Una Deserción Escolar.

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Un ejemplo no lo muestra el docente pues en una ocasión un joven se acercó a él para hablar y decirle que que podría hacer pues no tenía para pagar sus colegiaturas en una universidad privada, la cual supuestamente había nacido con el objetivo de apoyar a la educación en su comunidad local, cosa que se fue perdiendo con el paso de los años y que ahora más bien parecía que su principal objetivo era lucrar.

A pesar de los muchos sistemas de becas que se tienen como una ayuda para que muchos jóvenes con problemas económicos puedan seguir sus estudios en la educación media superior y en la superior este joven se vio obligado a abandonar el semestre pues no tuvo la oportunidad de pagar el adeudo generado en la universidad, a pesar de que él era un joven con un aprovechamiento escolar muy beno y alto, tuvo que dejarlo sin miramientos.

Otra cifra que alarma es el abandono de estudios por la desintegración familiar, pues en el cenco realizado a pesar de que no muestra un porcentaje alto, el docente nos comenta que en su experiencia como profesor en una de las más fuertes, pues existen caso de menores que deberían estar cursando la educación básica, pero gracias a que sus padres se separaron o divorciaron esto no puede ser así.

“No voy a la escuela porque no tengo papeles, tengo otra mamá y no puedo ir hasta que no los arregle”, esta es una de las respuesta de algunos niños así como estas hay muchas otras como que su padre se fue a Estados Unidos y dejo de enviar dinero para su manutención, su madre termino prostituyéndose, motivo por el cual su abuela decidió llevárselo a vivir con ella.

A si como este caso existe otro caso de una adolecente, que a causa de la separación de sus padres, tuvo que abandonar las aula, esto debido a que su progenitor no completa para la solvatación de su educación, al grado de demandar a la madre para que les pasara una pensión alimenticia, pues él es quien se encargó de la joven

De acuerdo con los datos del Censo de Población y Vivienda, en México había un total de 822 mil 563 adolescentes entre los 15 y los 17 años de edad. De ellos no asistían a la escuela 269 mil 441, es decir, 30.5%.

Debe destacarse que la inasistencia al bachillerato es mayor entre los hombres que entre las mujeres, pues de los 443 mil 423 adolescentes del sexo masculino contabilizados, había 140 mil 850 que no estaban inscritos en el nivel de educación media superior, dato equivalente al 31.8% de ellos.

La causa más común entre las mujeres es el embarazo, matrimonio o unión. Las estadísticas revelan que un 23% de las jovencitas dejó la escuela por este motivo. “Me cambió la vida, me sentía muy enamorada, salí embarazada, yo creía que estaba preparada para casarme, ahora me doy cuenta que me precipité, ya no puedo salir a divertirme, no puedo ir a la escuela, tengo que cuidar a mi hijo, si pudiera regresar el tiempo, hubiera evitado pasar por esta situación, pero lo hecho, hecho está”, esta es lo más común que las jones dicen y que aseguran estar muy arrepentidas, pues simplemente actúan por impulso a pesar de saber que no están preparadas para ser esposas ni amas de casa y mucho menos para ser madres. A si como este ejemplo existen muchos casos similares que cada vez hunden más y más a México en un regazo educativo y por lo tanto económico.

En todo el país hay 17 entidades que tienen índices de inasistencia al bachillerato superior a la media nacional. La peor situación se encuentra en Michoacán, en donde 45.1% de las y los adolescentes que estaban entre los 15 y los 17 años de edad no asistían a la escuela.

En segundo lugar se encuentra Guanajuato, con un 41% de inasistencia en el grupo de edad señalado; en tercer sitio está Chiapas, con un 39.8%; le sigue en cuarto sitio Zacatecas, con un 39% y en el quinto peor lugar se encuentra el estado de Guerrero, con un 36.9% de inasistencia.

Otras entidades con promedios superiores al nacional son: Jalisco, Durango, Aguascalientes, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Hidalgo, Morelos y San Luis Potosí.

Para comprender la magnitud de la llamada “deserción escolar”, a lo largo de la trayectoria que va de la primaria a la educación media superior, debe considerarse que, de cada 100 niñas y niños que ingresaron en 1999 a la primaria, únicamente 80 lograron egresar del sexto grado en la “edad normativa”.

En números absolutos las magnitudes son preocupantes, pues de los 4.18 millones de alumnas y alumnos que iniciaron el ciclo escolar 2010-2011, hubo 625 mil 142 que dejaron sus estudios, de los cuales, 282 mil 213 fueron mujeres y 342 mil 929 hombres

En total, entre los ciclos escolares 2000-2001 y el 2010-2011, más de 6.5 millones de adolescente han tenido que dejar la escuela.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Deserción en la Educación Media Superior, las entidades de la República Mexicana en las que hay mayor porcentaje de alumnas y alumnos que tuvieron que dejar sus estudios en el ciclo 2010-2011 son:

Nuevo León, con un 23.55%; Distrito Federal, con 18.53%: Chihuahua, con un 17.57%; Morelos, con un 17.50%; Guanajuato, con 17.48% y Coahuila, con 17.39%

.Queda claro que este problema crece día con día, aunque lo común es culpar a los docentes por no hacer bien su trabajo, es bueno resaltar que la educación nace en el núcleo familiar, es allí donde se tiene que retomar la educación, se deben formar ciudadanos con hambre de aprender, sembrar la semilla del conocimiento para que la deserción escolar pueda ir mermando poco a poco.

Que los miles de mexicanos que no tienen la oportunidad de conseguir una formación universitaria puedan romper con este círculo vicioso y cambien los paradigmas para que a sus hijos les brinden un futuro lleno de mejores oportunidades

México es uno de los países con mayor índice de deserción escolar pues en una cifra de 6.71 millones de jóvenes entre 17 y 15 años, 2.21 millones no asisten a la escuela, lo cual es un gran problema. Muchos de estos jóvenes dicen que esto es porque no tienen para pagar las colegiaturas, esto se trata de mejorar incorporando becas al sistema educativo, otra causa son los problemas familiares o divorcios lo cual según los jóvenes provoca que no tengan papeles certificados para estudiar, mientras las causas más usuales en las mujeres es el embarazo, unión o matrimonio. Sin embargo solo podremos cambiar este gran problema que undeal país cambiando nuestra cultura y la manera en la que pensamos todos los mexicanos