Importancia de la radio en la educación

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desde 1955, y que estaba dirigido a la población excluida, para construir un proyecto de transformación social, basado en los valores cristianos de justicia, participación y solidaridad. Este programa atendía a los niños y niñas de los sectores populares de todo el país, pero para el padre Vélaz, no era suficiente pues los adultos que habían dejado la escuela o que nunca tuvieron la oportunidad de ingresar quedaban excluidos. Fue así como nació la idea del Instituto Radiofónico Fe y Alegría en agosto de 1976, al principio solamente para dar clases por radio, después se desarrolló una programación informativa, educativa y de entretenimiento.

Es importante resaltar que el empleo de la radio como medio para la educación por muchos años y en diferentes latitudes ha representado, en algunos casos, la única oportunidad de acceder a la enseñanza formal y en otros un recurso complementario de gran ayuda. En ambos casos la educación radiofónica tiene sus aspectos positivos y negativos. Entre los aspectos positivos, como dicho por López (1997) se cuentan la flexibilización de la educación, lo que hace que la información llegue, como se dijo antes, a áreas y personas que por sus condiciones no tienen acceso a la misma. La ventaja de la inmediatez y el alcance de los contenidos, ya que se reciben al instante y llegan a grandes grupos al mismo tiempo y en iguales o diferentes lugares. Además se puede escuchar mientras se realiza cualquier otra actividad, incluso viajar, sin representar esto la necesidad de abandonar las ocupaciones. Es además un espacio que permite desarrollar la imaginación y la creatividad del estudiante. De igual forma reduce los gastos de traslado del discente así como también de la logística. Sin embargo a pesar de sus bondades también García (2002 p 5) explica que por ser unisensorial, su empleo puede causar dificultades a algunos aprendientes debido a la ausencia de imágenes que refuercen el contenido, esto si tomamos en cuenta los diferentes estilos de aprendizaje. La inmediatez que puede representar una ventaja, puede ser también una desventaja porque el contenido en algunos casos resulta efímero si lo comparamos con un medio escrito. Finalmente aunque no menos importante, es difícil para el docente medir los avances y realizar la evaluación de los contenidos por no estar presente durante el proceso.

La educación radiofónica es un instrumento que aunque no está en desuso, no goza de gran difusión debido al desarrollo de nuevas tecnologías que tienen más alcance y mayores ventajas. Aun así El Estado pudiese incluir en sus planes el uso de esta herramienta para obtener mejores resultados. Aunque contamos con misiones educativas y que la educación formal alcanza la totalidad de nuestro territorio, somos conscientes de que los contenidos promovidos por la radio en general no son del todo educativos por lo que el estado pudiera promover más espacios educativos en las emisiones de radio dando concesiones a aquellos docentes que deseen crear y difundir dichos espacios para que alcance a aquellas personas que no pueden o no desean formar parte de la educación formal. Las instituciones educativas por su parte pudiesen utilizar el recurso ubicando transmisiones radiofónicas que contengan contenidos curriculares diversos. También pudieran hacerse de las versiones radiales transmitidas por internet.

La experiencia educativa de la radio en América Latina demuestra la importante labor que en este sentido han desempeñado las emisoras, en especial la labor desarrollada por el IRFA, que ha aplicado por muchos años estrategias comunicacionales que la ubican como una de las pioneras en la educación popular.

La tarea desarrollada por Fe y Alegría en Venezuela, con sus apena nueve emisoras, permitió impulsar la democratización de la palabra en los sectores más desfavorecidos del país.

En términos generales, la radio aun cuando su propósito no sea educar, puede ofrecer diversidad de programas con temas de interés general: ecología y ambiente, historia, geografía, valores, ética, lenguaje, identidad cultural, música y aspectos de la realidad local, nacional e internacional, que pueden ser usados de manera efectiva y eficiente, con fines educativos aportando a la sociedad una gran contribución pues el ser humano debe estar siempre dispuesto a seguir aprendiendo.

REFERENCIAS

1. Figueroa, R. (1997). Qué Onda con la Radio. México. Editorial Alhambra Mexicana.

2. Espinoza, F. Velasco, A. (1992). Capacitación para la radio popular. La experiencia de ALER y una propuesta metodológica. Ecuador Edición ALER.

3. Peppino, A (1998). Radio educativa, popular y comunitaria en América Latina. La formación de un nuevo sujeto social. Signo y Pensamiento. Volumen XVII, No.33. Segundo semestre de 1998. Pontificia Universidad Javeriana. Santafé de Bogotá Colombia.

4. www.feyalegría.org/: Fe y Alegría. Movimiento de Educación Popular Integral y Promoción Social (consultado el 015/05/2017).