Ambiente actual de las empresas.

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Ante este panorama, la panadería del ejemplo necesita definir claramente sus objetivos e implementar estrategias que le permitan ser competitiva a fin de mantenerse en el mercado. Podrá elegir estrategias tales como diversificar su producción para satisfacer los nuevos requerimientos de sus clientes, o buscar nuevos mercados dentro de la región, quizá incluso en el ámbito internacional.

Para llevar a cabo las anteriores estrategias, se requiere que la empresa cambie sustancialmente su organización. Tal vez necesite elaborar un pan con características diferentes (o únicas), cambiar el empaquetamiento y etiquetado de sus productos y modificar su logística de distribución.

También debe hacer cambios en su organización administrativa, conocer los requisitos necesarios para elaborar una etiqueta, modificar sus políticas de ventas, identificar el proceso de exportación de sus productos o de importación de materias primas, etc.

Es importante que tomes en cuenta que los negocios internacionales requieren que los empresarios tengan una mentalidad abierta con el fin de adaptarse al medio ambiente con una mayor probabilidad de éxito.

Organizaciones que aprenden.

El entorno actual en el que se desenvuelven las organizaciones se caracteriza por los cambios constantes, rápidos y profundos que provocan que ciertos conocimientos en las organizaciones se vuelvan rápidamente obsoletos e inservibles para hacer frente a sus necesidades y a las necesidades de sus clientes.

Debido a lo anterior, el aprendizaje se ha convertido en una estrategia indispensable y permanente para obtener el conocimiento necesario que permita a los empresarios y a sus negocios sobrevivir y competir con éxito. Por lo anterior, podemos decir que estos dos elementos (el aprendizaje y el conocimiento) están íntimamente unidos.

Las organizaciones que aprenden tienen el impulso y las capacidades para modificarse o transformarse a sí mismas y mejorar su desempeño en forma permanente; adquieren conocimientos a partir de experiencias pasadas, de sus clientes, de los subsistemas que la conforman y de otras organizaciones.

En este tipo de empresas, la innovación y el cambio son una constante que forma parte de su día a día. Las organizaciones que aprenden cambian a una velocidad igual a la que cambia su entorno y el proceso de aprendizaje se maneja de forma sistemática y profesional, no debido al azar.

Así pues, una organización que aprende desarrolla una ventaja competitiva sostenible y se caracteriza por tener un liderazgo compartido, cultura e innovación, además de poseer una estrategia enfocada al cliente y una estructura organizacional flexible con un uso intensivo de la información.

Para Senge (1992, citado por Navajo, 2010) una organización que aprende tiende a caracterizarse por el establecimiento de las siguientes disciplinas:

- “Pensamiento sistémico” (párr. 9). El análisis y la toma de decisiones se realizan bajo la idea de que toda acción de un elemento del sistema, tiene un efecto sobre los demás elementos del mismo, de forma que la misma organización como parte de un sistema mayor afecta y es afectado por las acciones de las demás organizaciones de su tipo.

- “Dominio personal” (párr. 5). Esta disciplina permite aclarar y ahondar la visión personal, concentrar las energías, desarrollar la paciencia y ver objetivamente la realidad. Lo importante es la conexión entre el aprendizaje personal y el organizacional.

- “Modelos mentales” (párr. 6). Se refiere a la visión interna y a aprender a extraer la forma en que percibimos el mundo para llevarla a la superficie y someterla a una revisión crítica.

- “Construcción de una visión compartida” (párr. 7). Se trata de construir una visión de futuro y ser capaz de compartirla con quienes conforman la organización, al grado de generar en ellos un compromiso real.

- “Aprendizaje en equipo” (párr. 8). Es la capacidad de integrar un auténtico pensamiento conjunto, que lleve al aprendizaje del equipo y logre un resultado conjunto mayor que el obtenido de manera individual porcada uno de sus miembros.

Guija (2010) menciona que

Las empresas pueden encontrar e introducir nuevas ideas, introducir cambios en su infraestructura y crear una organización que sepa aprender y entender, pero como no es posible dejar las cosas igual para siempre, es necesario un aprendizaje continuo, que la organización exista como una visión en las experiencias e imaginación colectiva de quienes la conforman(p. 6).

En un mercado global tan complejo, dinámico y de alto riesgo, con negocios inestables y sin fronteras, es muy probable que la única ventaja sostenible que pueden alcanzar las organizaciones sea su capacidad de aprendizaje para transformarse en organizaciones inteligentes, desarrollando herramientas que le permitan aprender con mayor rapidez que sus competidores.