Publicidad chicha

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Además, el atractivo de sus colores tiene una implicación psicológica, según Chuchón (2015): " La psicología del color sostiene que cada tono cromático despierta sensaciones y emociones en la persona", de acuerdo a él; el color naranja o amarillo, posee un poder de atracción, pues otorga la idea de energía, alegría, felicidad, que es lo que se lo que se quiere transmitir a la hora de promocionar un concierto, y son tonos que deben ser utilizados si se busca que la juventud se identifique inconscientemente, pues poseen gran impacto visual y, al ser estridentes para los sentidos, no pasan desapercibidos. Por otro lado, el verde es la representación simbólica de la esperanza, la cultura chicha, donde tiene mayor éxito es en los estratos sociales populares donde la esperanza por llegar a algo mejor se encuentra latente entre sus pobladores; por otro lado, el azul que es un color que también se utiliza, se asocia con la calma o paz que y manifiesta que un evento será casual y seguro. Estos colores con la ayuda de un fondo negro, que ayuda a resaltarlos, son lo más utilizados en los carteles “chicha”.

Por último, si se analiza la caligrafía que se utiliza en dichos anuncios publicitarios, se aprecia que el tipo de letra utilizado se caracteriza por trazos gruesos, que aluden a una escritura manual que, hoy en día, está siendo muy utilizada en las distintas campañas publicitarias debido a que es atractiva a primera vista.

El conjunto de todos estos elementos logran a la perfección el objetivo de atraer la mirada de las personas sin necesidad de un diseño gráfico muy trabajado, de acuerdo a Chuchón (2015): “La técnica publicitaria, en sus ejemplos mejores, parece fundada en el presupuesto informativo de que un anuncio atrae más la atención cuando más viola las normas comunicativas usuales”, esto está íntimamente relacionado con la publicidad chicha por lo impactante de sus colores, por el tamaño de sus letras y porque no respeta la norma de afiches publicitarios de dejar algunos espacios en blanco, sino que, aprovecha toda la superficie del cartel para transmitir un mensaje.

Relación de la gastronomía peruana con los afiches Chicha

La gastronomía es la máxima representación del Perú, al ser considerada la gastronomía peruana como una de las más diversas del mundo, esto se debe a las fusiones de platos típicos de diversos lugares que son observados, que son evidencia de la pluriculturalidad del ya mencionado país.

La creatividad del peruano, en la actualidad, ha logrado la difusión de la gastronomía peruana en base al uso de publicidad chicha, debido a que esta tiene muchas características distintas y atractivas, siendo la principal, los colores peculiares y llamativos que son utilizados para la promoción de un evento o lugar.

Elliot Túpac es el mejor artista y diseñador de afiches chichas, este hombre fue el que superó los esquemas cuando fue convocado para participar en el festival gastronómico Mistura del 2012. Los afiches presentados en el evento hicieron que los visitantes sientan una atracción hacia los colores y diseños mientras disfrutaban de la rica comida peruana. Fue desde este momento que los representantes gastronómicos se dieron cuenta que la fusión de la publicidad chicha y la gastronomía había sido un éxito.

Actualmente, en la mayoría de restaurantes peruanos se trata de adornar con combinaciones de propaganda chicha con el objetivo de atraer al cliente y de hacer sentir a los comensales que lo popular está presente sin discriminación a nadie.

“Ha surgido un vigoroso movimiento cultural que ha encontrado vías de adaptación en nuevas condiciones” Gargurevich (2002, p. 27), lo mencionado por este autor, al ser relacionado con el ámbito gastronómico, lleva a la consideración de la gastronomía como una vía de adaptación. Los verdaderos peruanos se sienten identificados con la cultura popular y estos afiches trasmiten mensajes del peruano trabajador y sobresaliente, que busca sacar adelante a su familia para que estos tengan una mejor calidad de vida. Aquí radica, principalmente, el éxito de este tipo de propaganda en los sectores populares. Sin embargo, al hablar de los sectores más “selectos”, entendiéndose a sectores selectos como aquellos con mayor influencia política social y económica, la situación es distinta, debido a que, en estos casos, la aceptación de la cultura chicha se da como parte de seguimiento de la moda publicitaria.

Se puede evidenciar entonces que la difusión de la gastronomía peruana a través de la publicidad chicha ha sido un éxito, con aceptación por parte de los distintos sectores de la capital del Perú, y que lo “chicha” está de moda en el ámbito de marketing y publicidad de un restaurante.

Conclusión

La publicidad chicha es un tipo de propaganda que ha estado latente en la sociedad peruana desde la formación de las primeras agrupaciones de música chicha alrededor del país, como resultado de las migraciones de amplios sectores poblacionales realizadas desde el año 1940, movimientos que tenían como principal objetivo el cambiar la precaria situación en la que se encontraban las provincias del Perú: “Abandono”. Debido a que, según lo mencionado por Matos Mar (1980), en esos años en el Perú existía un “Perú oficial”, que era la capital, Lima; y “El otro Perú” que eran los territorios del país fuera de su ciudad principal que se encontraban olvidadas por el estado, por lo cual carecían de servicios de salud, educación, trabajo y, en muchos casos vivían en pobreza.

En sus inicios, la publicidad chicha, al igual que el género musical con el mismo nombre, no fue aceptada debido a que era considera como “extravagante e impropia” por parte de la cultura limeña antigua; sin embargo, con el pasar de los años, ésta fue ganando aceptación en la capital, y esto se evidencia en el hecho de que hoy en día un gran número de restaurantes u otras empresas hacen uso de la publicidad chicha para promocionar sus negocios.

El interés de los distintos grupos sociales por la publicidad chicha se da porque es un reflejo claro de un mestizaje cultural, del peruano que busca salir adelante, por el uso de un humor que evidencia el día a día de la sociedad peruana y por los colores resaltantes y festivos que, en primera instancia, son llamativos a la vista y, en segunda instancia, poseen un mensaje que habla de la modernización, adaptación y desarrollo de los sectores populares migrantes en Lima, la capital del país. Al tocar estos temas, hablan de situaciones cotidianas del peruano y, el publicitar lo cotidiano, establece