El contrato ENSAYO.

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En cuanto a los vicios que pueda sufrir el consentimiento prestado, la ausencia de los mismos es imprescindible para que se den tanto la validez y eficacia del contrato, pues para el fin o la finalidad del contrato requiere que las voluntades intervinientes en el contrato no se encuentren presionadas por factores eternos que modifiquen la verdadera intención. Siendo estos vicios del consentimiento el error, dolo, violencia y la intimidación.

Sobre la cosa en virtud de la cual formula el contrato el código civil vigente establece que pueden ser objeto de contratos todas las cosas que no estén fuera del comercio de los hombres, aún las cosas futuras. Pueden ser igualmente objeto de contrato todos los servicios que no sean contrarios a las leyes, a la moral, a las buenas costumbres o al orden público.

Y sobre el hecho mismo que motivo el contrato nuestro ordenamiento jurídico persigue que haya una causa justa para el nacimiento de los actos jurídicos. Diversos autores coinciden en que “La causa es el motivo que lleva las partes a celebrar el contrato”. Pero, un contrato carece de causa cuando esta no corresponda a la razón social que debe cumplir, tampoco cuando esta consiste en la simulación de un negocio para la creación de otro o se finge una causa. El contrato debe tener causa y esta ha de ser existente, verdadera y lícita

Aunque sobre este último elemento que se plantea del contrato diversos autores concuerdan en no incluirlo como un elemento fundamental pues el hecho de establecer un objeto o dar el consentimiento sobre la celebración del contrato afirma que existe una postura para celebrarlo y por ende este lleva un fin intrínseco lo cual sería el equivalente al alma de contrato estableciendo así la causa misma.

En vista de la diversidad de situaciones que se pueden celebrar en un contrato y el tipo de cualidades que alberga, el contrato puede clasificarse en cuanto a la cantidad de prestaciones o fines que persigue consagrar, de la dependencia de situaciones o contratos anteriores, así también atiende a la cantidad de sujetos y la forma de sometimiento a los mismos siendo esta parcial o total.

Bajo este plano estoy de acuerdo con la definición la definición principio por que el contrato es el negocio jurídico por excelencia o por antonomasia y si el negocio jurídico careciera de uno de sus elementos fundamentales esto afectaría al sentido mismo que llevó a su celebración, la causa, el objeto y las facultades que devienen de los sujetos como la capacidad y el consentimiento lo llevaría necesariamente a no nacer a la vida jurídica o si tuviese un vicio al momento de su celebración esto lo hace anulable.

BIBLIOGRAFÍA

- Código Civil de Guatemala libro V, del derecho de obligaciones, primera parte de las obligaciones en general, Título I Del negocio jurídico. Artículos 1517- 1592

- Arturo Rene Villegas Lara, Derecho civil de las obligaciones de los contratos. P.143