Tributaria reseña

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posición, que puede ser un cargo, poder sobre una persona con un cargo y esto lo utiliza para beneficiar terceros, una de las características de la corrupción es pretender parecer legal y legitima. Según el informe de la ONG transparencia internacional del año 2013 para países en Latinoamérica, en una escala de 0 a 100 donde 0 (sumamente corrupto) y 100 (muy trasparente), Colombia obtuvo un puntaje de 36.

Podemos deducir que la corrupción existe por la búsqueda de un bien particular pero con la aceptación sociocultural sin importar que en la búsqueda de dicho bien particular se ocasione afectaciones al bien colectivo, donde el poder político también influye debido a que los recursos deben de ser manejados por los funcionarios del Estado, pero no solo existe corrupción en gran escala, ser corrupto además de ser cultural también es personal, tan sencillo como realizar un pequeño pago para que el policía de tránsito y transporte no nos aplique a una multa por una infracción, como ir de manera innecesaria para solicitar servicios médicos y obtener medicamentos innecesarios que le quitan la posibilidad a otros ciudadanos que en verdad lo necesitan, en fin para reducir los niveles de corrupción es necesario cambiar de pensamiento y así poder cambiar nuestra conducta tanto individual como colectiva.

El fenómeno de la corrupción en Colombia, (ya sea tráfico de influencias, o en forma de obtención de favores ilícitos a cambio de dinero) constituye una vulneración de los derechos humanos por cuanto que generalmente entraña una violación del derecho a la igualdad ante la ley, y en ocasiones, llega a suponer una vulneración de los principios democráticos, conduciendo a la sustitución del interés público por el interés privado de quienes se corrompen. Uno de los principales problemas que podemos evidenciar en nuestro quehacer diario es el soborno, es dar dinero a una persona para evitar ser sancionados. Además, algunos políticos de turno gestionan recursos del heraldo público para realizar determinados proyectos y en ese trámite burocrático se presenta la desviación de los recursos para beneficio propio.

Los funcionarios públicos con abuso de su cargo, comete u ordena “cualquier acto arbitrario en perjuicio de la Administración o de los particulares”, ocasionando abuso de funciones.

La colusión, el que no tranza no avanza, es venderle unos bienes y servicios al estado con unos sobre costos, obteniendo unos beneficios particulares generando un déficit en el tesoro nacional.

El tráfico de influencias, hay te encargo a mi compadre, es uno de los grandes problemas que se presenta a la hora de contratar funcionarios públicos denigrando los méritos de algunos profesionales idóneos para ejercer la función pública. Esto conlleva a que se presente en la rama judicial en algunos casos la obstrucción en la justicia.

En nuestro país, el foco principal del problema se sitúa en la contratación estatal, por donde se van las esperanzas de progreso de millones de colombianos. Aquí está el principal problema de la corrupción y ejemplo de ellos son odebrecht, carrusel de contratación en Bogotá, isagen, etc. Solamente para hablar de algunos casos. Se han destapado muchas ollas podridas que ha medida del tiempo van a ir creciendo.

Vamos hacia un mejor país, si se aplican con rigor todas las políticas anticorrupción. Atacando la corrupción que se debe empezar desde de la casa y desde la niñez para hacia crear una generación pura.

Debido a los resientes estudios estadísticos del Observatorio Anticorrupción de la Presidencia indican que el 50% de los condenados por delitos de corrupción no pagan un solo día de cárcel, y el 25% reciben beneficio de casa por cárcel.

A través de este estudio podemos concluir que para los corruptos en Colombia no hay ley, y mientras no haya una justicia que se vea reflejada en una pena contundente intramural ejemplar, de nada nos sirve realizar reformas tributarias que ayuden a subsanar ese hueco