La institución de ésta es la gran factoría

...

el principal objetivo de la racionalización es mejorar el nivel de vida, aumentando la producción, abaratando costes, y facilitando su adquisición al obrero. En los años 30 aumentó la producción de bienes de consumo y se inició un incipiente mercado de masas que proporcionó más bienestar a las clases trabajadoras.

Fàbregas ambicionaba una Cataluña moderna, industrial, científica, de progreso hacia un modelo industrialista y socialmente equilibrado.

Es interesante observar como la organización taylorista/fordista que en un principio era una manera de organizar el trabajo en la fábrica se ha convertido en un modelo de regulación social que predominó hasta la crisis de los años 70. Unas personas piensan, otras hacen, se establece una fuerte jerarquía que facilita la selección de personal de acuerdo al puesto de trabajo según los conocimientos y formación. Se llega a tal control que se produce una gran producción y se fomenta el consumo de masas por la gran demanda de artículos fabricados.

Se critica que las tareas son simples, repetitivas, el trabajo poco cualificado, la supervisión y el control excesivo, que está basado en la poca confianza, la ausencia de autonomía y responsabilidad, el desaprovechamiento de potencialidades, de iniciativa que provocan rutina aburrimiento poca motivación. Otros encuentran favorable el alto desarrollo y de este modo muchas personas puedan comprar cosas que antes no podían.

Muchos de estos aspectos siguen vigentes en la actualidad: la cultura de masas, por medio de técnicas y procedimientos fomentan el consumo de toda variedad de productos, estilos y formas de vida. También se consume servicios: ocio, prensa, cultura. Siempre subordinada a la rentabilidad, para que puedan optar a ellos la clase media. Para llegar a la gran masa de consumidores se emplean técnicas de marketing y publicidad Aparece el fenómeno de las marcas, importa más la imagen, el diseñador, el precio elevado que la calidad o utilidad, ya que es símbolo de prestigio social. Se crea la necesidad de consumir, con falsas necesidades. El consumo acorta la vida de los productos los convierte en obsoletos. La tecnología los sustituye por otros más modernos, más avanzados. Se llega a un consumo como fin, no como una mejora de calidad de vida. Desde el punto de vista ambiental este consumo exagerado es insostenible por el gran uso de reservas naturales y el gran número de residuos que se generan, pudiendo llegar a amenazar la capacidad de regeneración de la naturaleza. La economía global se encuentra en un momento crucial.