Individuos Heterogéneos: En Pro de la Consecución de Objetivos Comunes.

...

Pachue (2014) encontró que dentro de un equipo de trabajo se pueden identificar varios tipos de liderazgo, entre los que se encuentran el autoritario y democrático. El primero, es el que por su conocimiento y experiencia impone una decisión dependiendo del análisis de la información disponible; y el segundo, propone reflexión conjunta en todos o la mayoría de los integrantes de su equipo de trabajo. Los dos tipos de liderazgos tienen grandes beneficios pero también desventajas en el corto o mediano plazo. En tal sentido, no sería coherente pensar que todos los individuos de un equipo de trabajo tengan el mismo tipo de liderazgo, entendido como que para que exista liderazgo autoritario deben haber individuos que en su campo de interacción permita aceptar la instrucción sin tener que controvertirla, lo que no se podría lograr si todos los individuos son del estilo autoritario. Lo mismo sucedería con el tipo de liderazgo democrático, toda vez que hay decisiones que no admiten consenso dentro del grupo.

Otra de características que se pueden identificar dentro de los equipos de trabajo son los roles que adquieren cada individuo y de qué manera cada rol específico ejecuta una función particular dentro del equipo. Precisamente sobre la importancia de esta característica, se manifestó Natalia Aldana, Jefe de Planeación Estratégica de la Concesión RUNT quien lidera el proceso de transformación organización de la empresa, “según Aldana, dada la nueva estrategia corporativa presentada por la Gerencia General, en la que se pretende incursionar en nuevos mercados por medio de la implementación de nuevos productos y servicios, se necesita que el equipo de trabajo directivo este mucho más cohesionado, para afrontar el cambio y abrir la mente a nuevos negocios. En este punto es muy importante, la consolidación de equipos de trabajo heterogéneos en lo que a roles se refiere. Actualmente, se tiene identificado varios roles en los funcionarios, entre ellos expertos, aseguradores, hacedor, influyente, cooperador, todos diferentes pero importantes” (Aldana, comunicación personal, 20 de abril de 2016). Por lo anterior se puede afirmar que todos los roles dentro de un equipo de trabajo aportan a la consecución de los objetivos comunes y necesariamente deben ser diferentes para abarcar todos los campos de acción en el camino para alcanzar el objetivo trazado, sin olvidar que esto solo se consigue con el trabajo integrado de estos roles. Un ejemplo concreto se presenta cuando una empresa desea vender un nuevo producto, para lo cual requiere tener dentro de su equipo de trabajo múltiples roles, entre los que se puede destacar un rol experto quien tiene la función de diseñar y definir el esquema de producción del producto, y una vez elaborado debe existir un rol influyente quien debe, precisamente influir en los posibles compradores para que lo adquieran.

Es importante también revisar el papel de la comunicación en este estudio. La comunicación entre todos los individuos que conforman un equipo es de suma importancia toda vez que representa un componente fundamental para el entendimiento mutuo y en consecuencia la claridad de la meta común a alcanzar. La comunicación es definida como “el proceso mediante el cual se crea y se comparte significado en una conversación informal, en la interacción grupal o en los discursos en público” (K.Verderber y R. Verderber, 2014, p. 4). Precisamente los individuos independientemente del tipo de liderazgo que practiquen, deben entender la importancia de ese significado como primer elemento en la apropiación del objetivo común, en suma, si los integrantes del equipo de trabajo no se apropian como primera medida del objetivo a alcanzar, de nada servirán los demás mecanismos que se pretendan implementar para tal fin; de hecho según su investigación reciente K.Verderber y R. Verderber (2014) concluyeron que la comunicación en la organización fluye de forma lateral y vertical. La comunicación vertical de manera descendente, está enfocada en el flujo o transmisión de metas, políticas y hasta obstáculos en la consecución de las mismas desde el nivel de jefe a subalternos, si se entiende esta relación dentro de un ambiente laboral (p. 339, 340). Lo anterior demuestra que la comunicación es un proceso en el que todos los integrantes de un equipo, están involucrados y que de manera importante el rol de los líderes es fundamental para persuadir, motivar, lograr que los involucrados en el proceso se apropien de objetivo a alcanzar y sobre todo lo logren, de hecho, “la capacidad de comunicar es la herramienta más efectiva del líder” (Baldoni, 2003, p.1); Sin embargo, se debe tener sumo cuidado con la comunicación totalmente centralizada en un equipo de trabajo, dado que puede presentarse un modelo donde “hay un líder central con el cual todos se relacionan en este caso todas las decisiones se toman a nivel central, con lo cual el equipo aprende a no trabajar en equipo” (Vergara, 2015, p.144).

Al interrogante ¿puede un equipo de trabajo conformado por individuos con tipos de liderazgo y tipos de roles heterogéneos, conseguir de manera eficiente una integración para alcanzar los objetivos corporativos trazados?, la repuesta es si, toda vez que tener individuos heterogéneos, aporta de manera significativa a la construcción de un equipo de trabajo equilibrado con tipos de liderazgos y roles que actúen desde varios campos, permitiendo así de manera más eficiente apropiarse del objetivo común establecido y lograr alcanzarlo, lo anterior basado transversalmente en una comunicación claramente definida e integración adecuada basada en el reconocimiento de las fortalezas de cada tipo de individuo.

Referencias

Baldoni, J. (2003). Resumen de Los Secretos de Comunicación de los Grandes Líderes. Tomado de http://www.elmayorportaldegerencia.com/Documentos/Liderazgo/[PD]%20Documentos%20-%20Los%20secretos%20de%20la%20comunicacion%20de%20los%20grandes%20lideres.pdf

Del Carmen Toribio, S. M. (1962). Líderes. Revista Española De Pedagogía, 20(79/80), 287–293. Tomado de http://www.jstor.org.ezproxybib.pucp.edu.pe:2048/stable/23762812

Iborra, M., & Dasí, À. (2012). Mejorar el trabajo en equipo: Ambidiestría, comportamiento integrador y aprendizaje cooperativo. Innovar: Revista De Ciencias Administrativas Y Sociales, 22(45), 127–139. Tomado de http://www.jstor.org.ezproxybib.pucp.edu.pe:2048/stable/23747140

Pucheu, A. (2014). Grupos y equipos. En Desarrollo y eficacia organizacional (pp. 221–252). Santiago de Chile, Chile: Ediciones UC.

Suárez, M. (2015). Solo el trabajo en equipo hará crecer tu empresa. El País. Tomado de http://economia.elpais.com/economia/2014/12/03/actualidad/1417617983_613841.html

Vergara,