TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN I

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Estas se han universalizado, en la actualidad estudiantes y no estudiantes las utilizan, aunque en nuestro país como dice (Vazquez, 2014) “México se encuentra por encima del promedio de América Latina en el uso de social media, con un alcance del 98.2 de los usuarios de Internet, mientras que el promedio de la región es de 95.8. Estos datos, lo colocan por encima de Rusia, Turquía, Perú y Chile”.

Esto significa el tremendo potencial que tiene esta tecnología para penetrar en las aulas y crear comunidades virtuales que el docente pueda aprovechar plenamente para incorporarlas a la enseñanza. Que el tiempo que se invierte en Internet se utilice para aprender y asimilar competencias tecnológicas tan necesarias en el quehacer estudiantil y laboral de todos nosotros, más aun “habiendo evidencias de que los estudiantes presentan una actitud favorable al uso académico de las redes sociales” (e.g.: Espuny, González, Lleixà & otros, 2011).

Si tomamos en cuenta que en nuestro país existen severos limitantes tecnológicos en muchas zonas urbanas y rurales, es indudable que las redes sociales proporcionan la oportunidad de hacer frente a estos desafíos de enseñanza, ya que su uso -que incluye en la actualidad Tablets, smartphones- las hace más versátiles que el propio Internet en su inicio.

De hecho, algunas de sus características propias, tales como colaboración, libre difusión de in - formación o generación de contenidos propios para la construcción del conocimiento han sido aplicadas de inmediato al campo educativo (De Haro, 2010).

Las redes permiten y favorecen publicar y compartir información, el autoaprendizaje; el trabajo en equipo; la comunicación, tanto entre alumnos como entre alumno-profesor; la retroalimentación; el acceso a otras fuentes de información que apoyan e incluso facilitan el aprendizaje constructivista y el aprendizaje colaborativo; y el contacto con expertos. En conjunto, todas estas aplicaciones y recursos hacen que el aprendizaje sea más interactivo y significativo y sobre todo que se desarrolle en un ambiente más dinámico (Imbernón, Silva & Guzmán, 2011).

2.- Conclusiones

De acuerdo a mi experiencia personal con las Redes Sociales puedo decir que me han facilitado la “comunicación” con mis pares, mas no me ha resuelto la necesaria interacción con el maestro, creo que el reto será crear aulas virtuales efectivas en donde podamos estar presentes de manera virtual todos presentes, sobre todo lo digo por la resolución de dudas propias de cada materia, no es fácil entender al maestro con solo mensajes y texto, hace falta la explicación cara a cara y ver cómo se resuelve tal o cual cosa en los pizarrones. Reconozco que me hace falta más utilización y familiarización en esta etapa de formación sin que esto sea una distracción, hacer frente a los desafíos que esto implica sobre todo en lo técnico, espero no ser un “alumno pesimista o anti-TIC” (Gutiérrez, Palacios & Torrego, 2010)