Universidades públicas y privadas

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En este momento de la historia las universidades públicas, buscaban dar una mayor cobertura a la población, permitiendo la conformación de generaciones con grupos grandes de estudiantes con preparación heterogénea y con profesores cuya labor docente encontraba muchos escollos derivados de la masificación, generando una educación que en algunas ocasiones era deficiente y obligaba a las clases mas altas a buscar mejores oportunidades de educación que fueran acorde a sus intereses.

Las universidades de la segunda ola buscaban no generar una educación para hombres y mujeres devotos de la iglesia católica si no que buscan responder a las premisas básicas del capital empresarial. En esta ola nace el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) , El Instituto tecnológico autónomo de México, La Universidad de las Américas o bien el Sistema CETYS.

Las universidades de la tercera ola las instituciones de tercera ola se buscarón recibir en sus aulas a los alumnos que por distintas razones no habían podido acceder a otros sistemas de educación. El crecimiento en el número de instituciones y su participación en el total de la matrícula superior mexicana parecen ir en concordancia con el crecimiento que se registra en naciones de bajo desarrollo relativo y alta participación internacional tales como la India, Filipinas, Turquía, Rusia o bien China.

Hoy en día las universidades privadas de las tres olas buscan recibir alumnos con un alto perfil académico que pertenecen a un grupo intermedio o alto en el aspecto socioeconómico.

Dentro de lo que tiene que ver con las tendencias en educación, en el caso mexicano las más importantes son el crecimiento de la matricula en educación, la diversificación y el crecimiento del sector privado.

La responsabilidad social en las universidades latinoamericanas.

En la actualidad todas las universidades del mundo comparten un interés común por llevar a cabo la formación de profesionales, la divulgación científica, la extensión de la cultura, la generación del conocimiento y la difusión.

Sin embargo, pese a que todas las universidades tienen estos objetivos, existen diferentes modelos que se establecen en relación con la sociedad en la que se desarrollan.

En las Américas existe una gran diferencia entre los modelos que se aplican, por lo que resulta muy complicado llevar a cabo una clasificación de estos.

El desarrollo de una sociedad capitalista industrial requería de instituciones vinculadas con el fortalecimiento de la ideología de libre mercado que hoy caracteriza a las universidades en los Estados Unidos. En estas, nos encontramos con componentes tan complejos como son la diversidad, la orientación hacia el mercado, la segmentación social, un modelo de ciencia industrial, la individualización en grupos cerrados por la disciplina y la organización para operar como ventas lucrativas es decir se genera un capitalismo académico.

Las Universidades de América Latina y el Caribe tienen la particularidad de articularse con las necesidades sociales.

El modelo de universidad latinoamericano pudo haber tenido su nacimiento en la filosofía del movimiento de Córdoba impulsado a finales del siglo XX impulsando de manera importante una transformación política, cultural y académica todo a partir de la búsqueda y obtención de la autonomía.

La autonomía universitaria fue vital en países donde existía una fuerte carga de dictaduras militares como Argentina, Chile, Paraguay, etc.

Hoy la universidad en las Américas se destaca por varios factores como son la compleja administración político administrativa, sus orientaciones académicas o bien su amplia oferta profesionales.

La responsabilidad social es hoy un componente fundamental de la universidad desde donde se desea hacer frente a las grandes problemáticas modernas de la sociedad.

En la conferencia regional de educación superior que se llevo a cabo en 2008 en Cartagena de Indias se establecieron algunos puntos de interés para el desarrollo de la responsabilidad social en la universidad:

- Regresar el carácter humanista a la universidad.

- Configurar una relación más activa de la universidad con sus diferentes contextos.

- La universidad tienen la obligación de ayudar en el entendimiento de situaciones complejas con puntos de vista muy diversos.

- La universidad pública debe ser una catalizadora del desarrollo individual y social teniendo en cuenta el pensamiento critico e independiente.

- El compromiso de la universidad debe estar vinculado a la reproducción y perfeccionamiento del modelo social buscando la equidad, la cultura, el pluralismo ideológico y la formación de una masa crítica.

El contexto de la responsabilidad social en las Américas.

La globalización en el mundo, especialmente en la economía ha cambiado muchos patrones, generando también una revolución científico-tecnológica que genera cambios tanto en lo económico como en lo cultural.

La globalización a la que se enfrentan los pueblos latinoamericanos se establece bajo un modelo económico neoliberal. Esto genera una cierta disparidad en aspectos como la ambiental, energética, alimentaria o de seguridad en naciones o personas que están en desventaja respecto a las otras.

Esta situación se puede trasladar a otras cuestiones, pasando del capital a un valor más importante, el conocimiento, donde se da una importante desigualdad en la distribución y promoción del mismo, el conocimiento se vincula con crecimiento económico, pero además aborda el crecimiento humano.

La economía en la que vivimos basa su funcionamiento en el aprendizaje que esta motorizado por la innovación.

En la Universidad latinoamericana esto ha derivado en la mercantilización de los conocimientos y un precario desarrollo de nuestro sistema de educación.

Pese a que las matrículas universitarias han incrementado de manera importante esto no ha dado solución al problema de acceso a la educación de las masas en estos países y a aumentado brechas entre sectores sociales.

En el caso de la investigación en universidades esta sigue una agenda impuesta por los países desarrollados y es muy limitada. No se producen sinergias entre educación superior y la empresa nacional.

Aunado a esta