GUIÓN GRUPO DE DISCUSIÓN

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Componente 4:

“La mayor dificultad fue la incomprensión de los familiares”.

El componente 4 destaca la falta de comprensión que vivió cuando comunicó a sus familiares su adicción. Pese a eso, tuvo el apoyo de su mujer, que ha sido vital para que siga adelante. También destaca el miedo a no poder cubrir las necesidades básicas. La adicción al alcohol choca directamente con el ámbito laboral, ya que impide que lleves a cabo tu trabajo de una forma correcta. El componente 4 perdió su empleo debido al alcohol y se vio en una situación económica muy compleja, llegando a pedir limosna.

Componente 5:

“Coincido con el componente 4, la familia y los amigos te dan de lado y, al final, te das cuenta que es por tu culpa”.

El componente 5 incide en la falta de ayuda que percibió a lo largo de su adicción. El alcohol hizo que destruyera vínculos familiares y amistades, sintiéndose solo y con el falso convencimiento de que tú eres la víctima y todos están confabulados contra ti. El componente 5 destaca la capacidad de autoengaño que se genera cuando estás en una fase de la adicción en la que no quieres afrontar el problema.

¿Habéis tenido experiencia en tratamientos como comunidades terapéuticas? ¿Qué opináis de vuestro paso por allí? Si es así, ¿Cómo fue vuestra adaptación al día a día?

Tres de los cinco participantes en el grupo de discusión habían pasado por recursos como comunidades terapéuticas o centros de día.

De sus experiencias en comunidades terapéuticas destacan, por una parte, lo positivo y enriquecedor que es el recurso como tal, ya que te permite acatar unos horarios y con ello adaptarte a una rutina, estudiar y comprender mejor la adicción, la adquisición de herramientas para controlar la ansiedad y adquirir autocontrol, por ejemplo, realizar ejercicios introspectivos y expresar los sentimientos y emociones. Por otro lado, comentan que es “una burbuja y que eres consciente de ello”. Al fin y al cabo, el paso por la comunidad terapéutica tiene un periodo determinado en el que debes aplicarte y esforzarte para aprender todo lo posible para cuando esa “burbuja explote” y salgas a la realidad.

Uno de los componentes expresa sentir mucho miedo al verse en la calle después de estar en comunidad terapéutica. Le generaba mucha inquietud, ya que te reincorporas a “la antigua realidad”, aquella en la que consumías habitualmente y es muy fácil caer en los mismos errores.

Destacan ese miedo atroz a recaer y caer en antiguos hábitos nocivos. “El miedo que te genera salir de la comunidad y volver a tu casa hace que tengas mucha ansiedad y, la ansiedad te lleva al consumo”.

Cuentan experiencias propias y de otros compañeros no presentes que el miedo a salir a la calle o ir de un punto a otro del pueblo para hacer cualquier recado era tal que se quedaban en casa sin salir. Ese miedo les hacía enclaustrarse en sus hogares con tal de no recaer. En cierto modo no se sentían preparados para su día a día, pese a haber estado cuatro, seis u ocho meses en una comunidad terapéutica donde se trabajaba diariamente sobre la adicción y todo lo que la envuelve.

Por otra parte, valoran muy positivamente el trabajo que se realiza en el CASD Anoia y agradecen que exista este servicio, ya que les ofrece un espacio en el que seguir trabajando ese miedo al día a día que le provoca la adicción.

La componente 3 comenta que había vivido toda su vida en Barcelona y había estado vinculadas a varios servicios y recursos relacionados al alcohol y otras sustancias. Había pasado por una comunidad terapéutica y centros de día para personas drogodependientes. La componente 3, al salir de la comunidad terapéutica, le recomendaron cambiar de domicilio, ya que era un foco de riesgo muy peligroso para su recuperación. Por cuestiones económicas no podía acceder a una vivienda en Barcelona ciudad y decidió mudarse a Igualada, ya que le permitía adquirir un alquiler más económico.

En el momento que se dirigió al CASD Anoia para seguir su tratamiento se sorprendió de las escasas opciones que existían en Igualada para personas en su situación, con problemas de alcohol. Comenta que en Barcelona existen muchos recursos para que puedan seguir trabajando en su tratamiento, y que al llegar a Igualada se sintió inquieta al ver que no estaban cubiertas sus necesidades, en lo referente a la adicción. Considera escasa la atención que se ofrece en el territorio y ve fundamental que se creen recursos dirigidos a personas drogodependientes, ya que “el grupo de soporte del CASD solo se hace una vez por semana durante una hora y media, y a mí me gustaría tratar más temas y tener un sitio donde pueda reunirme con personas con mi mismo problema”.

¿Consideráis que un recurso como el Centro de Día para Adicciones podría ser de utilidad para personas con una adicción?

Existe unanimidad ante esta pregunta y todos comentan que es muy necesario la creación de un recurso como este en la zona. Se sienten muy agradecidos con el trato que reciben en el CASD pero lo consideran escaso. No entienden como en una población como Igualada no ofrezca un servicio así, debido a todas las personas que podrían hacer uso de él. Demandan un espacio de reunión, de ocio y también de tratamiento.

El Ayuntamiento de Igualada cede las instalaciones del Centro Cívico Montserrat y siempre se ha mostrado dispuesto a colaborar con GAMA Anoia, pero uno de los componentes, sin ánimo de desmerecer el esfuerzo ni las facilidades que les ha ofrecido el Ayuntamiento, comenta que tiene la sensación de que “intentan mantenernos contentos con el centro cívico, pero no es lo que nosotros pedimos”. GAMA, como entidad, ha reclamado en numerosas ocasiones una mayor atención a nivel comarcal de su problemática y, consideran que la cesión de espacios en el centro cívico no es suficiente para su desarrollo. Sus propuestas van encaminadas a que se ofrezca una atención dirigida a su colectivo pero, hasta el momento, no han conseguido ese objetivo.