La importancia que tiene para el director establecer relaciones de confianza

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Los individuos no sienten que están laborando, sino que consideran que se dirigen a un sitio a disfrutar de su labor, debido a que se están desarrollándose en lo personal y en lo profesional, ya que son tomados en cuenta, divisan y evidencian en todo momento que son valiosos y que tienen ese reconocimiento de quienes otros llaman patrones y para ellos son compañeros y colaboradores. La persona que dirige no tiene que elegir una posición de lejanía con respecto del resto de los que ocupan otra posición en el organigrama de trabajo. Deben estar hombro con hombro, rolando incluso el sitio para apoyar ahora a uno en el quehacer que tiene, luego al otro para hacerle sentir nuestra presencia y apoyo. En los sitios donde hay relaciones de confianza no hay nada por qué temer. Las personas y sus actos son más transparentes. Cuando alguien tiene una necesidad, no se necesita más que expresarla para que el resto del equipo comience a proponer formas de apoyar o de solucionar dicho inconveniente.

Dentro de una institución educativa, cada individuo debe tener un claro entendimiento de cuál es su rol y cuáles son los roles y obligaciones de los otros. Este entendimiento compartido de normas y valores, y sus objetivos en el interior de las organizaciones, promueve el establecimiento y permanencia de relaciones basadas en la confianza (Bryk & Schneider, 2002). Por lo tanto es crucial que la labor directiva se ejerza con responsabilidad, diplomacia y objetividad, para poder fungir la labor como está determinado, ofertando y orientando al docente para impulsarlo a la excelencia profesional y por ende proyecte una educación de calidad.