¿Cómo pensamos? Nueva exposición de la relación entre el pensamiento reflexivo y proceso educativo".

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El pensamiento reflexivo surge de un sentimiento de duda, el cual requiere de investigación para poder enclarecer dicha duda. Obviamente un problema a resolver trae implícitamente una duda por resolver, un problema puede ofrecer diversas alternativas para resolverse, forzosamente hay que elegir cuales son las más viables por lo que es necesario reflexionar acerca de lo que está al alcance y lo que simplemente no está.

Dependiendo del problema se determina el pensamiento para llegar a una solución, y la finalidad conduce a la forma en que se ha de pensar. Todo pensamiento que ha de surgir debe nacer por una razón, no es algo espontáneo, sino que es provocado por algo que haya sucedido.

El pensamiento reflexivo aparece como una necesidad en la educación porque permite la planeación de actividades de acuerdo a los objetivos que un educando se podría plantear y que le ayudaría a definir los obstáculos que podría enfrentar y la forma en los que los afrontaría. El pensamiento puede conducir a ideas erróneas o acertadas, pero la educación limitaría más las concepciones erróneas y abriría mayor espacio a las acertadas.

Para educar de acuerdo al pensamiento además de tener conocimiento sobre la forma de su manera de operar también es necesario contar con actitudes que la propicien.

- Tener mentalidad abierta

- Entusiasmo

- Responsabilidad

Estos son 3 pilares que dirigen la educación del pensamiento, es una tarea complicada que requiere de compromiso y del ejercicio de cada una de las actitudes para que pueda cumplirse el objetivo o al menos aproximarse al mismo.

Existen disposiciones naturales que nos permiten pensar de forma más eficaz conocidas como innatas, entre ellas la curiosidad que es estimulada por lo que nos rodea y nos incita a averiguar las razones que permiten que así sea, Bacón señala que para poder investigar hay que convertirse en niños, pues es muy común que los niños manifiesten su curiosidad preguntando sobre todo aquello que les llama la atención. A cierta edad la curiosidad se esfuma y no permite que se planteen deseos de saber sobre algo, por lo tanto resulta una tarea que debe emprender el profesor, despertar la curiosidad en sus educandos.

Las sugerencias son ideas que indican la relación que hay entre cosas y objetos, nada está aislado, todo viene acompañado de algo, y esto da origen a pensamientos ya que un objeto recurre a que se piense en otro y se vayan encadenando, el pensamiento exige cierto nivel intelectual y orden para el acomodo de las ideas de acuerdo a un objetivo al que se pretende llegar.

Las condiciones escolares determinan el nivel de pensamiento que se formará en los educandos, las creencias que ya trae el alumno de acuerdo al contexto en el que vive deben ser fusionadas con los saberes formales que promueve la escuela. El maestro por su lado trata de interrogar a sus alumnos de manera que las respuestas que éstos den vayan siendo dirigidas hacia los propósitos que un contenido sugiere que deben conocer los alumnos.