Apuntes de Investigación Judicial

INVESTIGACION JUDICIAL

No hablaremos de la investigación tribunalicia, que es la investigación que se lleva a cabo en las oficinas de la fiscalía o los juzgados de instrucción. Nos ubicamos entre el espacio comprendido entre la criminalística y el derecho procesal penal, este espacio que generalmente queda en blanco, que no es tratado ni en los cursos ni en la bibliografía y que tiene que ver con la investigación de los hechos criminales en la calle y en el escritorio. ¿Cuál es el nexo que existe entre la prueba de tipo científica y la prueba testimonial y la fiscalía? Cuál es el filtro, que es lo que está entre medio de ambas, para que lleguen a la causa y se vean plasmados como prueba.

Comúnmente se divide a la criminalística en dos áreas: criminalística de campo (con incumbencias relacionadas al lugar del hecho) y criminalística de laboratorio (con el tratamiento de aquellas evidencias recolectadas en las distintas áreas, gabinetes), y de acuerdo a cada uno de los métodos propios de cada una de estas disciplinas que conforman la criminalística.

¿Qué sucede luego de la intervención de estas dos áreas? Viene una tercera etapa que se llama criminalística interpretativa, es una etapa crítica de interpretación de cómo se reconstruye el hecho que luego se va a ver reflejado en la causa, esa hipótesis fáctica, a partir de la prueba ya incorporada por parte de la criminalística y la que se vaya incorporando a partir de la investigación que se llevará adelante. El investigador nuestro es tanto el analista del crimen (el que se vale de la prueba técnica, el que la conoce y sabe interpretarla) como el investigador de calle (que busca la prueba en la calle).

Tradicionalmente hay dos métodos de investigación criminal, uno llamado Método Tradicional y que tiene que ver con el uso que hacen las fiscalías y juzgados de instrucción a lo largo del país de las policías provinciales. Cuando sucede un hecho se convoca, además del equipo técnico, a personal para que investigue el hecho y que generalmente pertenece a fuerzas de seguridad: Policías provinciales, Gendarmería, Prefectura Naval (PNA), Policía Federal Argentina (PFA), Fuerza Policía Antinarcotráfico (FPA recientemente creada en Córdoba). Pero existe, a su vez, otra alternativa en provincias como Santiago del Estero y Santa Fe, y que en Córdoba ya tiene un proceso de consolidación que lleva algunos años: la Investigación Civil de Hechos Criminales que la realizan personal miembros de una fuerza, no ya de seguridad o armada, sino de personal judicial perteneciente al poder judicial y que lleva adelante estas investigaciones (Policía Judicial).

Partiendo desde este punto de análisis al hablar de la Policía Judicial como una fuerza civil que investiga hechos criminales, la integración de estos tiene que ser interdisciplinaria, multidisciplinaria. Una de las ventajas que podemos asignarle a este método de investigación civil tiene que ver con la capacitación o especialización en distintas áreas. Ya no hablamos de un policía experimentado que va al lugar del hecho, que entrevista personas, que busca información acompañado de uno nuevo que va aprendiendo, en este caso es otro el modelo. Tenemos profesionales de distintas áreas, pueden ser abogados, licenciados en criminalística, ingenieros, arquitectos, etc., personas con distinta formación profesional que tienen en común, como objeto de intervención, la investigación de un hecho criminal.

El motivo que los convoca y en el cual se van a focalizar es en un hecho del pasado que tienen que reconstruir a partir de distintos indicios. No hay una carrera que se dedique a eso puntualmente. Se trata de un proceso que es muy complejo, que requiere cierta experiencia de ciertos métodos que se van aprendiendo en parte pequeña en la teoría y mucho en la práctica. Aquí desarrollaremos algunas herramientas de investigación que pueden ser útiles a esta investigación.

Una de las diferencias que se pueden marcar entre la INVESTIGACION POLICIAL y LA INVESTIGACION JUDICIAL, es que la policial es espontánea, sucedió el hecho, la policía provincial va espontáneamente al lugar del hecho, se constituye por su misma. En cambio, la comisión judicial necesita de un requerimiento. Entonces, anoticiado un fiscal de instrucción de que sucedió un hecho en determinado lugar y evaluando la necesidad de convocar a un equipo de civiles para que investigue, entonces hace esta comisión. Ya no se habla de una intervención espontanea, sino de una intervención requerida. A requerimiento del fiscal, entonces, se constituye el equipo en el lugar del hecho. Sucede como es habitualmente la mayoría de las veces, que el equipo es comisionado luego del hecho, que ya avanzó un poco la investigación, en ese caso ya no hay una constitución inicial en el lugar del hecho sino que la investigación de este equipo comienza en la oficina misma del fiscal. El fiscal convoca al equipo, el equipo se hace presente en la oficina del fiscal, se mantiene una entrevista, se conoce la causa, se toman contacto con las líneas de investigación existente con la prueba. El detective necesita sí o sí conocer la causa, por lo tanto debe tenerla, debe pedirla a la causa, tal vez esta sea la facultad inicial más importante que tenga el investigador de calle y que debe respetar el investigador fiscal de prestarle la causa para que la lea y estudie. El investigador debe hacer un análisis completo y establecer una estrategia de intervención en la causa. Esta estrategia va a incluir la cantidad de personas que va a afectar, los medios, los recursos, el tiempo que le va a asignar y una división de tareas. Siempre esto será provisoria y se irá acomodando de acuerdo a la complejidad mayor o menor que vaya evidenciando la misma investigación.

Luego del análisis y diseño de la investigación, que debe hacerse en muy poco tiempo, sí ya comienza la tarea operativa. Habíamos dicho que necesitaba el investigador civil de una preparación, al carecer de esta experiencia policial tan completa que tienen los investigadores policiales. Es este método, esta capacitación lo que va a diferenciar una investigación de la otra. La riqueza del método que puede aportar el investigador civil, al ser un analista de causas, es lo que va a diferenciar y lo que puede, a su vez generar un clima de colaboración con la policía que también puede estar interviniendo en la causa. Muchas veces sucede que los fiscales, con tal de resolver un caso convocan a mucha gente. Todos los que hemos investigado sabemos que cuanta más gente hay muchas veces no se facilita la investigación, sino que se complejiza, se vuelven difíciles las comunicaciones, y en vez de ganar generalmente se pierde mucha información y mucho tiempo. Entonces, si se llega a una circunstancia en que hay varios cuerpos interviniendo en una investigación, podemos, los investigadores judiciales civiles tener el dominio de esta parte teórica en el diseño de la investigación, y luego en colaboración con la fuerza policial, ya constituirnos en la zona, en la calle donde se van a obtener estos datos que van a ser luego volcados a la investigación.