Tema- El carnaval y lo carnavalesco.
Enviado por John0099 • 1 de Mayo de 2018 • 3.006 Palabras (13 Páginas) • 369 Visitas
...
La comida
Se producía un consumo de carne exagerado, pero no solo por el motivo festivo en sí, era importante el papel simbólico de este hecho.
Para ver la importancia de la carne y la comida, basta simplemente con ver la representación de don Carnal, representado como un hombre obeso sentado sobre un barril, siempre feliz y rodeado de viandas.
También es representativo el papel de los carniceros en los rituales ya que solían salir a la calles danzando y corriendo, se documenta en Konigsberg en 1583 una procesión de 90 carniceros elaboró y procesionó con una salchicha de 440 libras. Este hecho puede parecer anecdótico pero nos pude servir también para establecer una relación con el tema del sexo, también recurrente en periodo carnavalesco.
Sexo
Enlazando con el acontecimiento de Konigsberg, también se puede establecer una relación entre la carne y el sexo desde un punto de vista simbólico. Es fácil vislumbrar la salchicha antes mencionada como un símbolo fálico, o la propia carne como un símbolo sexual.
El carnaval es uno de los periodos del año con más actividad sexual, teniendo en cuenta concepciones y casamientos. Los matrimonios fingidos eran juegos populares en este periodo festivo.
Además de la procesión antes mencionada, también podemos observar símbolos fálicos en las máscaras de alargadas narices con las que era propio disfrazarse en la época, incluso se podría observar un significado sexual en las siembras, donde las mujeres solteras jugaban un papel fundamental, o incluso en los materiales utilizados en la elaboración de los instrumentos musicales con vejiga de cerdo. También se podrían encontrar significados sexuales en los disfraces como el de oso (la bestia velluda tiene un simbolismo claramente sexual en la época).
Violencia
En el carnaval también hay violencia y profanación. El sexo puede considerarse un intermedio para ligar la comida y la violencia, entendiendo la violencia tanto verbal como física.
En cuanto a la agresión verbal, durante esta celebración, en muchos lugares, estaba permitido lanzar insultos a las autoridades, algo impensable durante el resto del año. Se podía acusar al vecino de ser agredido o engañado por su esposa. Las agresiones se ritualizaban en batallas fingidas, usando como ejemplo las que antes hemos mostrado como partidos de balompié, torneos, juegos como el tiro de soga…. Esto no quiere decir que en carnaval estuviese todo permitido, las autoridades eran conscientes del problema que podrían generar estas festividades y se tomaban medidas al respecto como la prohibición de portar armas durante estas fiestas. Pese a esto se documentan en ocasiones disturbios, que hoy en día bien se podrán calificar de rebelión, es el caso del carnaval de Nápoles de 1647, el año próximo el virrey se encargó de que el carnaval fuese espléndido lejos de restringir las celebraciones, esto se explica por el mecanismo de “Válvula de escape” aplicable al concepto de “mundo al revés” que veremos más adelante. La agresión también se hacía presente en los animales, siendo frecuente golpear a gallos, perros, gatos… que no podían defenderse.
En ciertas ocasiones los insultos y las actitudes violentas podían llegar demasiado lejos creando verdaderos enfrentamientos, pudiendo causar incluso muertes o serias disputas. Se podía aprovechar la ocasión de la celebración del carnaval para resolver ciertas rencillas anteriores, dando salida a la violencia que desembocaba en asesinatos callejeros…
El mundo al revés
Tenemos que tener presente, también, el concepto de “mundo al revés”. Esta concepción se prestaba a ser ilustrada, apareciendo los siguientes elementos subversivos: en las relaciones sociales (pobres dando limosna a los ricos, hijos pegando a sus padres…) en lo físico (gente caminando sobre sus brazos, peces volando…) o en las relaciones entre personas y animales (el caballo convertido en herrero y calzando a su dueño)
Para entender este concepto del mundo al revés, y su relación con el carnaval, debemos empezar simplemente por ver la representación de don Carnal, en la oposición entre este y cuaresma, en la que carnaval no solo se opone a la cuaresma ridiculizando la piedad de la vida cristiana, sino a la vida cotidiana, el carnaval es la encarnación del mundo al revés.
Todos los que se oponían al cambio en este periodo, eran considerados paradójicamente como “subversivos”.
Este concepto de mundo al revés también se relaciona con la utopía popular del país de Jauja. Jauja es la versión de una larga vida de carnaval, representando el exceso de comida y bebida, el mundo al revés…
El disfraz también permitía cierto intercambio de papeles, por ejemplo, cuando los hombres se disfrazaban de mujeres y viceversa, ya que como hemos dicho anteriormente también se trataba de reflejar el comportamiento que representaban estos disfraces.
Se podría considerar el carnaval como un desorden institucionalizado en este aspecto, un periodo durante el cual se da rienda suelta a los impulsos sexuales y agresivos, algo imposible durante el resto del año, una experiencia de utopía que servía como “válvula de escape” desviando la atención de la realidad social, reforzando el orden y el gobierno establecido, de hecho, en los lugares en los que no se permitía liberar esta presión, donde ni siquiera en carnaval se permitían tomar estas licencias al pueblo, los gobiernos se verían debilitados.
Carnavaladas
Como se ha mencionado en la introducción, el carnaval no tiene la misma importancia e todos los territorios europeos y siendo una fiesta más notoria en la Europa mediterránea del sur, siendo menos importante en la Europa central y del norte, además de Inglaterra y Escandinavia.
En estos lugares donde el carnaval no es una fiesta tan destacada, podemos observar otras celebraciones con funciones y características similares. Estas fiestas suelen desarrollarse en los meses de diciembre, enero y febrero.
Como ejemplos de estas celebraciones podemos mencionar la Fiesta de los Locos, celebrada el 28 de diciembre y muy bien documentada en Francia.
Era organizada por el clero joven, algo similar a las fraternidades compuestas por las clases altas que organizaban los actos en los carnavales. Era una fiesta en la que participaba el pueblo llano, en la que
...