Como son los Bodes comunicativos

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- Las culturas urbanas y sus ideales vistos en el graffiti.

Uno de los propósitos del presente estudio contribuye precisamente en indicar, o sugerir si se quiere, una pauta de estudio y análisis de las culturas urbanas contemporáneas desde una perspectiva que evite caer en la discusión sobre los diversos criterios de artisticidad que han sido y son corrientes en la historia. Por contraposición a un debate sobre si el objeto estudiado es o no compatible con aquellos criterios, debate que considero estéril, propongo la formulación de un enfoque multidisciplinar dirigido al análisis y la explicación del fenómeno graffiti.

Los escritos de Raymond Williams en Writing a Society (1984) definen, dentro del enfoque general de la corriente del materialismo cultural, el concepto de práctica cultural de forma bien diferente a como se venía haciendo hasta entonces. El pensador Williams señala la importancia de las relaciones y luchas culturales en las diferentes formas de producción cultural y comunicativa que muestra como son decisivas las relaciones de producción entre los diversos agentes sociales para entender la naturaleza de lo que llamamos cultura. La cultura del graffiti es popular en el sentido de que a la gente perteneciente al contexto donde se desarrolla le gusta hacerlo. Esa acepción de la palabra, sin embargo, convierte en popular al conjunto de las diferentes culturas sociales, independientemente del grupo que las genera.

En el conjunto de los escritores de graffiti existen multitud de aspiraciones, estilos y tendencias elaboradas sobre el mismo arte. Por ello se debe pensar que el presente estudio podría aportar a nuestra disciplina unos cauces adecuados al estudio de estas nuevas manifestaciones creativas. La riqueza de estas aportaciones no es sino el resultado de un diálogo continuado e intenso entre los escritores de graffiti y entre éstos y la sociedad en la que viven.

- El graffiti como representación cultural en el entorno social.

En el graffiti se demuestra que existe una observación sistematizada de los cambios que se producen en la sociedad y de cualquier forma, éste se está convirtiendo o ya se ha convertido en un modelo crucial que utiliza a la cultura para expresar aspectos tales como la oposición o el favoritismo hacia el régimen hegemónico. De alguna manera el graffiti es una expresión en la cual las masas tienen en cuenta que por medio de este pueden hacer llegar ideologías, para que el poder tienda a retroceder en esta lucha de carácter social que generan los bordes comunicativos. Además también el graffiti se ha vuelto una representación cultural debido a que puedes trasmitir ideas las cuales las personas jamás podrían decir verbalmente.

De esta forma podemos decir que el graffiti desarrolla procesos muy elaborados de producción de sentido y reflexión sobre sí mismo, procesos que han definido un lenguaje propio en el que los métodos interpretativos usualmente utilizados en referencia a la Historia del Arte no tienen cabida. El mundo del graffiti emplea constantemente una comunicación invertebrada con otras manifestaciones y expresiones culturales muy diversas, reacciona peculiarmente a un entorno social hostil desvinculándose de la existencia de núcleos de articulación y estructura hasta en la más modesta de sus obras. Eliminar su diferencia sacándolo de la marginalidad para atraerlo al centro de canonización académica puede ser un error, pero es as u vez una necesidad en la que le enfoque sociológico del Arte no es muy útil. Este enfoque del Arte es una herramienta necesaria para comprender exactamente las nuevas y mutables condiciones en las que los procesos creativos y expresivos actuales nacen y se desarrollan.

- El graffiti en la cultura actual.

El graffiti en la actualidad podría considerarse un arte multicultural, y no contracultural, las agrupaciones se rigen por un desarrollado sentido de honor y de respeto, donde se establece que una pieza de otro tiempo no puede ser borrada hasta que la pintura empieza a deteriorarse, y que no se debe utilizar el nombre de otro artista para firmar el propio trabajo. Pero aun si el graffiti un arte multicultural este sistema de comunicación que ejercer el pueblo hacia la sociedad seguirá manteniendo su tono el cual seguirá siendo un borde comunicativo que todavía establecería un concepción anti hegemónica que alteraría al sistema capitalista.

Además el graffiti es una de las expresiones que toman un espacio público en las ciudades para recuperar la comunicación con las personas, fuera de los espacios que ocupan el poder cultural, en donde dominan unas cuantas personas con grandes renombres, quienes dictan qué se pública, o qué no, qué se expone y qué no, quién habla y quién no. El graffiti, el arte que toma las calles, muchas veces ha tenido una vena política que lo nutre, sobre todo la necesidad de denunciar, de exponer situaciones alarmantes y de manifestarse en contra del poder.

Esta forma de contestación contemporánea es una expresión que tiene en sí misma una dualidad que se manifiesta en la pared, lugar donde se plasma y toma forma de lo que las personas necesitan para combatir a la hegemonía. El graffiti se constituye como una creación visual que transgrede el orden establecido por el poder, al tiempo que deja en el anonimato a su creador frente a los observadores, posibilitando con ello un rango más amplio en el contenido de sus mensajes los cuales, en ocasiones, percibe únicamente un sector de la población, pero que va dirigido a todas las masas.

BIBLIOGRAFÍA:

- https://books.google.com.ec/books?hl=es&lr=&id=vFFl0Is4rJEC&oi=fnd&pg=PP8&dq=Writings+in+Society+%281983%29&ots=xroqj4yoLE&sig=bKlXBcu1VAd6E8RHN6VUSZMpaWM&redir_esc=y#v=onepage&q=Writings%20in%20Society%20%281983%29&f=false