“Comunicación en Salud”

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y el miedo de los pacientes, la carga de trabajo de los médicos, el miedo a ser juzgados, el miedo al abuso físico o verbal y las muy probables expectativas poco realistas del paciente. Sin embargo, la comunicación del trabajador de la salud y sus habilidades interpersonales abarcan la capacidad de recolectar información para facilitar un diagnóstico preciso, aconsejar apropiadamente, dar instrucciones terapéuticas y establecer relaciones de cuidado con los pacientes.

Estas son habilidades clínicas básicas en la práctica de todas las ciencias de la salud, con un objetivo final de lograr el mejor resultado y la satisfacción del paciente, que son esenciales para ofrecer un buen servicio. Podemos destacar la comunicación en salud como una pieza imprescindible en el impulso a la mejora de la salud pública y personal, dada su aportación en la prevención de la enfermedad facilitando una óptima relación entre el trabajador de la salud y el paciente, la consistencia en el seguimiento de las recomendaciones brindadas por un equipo médico y los regímenes terapéuticos individuales en conjunto con la propagación de información referente a los posibles riesgos.

Dar malas noticias a los pacientes es una tarea compleja y desafiante en la práctica de la medicina, demostrando que la construcción de buenas relaciones es especialmente importante, incluyendo comprender las perspectivas de los pacientes, compartir información, conocimiento y también las expectativas. Hipócrates sugirió que los médicos pueden influir en la salud de los pacientes. La mala comunicación tiene serias implicaciones, ya que puede entorpecer la comprensión y la participación de los pacientes en la planificación del tratamiento. Además disminuir la satisfacción del paciente con la atención médica, el nivel de esperanza y el posterior desajuste psicológico.

La comunicación es un componente extensamente importante en el proceso de atención de la salud. Nosotros los trabajadores de la salud estamos en una posición única de respeto y poder. Una buena comunicación entre nosotros y el paciente puede ser una fuente de motivación, incentivo y apoyo. Esto puede aumentar la satisfacción laboral y reforzar la confianza de los pacientes en sí mismos, Motivación y visión positiva de su estado de salud, lo que puede influir en sus resultados de salud.

La mayoría de las quejas sobre el trabajador de la salud están relacionadas con cuestiones de comunicación, no con la competencia clínica. Los pacientes desean que se les pueda diagnosticar y tratar con habilidad sus enfermedades, así como comunicarse eficazmente con ellos. Una mejor comunicación y habilidades interpersonales son capaces de detectar problemas antes, pueden prevenir crisis médicas y la intervención costosa, y proporcionar un mejor apoyo a sus pacientes. Esto puede conducir a resultados de calidad y a una mayor satisfacción, menores costos de atención, mayor comprensión por el paciente de los problemas de salud y una mejor adherencia al proceso de tratamiento.

En conclusión, actualmente hay una mayor expectativa de toma de decisiones colaborativas, entre el equipo médico y entre el trabajador de la salud y los pacientes. Es por esto que participando como socios podemos lograr los objetivos acordados y el alcanzar una buena calidad de vida.

La capacidad de comunicarse bien no es innata. Debemos considerar a la comunicación como otro procedimiento que debe aprenderse en la escuela, tal vez uno de los más importantes a largo plazo, dado que la mayoría de lo que nosotros hacemos es hablar con los pacientes. La forma en que aprendemos a comunicarnos depende de cómo se nos enseña. Pocos aprendemos bien cuando nos sentamos en salas de conferencias y escuchamos presentaciones didácticas.

La comunicación efectiva es vital para practicar una buena medicina. Una de las únicas maneras de aprender a comunicarnos es recibiendo retroalimentación. Actualmente nos encontramos con que cada vez más universidades están reconociendo la importancia de la buena comunicación e imparten cursos de comunicación. Esperemos que con este nuevo enfoque, la comunicación entre el paciente y el trabajador de la salud mejore, así obtendremos pacientes más felices y a su vez más saludables, y nosotros como equipo médico encontrar nuestro trabajo más gratificante.

"El paciente nunca se preocupará de lo mucho que sabes, hasta que sepan lo mucho que te importa."

(Terry Canale en su Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos Dirección