En el contrato individual del trabajo podemos encontrar gran similitud con la relación individual del trabajo

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Lo anterior da los límites que nos pone la ley para poder acreditar la capacidad en el contrato, ahora bien el segundo presupuesto que es el libre albedrio nos dice que es la ausencia de vicios del consentimiento en el contrato es decir que por decisión del mismo trabajador y del mismo patrón realicen el consentimiento del mismo y así acuerden las voluntades libremente.

La licitud del objeto es realizar el trabajo de forma pacífica y sin dañar a los terceros, es decir que solamente cuando se ataquen los derechos de terceros o se ofendan los de la sociedad, se podrá impedir el trabajo y esto se deberá de hacer mediante resoluciones de las autoridades competentes y así mismo al dictar las clausulas nulas del contrato se sancionara por la ilicitud del objeto, aquí aunque se haya expresado en el contrato no se obligara a los trabajadores a cumplirlos ya que si lo hicieran estarían condenados a cumplir una sanción.

Y el último presupuesto seria la forma, en el cual el legislador se ha preocupado ya que a su parecer y coincido con él, es el más importante ya que es el que le da la estructura a lo que es el contrato, nos dicen que al hacerse por escrito mínimo se deberán hacer dos juegos ya los cuales se repartirán uno para el trabajador y otro para el patrón así mismo en el artículo 24 de la ley nos da un serie de requisitos que debe contener el contrato:

I.- nombre, nacionalidad, edad, sexo, estado civil y domicilio del trabajador y del patrón;

II.- si la relación del trabajo es para obra o tiempo determinado o tiempo indeterminado;

III.- el servicio o servicios que deberán prestarse, los que se determinaran con la mayor precisión posible;

IV.- el lugar o los lugares donde deba presentarse el trabajador;

V.- la duración de la jornada;

VI.- la forma y el monto del salario;

VII.- el día y el lugar del pago del salario;

VIII.- la indicación de que el trabajador será capacitado o adiestrado en los términos de los planes y programas establecidos o que se establezcan en la empresa; conforme lo dispuesto en la ley; y

IX.- otras condiciones de trabajo, tales como días de descanso, vacaciones y demás que convengan el trabajador y el patrón.

Una vez ya realizado el contrato individual de trabajo conforme a los puntos anteriores se puede tener la certeza de que la voluntad de ambas partes esta expresada en el mismo y que hubo un acuerdo entre el trabajador y el patron es decir que todo expresado bajo la normas de la ley y sobre todo que se realizó de buena fe, de este modo se cuidan la integridad de ambos y se impide los abusos en los patrones a los trabajadores y viceversa.

En todo momento se debe de respetar el contrato y todas la clausulas en las que ambas partes se pusieron de acuerdo, pero también se debe de tomar en cuenta que lo pactado solo tendrá valor si se realiza todo bajo las normas de la ley de trabajo con esto nos referimos a que de ninguna manera tendrá validez un contrato si se hace con cláusulas inferiores a lo que la ley del trabajo manifiesta.

Al igual se deberá revisar que en la interpretación del contrato manifieste que fue echo de buena fe y sin intensiones dolosas o maliciosas.

Y por último que se interprete el contrato como un acuerdo de voluntades entre ambos donde se encuentre pactada la equidad que se debe de tener entre el trabajador y el patrón creando un punto medio entre ambos para evitar abusos y así tener un ambiente sano de trabajo.

REFERENCIAS

- RAMOS EUSEBIO, TAPIA ORTEGA ANA ROSA. Noción del derecho del trabajo y la seguridad social. 2da edición, editorial PAC, S.A. México, D.F. 1991.

- GUERRERO EUQUERIO. Manual de derecho del trabajo 14* edición. Editorial Porrúa, México, D.F. 1984.

- DE BUEN NESTOR. Derecho del Trabajo tomo I. 8va edición. Editorial Porrúa, México, D.F, 1991.

- DE BUEN NESTOR. Derecho del Trabajo tomo II. 18* edición. Editorial Porrúa. México, D.F. 2004.