Tema: El yo y el ello
Enviado por poland6525 • 20 de Febrero de 2018 • 2.398 Palabras (10 Páginas) • 303 Visitas
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Se deduce que el yo es la parte del ello alterada por la influencia directa delmundo exterior (mediante el sistema P-Cc). A la vez se empeña en hacer valer sobre el ello la influencia del mundo exterior, asi como sus propios propositos (quiere reemplazar el principio de placer que rige en el ello por el principio de realidad). La percepción es en el yo lo que la pulsión en el ello. El yo representa la razon y la prudencia, el ello las pasiones.
Al yo le es asignado tambien el gobierno de los accesos de la motilidad.
Hay personas en quienes la autocritica y la conciencia moral, son inconcientes, y exteriorizan efectos importantes, y nos obligan a hablar de un sentimiento inconciente de culpa, el cual levanta los mas poderosos obstáculos en el analisis. Entonces, decimos que no solo lo mas profundo, tambien lo mas alto (eficaz) en el yo puede ser inconciente.
IV. Las dos clases de pulsiones
Hay dos clases de pulsiones, las sexuales o Eros, que comprende a la pulsión sexual no inhibida, y las mociones pulsionales sublimadas y de meta inhibida que derivan de la primera (no inhibida), asi como tambien a la pulsión de autoconservacion. La otra pulsione es la de de muerte, y vemos en el sadismo un representante de ella, y es la encargada de reconducir al ser vivo organico al estado inerte. El Eros tiene la meta de complicar la vida mediante la reunion, la síntesis, de la sustancia viva dispersada, para conservarla. Ambas pulsiones se aspiran a reestablecer un estado perturbado por la genesis de la vida.
Las mociones pulsionales que podemos estudiar son retoños del Eros, se nos impone la impresión entonces de que las pulsiones de muerte son en lo esencial mudo y casi todo el alboroto de la vida parte del Eros.
Y si decimos que la vida esta gobernada bajo el principio de constancia, destinada a ser un deslizarse hacia la muerte, son las exigencias del Eros (pulsiones sexuales), las que como necesidades pulsional introducen nuevas tensiones.
V. Los vasallajes del yo
Constitución del super yo
El yo se forma en buena parte desde identificaciones que toman el relevo de investiduras resignadas del ello. Las primeras de estas identificaciones se comportan como una instancia particular dentro del yo, se contraponen a este como superyo. El super yo debe su posición dentro del yo debido a dos identificaciones que se dieron en su constitución:
- La identificación inicial ocurrida cuando el yo todavía era endeble.
- Es el heredero del complejo de Edipo, con lo cual introdujo en el yo los objetos mas grandiosos.
Y conservara a lo largo de la vida su carácter de origen: proveniente del complejo paterno y su facultad de contraponerse al yo y dominarlo. Es el recordatorio de la endeblez y dependencia en el que el yo se encontro en el pasado (con los padres), el yo se somete entonces al imperativo categórico del superyo.
Y que descienda de las primeras investiduras del ello hace que lo ponga en relación con este, es por eso que mantiene afinidad con el ello y puede representarlo frente al yo. Por ende esta mas distanciado de la conciencia que el yo. Para poder explicar estos nexos lo mejor es volver sobre ciertos hechos clínicos.
Reacción terapéutica negativa como exteriorizacion del sentimiento icc de culpa (o necesidad de castigo)
Hay personas que reaccionan de manera trastornada frente a los progresos de la cura. Toda solución que debería desembocar en una mejoria de los síntomas, les provoca un refuerzo momentáneo de su padecer. Presentan la llamada reacción terapéutica negativa. Decimos que en estas personas no prevalece la voluntad de curación, sino la necesidad de estar enfermas. Si analizamos esta resistencia como habitualmente lo hacemos, retirándole la actitud de desafio frente al medico, la fijación a las formas de la ganancia de la enfermedad, veremos que la resistencia persistirá. Se llega asi a la conclusión de que se trata de un factor moral, de un sentimiento de culpa que halla su satisfaccion en la enfermedad. El paciente no se siente culpable, sino enfermo. Y justamente la exteriorizacion de este sentimiento (icc) de culpa es la reaccion terapeutica negativa en el tratamiento.
Es posible que esto ocurra en menor medida para muchisimos casos de neurosis, quizas para todos. Quizas es justamente este factor (la conducta del ideal del yo o superyo) el que decide la gravedad de una neurosis.
Sentimiento cc de culpa vs sentimiento icc de culpa
Encontramos en la conciencia moral un antecedente del super yo, esta compara el yo actual con el ideal del yo, y como el yo nunca llega a ser como el ideal del yo, la conciencia moral genera culpa (cc). Este sentimiento de culpa (cc) no ofrece dificultades a la interpretación, es la expresión de una condena del yo por su instancia critica.
En el sentimiento de culpa icc vimos una de las pruebas de la independencia del super yo frente al yo conciente, y de sus íntimos vínculos con el ello inconciente. Sin embargo también decimos que el súperyo permanece accesible a la conciencia desde representaciones palabras, pero la diferencia es que la energía de investidura no les a aportada a estos contenido por la percepción auditiva, la instrucción, etc, sino que la aportan las fuentes del ello.
Masoquismo - Sadismo en relacion al super yo
Vemos que el super yo se abate con furia sobre el yo, como si se hubiera apoderado del sadismo disponible en el individuo. Lo que ahora gobierna en el superyo es como un cultivo puro de la pulsión de muerte. Estas pulsiones de muerte son tratadas de diversas manera en el individuo (ver el problema economico del masoquismo), se las torna inofensiva por mezcla con componentes eroticos y luego en parte se las desvia hacia fuera como agresión, pero en parte prosiguen el trabajo en el interior. Vemos entonces en el ser humano que mientras mas limita su agresión hacia fuera, mas agresivo se torna su superyo.
Origen de la pulsión de muerte en el superyo
El superyo se engendro por una identificación con el arquetipo paterno, y esta clase de identificación tiene el carácter de una desexualizacion (o aun de una sublimación). Y parece ser que a raiz de esto también se produce una desmezcla de pulsiones (no total), el componente erotico ya no tiene mas la fuerza para ligar toda la destrucción aleada con el, y esta se libera
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