Prospectiva e Innovación

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Los personajes también tuvieron que confiar entre ellos y creer que cada uno estaba poniendo todo el entusiasmo de su parte.

- ¿Cómo se puede construir el futuro para este tipo de situaciones?

Pues cambiando los paradigmas. El pensamiento disruptivo ayuda a generar ideas que nos permiten ser diferentes en el mercado.

El concepto mismo del proyecto (Una presa en medio del desierto), representa un paradigma que cambió la perspectiva de vida de la comunidad. Así como este proyecto se llevó a cabo, hay muchos otros que fueron en principio ideas innovadoras y hasta cierto punto “locas”, por ejemplo, la ciudad de Las Vegas en Nevada, USA. También una ciudad llena de vida y de millonarios. ¿Quién iba a pensar que, en medio del desierto, con tanto calor iba a existir una ciudad para divertir a sus inquilinos? O ¿Quién iba a pensar que habría una presa para pescar salmones importados en medio del desierto?

- ¿Cómo es factible lograr el vínculo emprendedor-investigador?

Primordialmente se tienen que alinear los intereses de ambos a través de un proyecto. Emprendedor e investigador tienen la labor de colaborar y compartir toda la información que tengan para tomar las mejores decisiones en los momentos adecuados.

Ambos juegan su propio papel, el emprendedor, es el visionario, el que probablemente también tiene el dinero para llevar a cabo el proyecto. El investigador por su lado, se dedica a encontrar maneras más prácticas e innovadoras de dar solución al problema o necesidad para la cual se creó el proyecto, también, es el que sabe de técnicas y herramientas para adoptar las mejores prácticas de la industria y sabe cómo aplicarlas en el proyecto. La asistente es la facilitadora que permite sobrellevar los obstáculos encontrando maneras para hacer un ambiente laboral agradable, de respeto y paz. Una persona puede ejercer uno o más roles; dependerá de los recursos del proyecto. “Los científicos exitosos son también empresarios activos. Reciente el ganador del Premio Nobel de Alemania, Theodor Hänsch, es un buen ejemplo: el físico co-fundador de Menlo Systems, que ha llevado a su "peine de frecuencias" y lo utilizó para hacer productos para el mercado. De hecho, uno de cada cuatro investigadores que registra una patente también funda una empresa. Ese es el resultado de un estudio en el Instituto Max Planck de Economía en Jena. Se veía a los investigadores del cáncer en los Estados Unidos; los autores del estudio dicen que lo que es cierto para aquellos científicos médicos también es cierto para los científicos de todo tipo - en Alemania, así como la U.S.A. (Estudio encargado por la Fundación Ewing Marion Kauffman, el 29 de marzo de 2006)

Bibliografía

- Prof. David Audretsch. (2006). From Researcher to Entrepreneur. 04/25/16, de Max Planck Institute of Economics Sitio web: https://www.mpg.de/533836/from-researcher-to-entrepreneur-2006

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