Estrés y trabajo docente
Enviado por Sara • 14 de Octubre de 2018 • 4.428 Palabras (18 Páginas) • 364 Visitas
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En un artículo de FENAPES titulado “LA DOCENCIA Y LA SALUD”, la profesora Rosario Culazzo citó “La actividad docente abarca el período comprendido desde la educación preescolar hasta las instituciones de postgrado en todos sus órdenes: académico, científico, artístico, técnico, gimnasia, campos deportivos, piscinas, entre otros. Las mencionadas tareas exigen no sólo la preparación de las mismas, la elaboración de recursos visuales auxiliares de estrategias de aprendizaje, impartir la clase de un modo atractivo para la atención del alumnado y que además procure su concentración y motive el aprendizaje. A esto se le suma la intensidad del trabajo (aumento de turnos y ritmos trabajando cada vez más horas), las exigencias de las familias sobre el docente y la exigencia de las autoridades públicas para que el sistema de educación haga frente a los nuevos desafíos sociales. (…) Al profesor se le exige ser padre, amigo, orientador…, si a todo esto se le suma el aumento en el índice de crecimiento de actitudes conflictivas que se dan en la sociedad y que se reflejan en las aulas, la necesidad de atender la diversidad, la rutina y la tensión en el trabajo, el aislamiento y la baja valoración social que perciben, el resultado se traduce en factores psicológicos que pueden manifestarse en trastornos de diversa índole. En la enseñanza se corren riesgos, se trata de una profesión dura por la responsabilidad y dedicación que exige, porque trata con personas en edades conflictivas (sean niños o jóvenes) y sus padres, los compañeros de trabajo. Es una actividad que suele caracterizarse por un considerable grado de estrés, absentismo y agotamiento (riesgos psicosociales)”.
En 1993 la Organización Mundial de Salud publicó una serie de habilidades las cuales fortalecen al propio cuidado de cada persona, donde entre ellas se encuentra el manejo de tensiones y estrés “Las tensiones son inevitables en la vida de todas las personas. El reto que representan no consiste en evadir las tensiones, sino en aprender a afrontarlas de manera constructiva, sin instalarse en un estado crónico de estrés. Esta habilidad permite identificar las fuentes de tensión y estrés en la vida cotidiana, saber reconocer sus distintas manifestaciones y encontrar vías para eliminarlas o contrarrestarlas de manera saludable”.
Lamentablemente no siempre es posible saber reconocer las manifestaciones en las que el estrés repercute en nuestros organismos, y aún más difícil es saberlas combatir. Hoy en día es un asunto muy estudiado por profesionales de la salud, principalmente aquellos casos en los que son las enfermedades psíquicas el objeto de estudio.
Hoy día se le atribuye mucho a que la inasistencia docente se debe al agotamiento y estrés del cuerpo y mente de la o el docente, y cuando ese estrés es llevadero y prolongado en el tiempo, o sea, no se trata; se produce lo que se denomina como el ‘síndrome de burn-out’ “padecimiento que consiste en la presencia de una respuesta prolongada de stress en el organismo ante los factores estresantes emocionales e interpersonales que se presentan en el trabajo, que incluye fatiga crónica, ineficacia y negación de lo ocurrido (…) Una situación de presión se define como una situación en la cual existe una brecha entre las exigencias de la realidad y las posibilidades de la persona de responder a las mismas. La forma en que la persona pueda lidiar con esa realidad dependerá de los recursos que tenga para afrontar las demandas internas y externas. El desgaste aparece como resultado de estar constantemente en situaciones de presión durante largos períodos. Las personas que trabajan con presión de tiempo, con muchas exigencias hacia ellos y que no pueden influenciar sobre el tipo de trabajo que hacen ni sobre las decisiones en el trabajo, tienden a sufrir presión en el trabajo. Cuanto más crece esta presión durante períodos más largos, sin tener la capacitad de disiparla, se crea una situación de burn-out” (Psicóloga Penina Fajgenbaun). –Véase Anexo “1er anexo ‘LOS COMPONENTES DEL BURNOUT’”-
En muchas personas esta enfermedad se puede observar en diferentes manifestaciones denominadas como los síntomas de exceso de estrés que son por ejemplo el continuo dolor de cabeza, las insoportables migrañas, dolores musculares como los lumbares y cervicales, dolores de hombro, trastornos de sueño, mal humor, irritabilidad, quedarse sin voz (afónico), entre muchas otras.
En cuanto a las inasistencias docentes, se explica en el estatuto las licencias e inasistencias a partir del capitulo XII, la cantidad de faltas y como son justificadas (a partir del articulo 70 hasta el 70.14).
Comenzando por el artículo 69 el cual explica que las licencias anuales coinciden con el periodo vacacional generalmente, son pagos.
Exceptuando a aquellos docentes que en periodo vacacional deban permanecer en la institución como en el caso de rendir exámenes.
Como se ha mencionado anteriormente a partir del capitulo 70 se comienza a explicar las faltas docentes junto con sus causales.
“Artículo 70. Los docentes efectivos e interinos tendrán derecho a hacer uso de licencia extraordinaria, con goce de sueldo, la que se computará en días corridos. En principio deberá ser solicitada con antelación y su causal debidamente acreditada.” (http://www.anep.edu.uy/anep/phocadownload/normativa/estatuto del funcionario docente_151130.pdf)
Las causales son:
70 – Licencia extraordinaria: puede ser por goce de sueldo o no.
70.1 - Licencia por enfermedad: Debe estar certificada por el servicio médico pertinente.
Las condiciones para que los docentes suplentes obtengan la licencia son:
Durará el tiempo que disponga el médico pero no debe extenderse del periodo de suplencia correspondiente.
No se podrá extender después del 28/2 del siguiente año.
70.2- Licencia por maternidad: aplica a las docentes suplentes también.
70.3 - Licencia por lactancia: es parcial y aplica también a las docentes suplentes.
70.4 - Licencia por duelo: padres, hijos, cónyuges: 10 días.
Días hábiles por hermanos 4 días.
Abuelos nietos hijos, padres políticos, padrastros e hijastros: 2 días.
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