Dieta Slow-carb

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REGLA #3: NO BEBAS CALORÍAS

Toma cantidades abundantes de agua y tanto té o café (menos de dos cucharadas de crema; sugiero en su lugar la canela) sin endulzar, o cualquier otra bebida sin o baja en calorías como gustes. No bebas leche (incluyendo leche de soya), refrescos normales o jugos de fruta. Limita los refrescos de dieta a no más 16 onzas[4] diarias si puedes, ya que el aspartame puede estimular el aumento de peso.

Soy fanático del vino y tomo una o dos copas de vino tinto casi todas las noches. No parece tener ningún impacto negativo en mi ritmo de pérdida de grasa. El vino tinto no es requerido de ninguna manera en esta dieta para que funcione, pero está 100% permitido (a diferencia de los vinos blancos y la cerveza, los cuales deben ser evitados).

Hasta dos copas de vino tinto por noche, nada más.

REGLA #4: NO COMAS FRUTA

Los humanos no necesitamos fruta seis días de la semana, y ciertamente no la necesitamos todo el año. Si tus ancestros fueron de Europa, por ejemplo, ¿cuánta fruta crees que comían durante el invierno hace 500 años? ¿Crees que comían naranjas de Florida en Diciembre? De ninguna manera. Pero tú estás aquí, así que el linaje sobrevivió de algún modo.

Las únicas excepciones a la regla de no-fruta son los tomates y aguacates, y estos últimos deben comerse con moderación (no más de una taza o una comida al día). Fuera de esto, simplemente di no a la fruta y su principal azúcar, la fructosa, la cual se convierte en fosfato de glicerol de manera más eficiente que casi cualquier otro carbohidrato. Fosfato de glicerol → triglicéridos (a través del hígado) → depósito de grasa. Hay unas pocas excepciones bioquímicas para esto, pero evitar la fruta seis días por semana es la política más confiable.

¿Pero de qué se trata eso de “seis días por semana”?

El séptimo día te permite, si así lo deseas, comer crepas de durazno y pan de plátano hasta que entres en estado de coma.

REGLA #5: TÓMATE UN DÍA LIBRE POR SEMANA

Recomiendo el sábado como tu día de “Salvajes a Dieta”. Se me permite comer lo que sea en los sábados, y me doy rienda suelta para comer helado, Snickers, y todos mis otros vicios en exceso. Si bebiera cerveza, bebería varias Paulaner Hefe-Weizen. Me ataco un poco cada sábado y no quiero ver ningún alimento chatarra por el resto de la semana. Paradójicamente, elevar dramáticamente la ingesta calórica esta sola ocasión por semana aumenta la pérdida de grasa asegurando que tu tasa metabólica (función tiroidea y conversión de T4 a T3, etc.) no baje la velocidad de la restricción calórica extendida.

Es correcto: comer basura puede ayudarte a perder grasa. Bienvenido a la Utopía.

No hay límites durante este día de disfrute glotón. No hay absolutamente ninguna cuenta de calorías en esta dieta, en este día o cualquier otro.

Comienza la dieta al menos cinco días antes de tu día designado para hacer trampa. Si eliges el sábado, por ejemplo, te sugiero que empieces tu dieta en un lunes.

¡Eso es todo, amigos!

Si nuestros padres fundadores pudieron resumir nuestro gobierno en una constitución de seis páginas[5], lo anterior es todo lo que necesitamos para resumir la pérdida rápida de grasa para el 99.99% de la población. Seguida al pie de la letra, jamás la he visto fallar. Nunca.

Cuando te sientas preso de los detalles o confundido por el más reciente y más grande consejo contradictorio, regresa a este capítulo. Todo lo que necesitas recordar es:

Regla #1: Evita los carbohidratos “blancos” (o lo que sea que pueda ser blanco).

Regla #2: Come las mismas pocas comidas una y otra vez.

Regla #3: No bebas calorías.

Regla #4: No comas frutas.

Regla #5: Tómate un día libre por semana y alócate.

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