ENTORNO POLÍTICO, SOCIAL Y ECONÓMICO DE LA EDUCACIÓN, LA ESCUELA Y COMUNIDAD DESDE EL CONTEXTO COLOMBIANO

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Generalmente son pocas las Instituciones que se han involucrado en cambios sociales y educativos tan profundos como la familia. La religión tiene menos influencias y los expertos y los medios de comunicación logran impactar más a la sociedad.

Un fenómeno que se presenta con más frecuencia en la vida familiar, es acceso de la mujer a la vida laboral, delegando el cuidado de sus hijos a los abuelos o personas particulares. El pasado repercute en la actualidad ya que la madre de alguna manera debe encargarse de la organización familiar, de las tareas domésticas, limitando el tiempo con su familia, en muchos casos el matrimonio resulta irreparablemente afectado. Por esta razón en la actualidad las mujeres con más estudio tienen menos hijos que las que carecen de él, ya que no ven la maternidad como proyecto principal.

La comunicación entre padres e hijos ha crecido considerablemente, teniendo en cuenta que la permisividad excesiva también tiene graves consecuencias, haciendo que esta labor sea compleja y sedienta de preparación.

Desafortunadamente otro de los factores que afecta especialmente a las mujeres, es el divorcio o separación, ya que en la mayoría de los casos asumen el cuidado de los niños. Pero las investigaciones también han revelado que es más favorable para los hijos vivir con padres divorciados, pero con una convivencia armoniaca, que vivir con padres en conflictos continuos.

Otra de las causas que pueden incidir en la familia y generar violencia y maltrato intrafamiliar, son los problemas económicos. Sin embargo se ínsita a la revalorización de la familia como espacio afectivo y a la búsqueda continua de respuesta a nuevas necesidades.

Ahora bien, debemos considerar la relación Familia-Escuela, como el pilar sobre el cual se construye el proceso educativo, sus funciones son complementarias, ya que estas dos instituciones se han encargado de cuidar, nutrir, educar y preparar a las nuevas generaciones, para la inserción en la sociedad y en la cultura.

A pesar de que los padres desean el éxito de sus hijos en la escuela, la falta de comunicación entre estas dos instituciones ha sido el motivo del fracaso y el deficiente y escaso rendimiento de los niños. Esto se evidencia en los padres que por temor o desconocimiento, se desinteresan de las escuelas. A excepción de algunos que quieren hacer valer sus opiniones con respecto a la tarea educativa, pero, ¿es suficiente? La respuesta es no, debido a que también es necesario que se plantee otro interrogante ¿Cómo contempla la legislación esta realidad? La manera más adecuada de superar estos obstáculos es por medio de la colaboración Escuela-Familia, ya que el sistema educativo se ha complejizado debido a que no cuenta la una con la otra, tomando conciencia con sus respectivos roles específicos y complementarios.

La familia y la escuela son parte de un sistema social, cultural y económico. La comunidad a la que pertenecen determina su desarrollo dependiendo de las influencias políticas y económicas de ella. Esto puede afectar positiva o negativamente a las instituciones, en la familia que desea progreso en cada uno de sus miembros y en la escuela que busca ofrecer un ambiente adecuado que facilite los conocimientos de los alumnos.

Es habitual que en la escuela se perciban costumbres diferentes, diversidad de culturas, valores que a menudo cambian, presentes en la realidad social, lo que ha logrado que los padres tengan expectativas en función de sus realidades y por otra parte la escuela espera actuación de los padres y su implicación en ella, siendo muy exigentes, sin percatarse de sus problemáticas, lo cual genera dificultades y contradicciones.

Las nuevas demandas y necesidades hace que se generen transformaciones en los diferentes contextos, cada familia se basa en el modelo de sociedad al que pertenecen, se encarga de transmitir valores, normas y conductas, convirtiéndose en la base para la integración de cada miembro en la comunidad, permite que se identifique la personalidad de cada uno y se adapten a una sociedad con avances científicos y tecnológicos.

La escuela también presenta muchas dificultades al momento de educar y orientar en valores, actitudes y comportamientos, por esta razón nace la necesidad de una reflexión conjunta, de contribuir en un mejor proceso educativo, por medio de la participación y conexión entre Familia-Escuela-Comunidad.

Pero acompañado de todas estas problemáticas, nos encontramos con la falta de un Estado Nacional fuerte y comprometido con una estabilidad macroeconómica, muchos de los ingresos cedidos por los colombianos, por medio de impuestos, no son utilizados para fines como salud, infraestructura y en especial educación. Lo que en realidad necesita el país es un sistema legal basado en el mérito, que sea imparcial y eficiente que le devuelvan al país la confianza en las instituciones que lo gobiernan.

Los recursos públicos son hurtados y explotados por supuestos profesionales a quienes delegan el oficio de la política. Por otra parte están las Instituciones de vigilancia, convertidas en cobradoras de peajes, por así decirlo, para aquellos que requieren de su visto bueno. La cooperación para que el gasto público sea clave para el desarrollo económico y de equidad social, está ausente y en su lugar abunda la mediocridad en el sistema educativo.

Los grupos armados compiten por los territorios, expandiendo la violencia. Con una mirada crítica y profunda hacia la realidad, Desolador es el panorama de nuestro país. Es muy probable que esta situación de deterioro se minimice a partir de un surgimiento de una reforma política, trayendo consigo nuevos partidos políticos, la ampliación de sindicatos, gremios, asociaciones de padres de familia que influyan en la educación de las Instituciones públicas y privadas, clubes deportivos y sociales, asociaciones comunales, campesinas y no gubernamentales activas. Cada una de estas deberá estar informadas de su relación con la política, los funcionarios deben demostrar que invierten adecuadamente nuestros recursos.

Dicho todo lo anterior, se puede concluir que si hubiera un profundo análisis por parte de los ciudadanos y de las organizaciones no gubernamentales, acerca del gobierno municipal, departamental y nacional, no se concentraría tanta corrupción dentro del estado colombiano, ya que las contralorías, procuradurías y supuestos entes de control son propulsores de la misma. Debe de haber más inclusión y procesos educativos que permitan que los ciudadanos se acerquen a la política Nacional.

Una cosa es lo que está estipulado en papel, por medio de normas y leyes, y