“PRACTICA 2: ARBOL TRAQUEOBRONQUIAL”

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Está compuesto esencialmente por tejido muscular, el miocardio; y en menor proporción, por tejido conectivo y fibroso, los tejidos de sostén y las válvulas. También se subdivide en cuatro cavidades, dos derechas y dos izquierdas, separadas por un tabique medial. Las dos cavidades superiores son llamadas aurículas y las dos cavidades inferiores se denominan ventrículos. Cada aurícula comunica con el ventrículo que se encuentra por debajo mediante un orificio (orificio auriculoventricular), que puede estar cerrado por una válvula, y las cavidades izquierdas no comunican con las derechas en el corazón.

MATERIALES

Bata quirúrgica.

- Guantes.

- Cubre pelo.

- Cubre boca.

- Estuche de disección.

- Asadura de res o cerdo.

PROCEDIMIENTO

Como primer paso , nos colocamos el equipo de protección de la manera adecuada (bata, guantes, cubre pelo y cubre boca. Una vez hecho esto, colocamos la asadura en nuestra mesa de disección evitando el derrame de fluidos.

Primero se separo el corazón del resto de los órganos, cortando las arterias y venas pulmonares con ayuda del bisturí, las tijeras rectas y los separadores Farabeuf.

Para la disección del corazón tomamos en cuenta su posición anatómica (de lo medial ¾ a la izquierdo y de atrás hacia adelante). Comenzamos cortando tejido del septum y en base a este diseccionamos el resto del corazón. Al abrirlo completamente pudimos observar de manera clara los ventrículos y sus válvulas, tricúspide y mitral respectivamente, junto con las aurículas y las válvulas lunares. También observamos detalladamente las cuerdas tendinosas que partían de cada válvula y su desembocadura en los músculos papilares.

[pic 3]

Hecho lo anterior comenzamos con la disección del árbol traqueobronquial. Cabe mencionar que, debido a que el objetivo de esta práctica no era la disección pulmonar, no se respetó en lo absoluto a dicho tejido.

Comenzamos con la parte inferior del árbol, debido a que nuestra asadura era de vaca, nos permitió una fácil disección, ya que los bronquios y bronquiolos se podían localizar a través del tacto y de manera muy superficial sin necesidad de profundizar tanto.

Comenzamos cortando la língula del lóbulo inferior del pulmón izquierdo (el segmento número 5), lo que nos permitió llegar a los bronquiolos. Lo único que tuvimos que hacer fue seguir la ramificación de manera ascendente, es decir, comenzamos diseccionando los bronquiolos y seguimos hasta llegar a los bronquios lobulares, posteriormente pasamos a los bronquios principales para así llegar a la tráquea.

Con el pulmón derecho se siguió el mismo procedimiento, comenzando por la parte inferior hasta llegar a la tráquea.

Para todo lo anterior se necesitó de tres personas, la primera manejaba el bisturí, la segunda las tijeras rectas y las pinzas Kelly rectas, mientras que la tercera se ocupaba de los separadores Farabeuf y las pinzas de disección con y sin dientes[pic 4]

CONCLUSIONES

A través de la realización de esta práctica terminamos de comprender, tanto la estructura del árbol traqueobronquial, como la estructura del corazón.

Pudimos observar como la tráquea se bifurca para formar los bronquios principales y como estos también se bifurcan dando origen a los bronquios lobulares; y como la ramificación se continúa hasta dar origen a los bronquiolos (palpables) y estos a su vez se envaginan para formar los alveolos (no palpables.

Así que podemos afirmar que nuestros objetivos, tanto el general como los específicos, se vieron cumplidos en el desarrollo de la práctica de manera satisfactoria.[pic 5]