Adopción homoparental Centro de investigaciones sociológicas.

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La tercera categoría es la atención del psicólogo clínico en terapia o grupos de apoyo, en donde tres parejas han tenido contacto. Dos individuos expresan que fueron llevados al psicólogo por sus padres. Cuando hablaron de sus preferencias el psicólogo intento hacerlos cambiar de parecer. Otros tres miembros refieren que el psicólogo les ayudo a afrontar su homosexualidad con su familia o a darse cuenta de sus deseos de ser padres.

Como se puede dar cuenta en este estudio dentro de los servicios del psicólogo en el Distrito Federal, en cualquier sector del gobierno, predomina la discriminación para las personas, parejas o familias homosexuales; pero cuando es un psicólogo particular, aunque existe la discriminación es menor que en una institución.

El rechazo a los homosexuales se ha creado desde hace mucho tiempo, se piensa que la biología determina la diferencia y preferencias sexuales pero la realidad es que este rechazo se ha creado por la cultura que se tiene en cada país. Sin embargo, podemos comparar con el de la mujer que aun cuando se ha buscado una equidad con el hombre no se ha logrado del todo en la actualidad por ser movimientos que buscan revolucionar toda una cultura e ideologías, pero ahora es momento de ver la aceptación de la pareja homosexual.

La existencia de un sistema de sexo/género definido como “el conjunto de disposiciones por el que la sociedad transforma la sexualidad biológica en productos de la actividad humana, y en el cual se satisfacen esas necesidades humanas transformadas”. En este concepto se basa List (2005) para mencionarnos que este sistema trasciende por el tiempo y el espacio, cuando es interiorizado por los sujetos, comienza a ser transmitido de generación en generación. Esta es una de las razones por las cuales la familia homosexual no es aceptada ya que durante generaciones la sociedad y la cultura nos han enseñado que el matrimonio está formado por un hombre y mujer, cada uno con sus características diferenciales.

El sistema de sexo y género logra que las personas o grupos sean jerarquizados de tal manera que unos quedan más arriba que otros y por lo tanto con más o menos preferencias. Se considera que quienes están en el más alto nivel son los heterosexuales, los monógamos y los reproductores; a partir de ahí en orden descendente porque se consideran transgresoras todas aquellas actividades que no vayan de acuerdo con lo que la sociedad y cultura están imponiendo. (List, 2005)

Esta cultura de género se ha construido históricamente, culturalmente e ideológicamente basada en un discurso que la historia le ha subordinado a ideas como las diferencias de hombre y mujer o incluso a una creación religiosa como Dios. (List, 2005)

Al momento de hablar de adopción, se tiene que mencionar que en la Agencia de Gestión Urbana se dio a conocer el informe que desde diciembre del 2009, es permitida la adopción a parejas homosexuales en la Ciudad de México. El Distrito Federal es el primero en el país que autoriza la adopción a homosexuales, lo cual provoca rechazo por parte de la Iglesia Católica y ha sido impugnado sin éxito por el Partido Acción Nacional, en cuya impugnación ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación se elevó a rango federal el reconocimiento y derechos de los que en el Distrito Federal adopten a un niño(a), el 18 de agosto del 2010, en la cual el Supremo Tribunal resolvió que las parejas homosexuales tienen el mismo derecho de poder adoptar a un menor en la Ciudad de México.

Existen situaciones en las que el aceptar tanto el matrimonio como la adopción tiene sus obstáculos, no obstante, las generaciones más jóvenes se muestran más accesibles ante esta situación siempre y cuando el matrimonio y la adopción sean un acto serio y formal, manteniendo los criterios culturales y sociales que se han aprendido y pasado de generación en generación como son los valores familiares, educación y derechos, viendo como un único problema a la sociedad que aún no está preparada para los nuevos cambios que conlleva la adopción por parte de matrimonios homosexuales.

Sin embargo, quizá en algunos años ya sea común ver familias homoparentales y será necesario implementar elementos para que los niños no vean mal esta situación.

Referencias

Angulo, A., Granados, J., & González, M. (2014). Experiencias de familias homoparentales con profesionales de la psicología en México, Distrito Federal. Una aproximación cualitativa. Cuicuilco, 211-236.

Domínguez M (2011) 1995 - 2006 diez años de cambio en las parejas españolas. Madrid: Centro de investigaciones sociológicas.

Eguiluz L (2014) Marcos teóricos para el trabajo terapéutico. Entendiendo a la pareja. México: Pax.

Galimberti, U (2011) Diccionario de psicología. México: Siglo XXI.

Gallotti, A (2007) Siempre mujer. Barcelona: Malsinet.

Gervilla, E (2003) Educación familiar. Nuevas relaciones humanas y humanizadoras. Madrid: Narcea.

List Mauricio (2005) Jóvenes Corazones Gay en la Ciudad de México, Ed. Angelopolis, México.

Papalia D, Wendkos S y Duskin R (2009) Psicología del desarrollo. De la infancia a la adolescencia undécima edición. México: Mc Graw Hill.

Pinel J (2010) Biopsicología. Sexta edición. España: Pearson.

Polaino, A (1998) Sexo y cultura análisis del comportamiento sexual. España: Rialp.