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LA INFLUENCIA DEL GÉNERO EN LA GESTION

Enviado por   •  1 de Enero de 2018  •  1.178 Palabras (5 Páginas)  •  309 Visitas

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Haciendo un esfuerzo por sustentar algunas de estas ideas, podemos señalar como algunas de las aportaciones propias del estilo femenino de dirección las siguientes:

Un estilo transformante: al estilo masculino se le define como un liderazgo transaccional, lo cual significa que los directivos premian o penalizan a los empleados dependiendo de su rendimiento. El estilo masculino se caracteriza por un mayor ambiente de competencia, mayor dificultad para la comunicación, actitudes individualistas, cierto gusto por la burocracia y respeto por la jerarquía. El estilo femenino, por el contrario, se considera transformante, es decir, un estilo interactivo que valora la diversidad y fomenta la participación y el trabajo en equipo.

Si en la concepción masculina las estructuras y los métodos parecen la fórmula mágica para resolver cualquier situación, y la información fluye de arriba abajo y de abajo a arriba con cierta facilidad, en el estilo femenino el liderazgo surge de dentro hacia fuera, de la persona hacia el resto de la organización, creando nuevas formulas de gestión que se ajustan a las nuevas realidades de la empresa.

Pensamiento diverso: lo primero que la diversidad de género aporta es precisamente la constatación de que existe una diversidad y de que ese hecho es bueno. Lo masculino ha demostrado desde siempre la capacidad natural para la actividad intelectual abstracta. En esa actividad intelectual tiene el peligro, raras veces superado, de perder el jugo de la vida, para quedarse con conceptos puros y generales, descarnados y esqueléticos. El modelo del pensar masculino es, el modelo matemático. La cuestión es que para el masculino solo es razonable la forma de pensar y de actuar el hombre. De ahí surgen muchas de las frustraciones del hombre que termina concluyendo que lo femenino es menos racional que lo masculino, sin darse cuenta de que no es una cuestión de quien es mas o menos racional, sino de dos formas distintas de entender lo que se llama ((razón)).

Un nuevo modo de conocer: existen dos maneras distintas de conocer, el conocimiento abstracto y el conocimiento experimental. Lo masculino, de manera natural tiende a sobrevalorar el conocimiento abstracto por encima del experimental. Siente la necesidad de racionalizar las cosas para entenderlas,

Distribución del tiempo: la tendencia femenina es a distribuir el tiempo de modo más eficiente. Hacerlo es casi una tendencia natural. La mujer trabaja con intensidad tratando de evitar las reuniones, tan habituales en lo masculino, especialmente las interminables que empiezan a las 7h. de la tarde.

Asequibilidad: el hombre se agobia más. La mujer normalmente es asequible. No le importa que le interrumpan en el trabajo. Lo masculino, por el contrario, en el trato con las personas, se centra más en la tarea de realizar que en la construcción de una relación de confianza y reciprocidad: así, un hombre acudirá sin problemas a solicitar un favor de un viejo compañero al que no ha visto en años mientras que una mujer se sentirá incomoda por pedir un favor a alguien con quien no haya construido una relación personal de confianza.

Equilibrio de vida:

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