Me encantan las biografías.

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Pero sin duda, el hecho por el cual ha sido mundialmente reconocido fue por el acto heroico de, aún con la posibilidad de salvarse de ir a los « campos de concentración » decide por voluntad propia acompañar a los internos que habían sido enviados ahí. Esta entrega y dedicación total a sus convicciones y a su amor por la infancia lo llevó a ser reconocido hasta nuestros días. [pic 2]

- Mi tío Carlos

Hermano menor de mi mamá, desde muy temprana edadnle detectaron cáncer y, al mismo tiempo, una reducida esperanza de vida. Dedicado a las artes escénicas contagió a toda la familia de su amor por el teatro y la actuación.

Orgulloso de su origen y de su familia, no había persona que no se deleitara con sus narraciones de la vida en Xochimilco : el mercado, los barrios, las fiestas, la gastronomía y las increíbles tradiciones que todavía encuentran su mayor expresión en medio del caos que se vive día a día en la gran Ciudad de México.

Heredó el amor por la docencia y trabajó como docente por varios años. Amante de la gastronomía y del baile. No había mujer –especialmente mi abuela- que se resistiera a su invitación de divertirse en la pista de baile.

Después de interminables visitas al médico y múltiples intervenciones quirúrgicas, el pasado diciembre su hígado no resistió más. Fueron dos semanas en las cuales todos los familiares estuvimos a la «espera » de que su cuerpo respondiera o no.

Finalmente, el 16 de diciembre, justo el día en que inician las tradicionales Posadas, el tío Carlos, a la edad de 45 años y superando, gracias a los cuidados de mis abuelos regresó a la casa del Padre a disfrutar de la paz y la alegría de encontrarse « cara a cara » con nuestro buen Dios. QEPD.

« Una aventura evangélica », ése es el título que originalmente debería llevar este artículo. Pero intencionalmente lo dejé casi para el final.

¿Qué significó para estos tres personajes vivir una « aventura evangélica »? Probablemente ninguno de ellos se trazó un camino vocacional como el que les tocó vivir; pero el dolor, la incomprensión, el sacrificio de sus propias vidas, los miedos, sus propias debilidades fueron quienes seguramente los empujaron a « no darse por vencidos », a luchar día a día por lo más básico y humano que existe : su propia vida.

« Una aventura evangélica » representa para mí la vida de cada persona; es una invitación a caminar, a correr, a tropezarse, a levantarse, a detenerse, pero siempre hacia intentando llegar a nuestra META, hacia la felicidad y al encuentro del verdadero AMOR que tanto anhelamos.

Hermanos y colaboradores, que este año y en la víspera de celebrar la Pascua de Jesús, y con la de Él la de todos nosotros nos dejemos acompañar en nuestra aventura por María, ella que con su FIAT nos enseñó que no hay mejor aventura que seguir a Aquél que es « Camino, Verdad y Vida ». Dios les bendiga.

Hno. Daniel B. Montes de Oca Lindoro fsc

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