidades de los trabajadores infantiles.

Justicia juvenil

A pesar de las peticiones que durante muchos años llevan realizando desde el Comité para los Derechos del Niño, Chipre aún no dispone de un sistema judicial para menores.

En la República de Chipre, al sur de la isla, la edad mínima de responsabilidad penal es de 14 años. Sin embargo, a partir de esta edad, los niños que cometen un delito grave son juzgados como adultos.

Educación

En los dos estados existentes en la isla, la edad de escolarización es diferente. En la República de Chipre, los niños tienen libre acceso a la educación a partir de los 3 ó 4 años de edad, mientras que en la República Turca solo se ofrece libre acceso a la educación a los niños con edades comprendidas entre los 6 y los 15 años.

A pesar de que la República de Chipre ha ratificado la Convención Internacional de los Derechosdel Niño, persiste un alto nivel de discriminación contra los niños hablantes de turco en los centros escolares al sur de la isla. Muchos de estos niños no tienen un acceso completo a la educación en su idioma nativo.

Asimismo, al sur de la isla, a pesar de que la enseñanza de la religión ortodoxa griega no es obligatoria, pocos estudiantes deciden no estudiarla por temor a ser excluidos. En consecuencia, la enseñanza opcional es considerada como obligatoria debido al miedo a la exclusión.

Niños refugiados

La zona griega permite el estatus de refugiado. No obstante, mientras se estudian las solicitudes de exilio, a los niños se les considera inmigrantes ilegales. Esto implica que no pueden beneficiarse de ayuda o asistencia jurídica alguna, lo que les hace vulnerables al arresto o a la deportación.

En cuanto a la zona turca, no se puede solicitar el estatus de refugiado puesto que el país no lo permite.

Salud

En general, la salud de los niños chipriotas es muy buena. No obstante, el consumo de alcohol y tabaco entre los menores es preocupante. El país es uno de los principales consumidores de cigarrillos del mundo, siendo los niños los fumadores que más cigarrillos consumen. Por otro lado, el consumo de alcohol constituye una parte importante de la cultura grecochipriota y los niños se encuentran entre los consumidores más habituales de esta sustancia.

Abuso

Aunque la República de Chipre prohibió el castigo físico en 1994, esta práctica sigue siendo aceptada socialmente. La violencia doméstica, en concreto hacia las niñas, ha llamado la atención del Comité para los Derechos del Niño. A pesar de las campañas de concienciación, la tasa de violencia infantil permanece en niveles elevados. Este Comité destaca, asimismo, que muchas víctimas no reciben ayuda especializada.

Seguridad vial

En la República de Chipre, la ley establece que los coches que transporten niños deben ir equipados con una silla adecuada a su edad, la cual debe ir sujeta al asiento del coche. Sin embargo, las estadísticas policiales muestran que el 60% de los padres no colocan el cinturón de seguridad a sus hijos durante los trayectos en coche. Este hecho es aún más preocupante si se tiene en cuenta la elevada tasa de accidentes de tráfico existente en Chipre.

Tasa de migración neta: 9,89 migrante(s)/1.000 habitantes (2014 est.)

Definición: Esta variable incluye la cifra correspondiente a la diferencia entre el número de personas que entran y salen de un país durante el año por cada 1000 habitantes (basada en la población medida a mitad del año). Un exceso de personas que entran al país se conoce como la inmigración neta (por ejemplo, 3,56 migrantes/1000 habitantes); un exceso de personas que abandonan el país se conoce como la emigración neta (por ejemplo, -9,26 migrantes/1000 habitantes). La tasa neta de migración indica la contribución de la migración al nivel total de cambios demográficos. Altos niveles de migración pueden causar problemas tales como el aumento del desempleo y posibles conflictos étnicos (si las personas están llegando a un país) o una reducción en la fuerza laboral, quizás en sectores clave (si las personas dejan un país).

Tasa de desempleo: 17,4% (2013 est.)

11,9% (2012 est.)

Definición: Esta variable incluye el porcentaje de la fuerza laboral que está sin empleo. Sustancial subempleo es a veces indicado.