Evaluación de la actividad lúdica.

...

La observación es el instrumento de evaluación específicamente infantil, y desde esta perspectiva vamos a identificar sus elementos. De la utilización que se haga de los mismos dependerá que la evaluación se convierta en un instrumento de aprendizaje para los niños y niñas y las personas adultas.

Es preciso comprender la importancia y consecuencias de la evaluación al servicio de unaeducación compensadora, para que todos los niños y niñas se incorporen al sistema escolar desde unas posiciones lo más justas posibles.

La actividad educativa, como cualquier otra empresa humana, precisa de un sistema que compruebe sus resultados en relación con los objetivos previstos.

Existen dos modelos que determinan hacia dónde se orientan los objetivos educativos:

- Conseguir que el alumnado y sus conocimientos se adecuen a un modelo predeterminado: técnico, académico o profesional. Para alcanzar el primero de los objetivos, los resultados de la evaluación son determinantes. Esto se aplica por ejemplo en una oposición para una plaza de médico, o de químico en una planta nuclear, pero no en los primeros años de escolaridad.

- Conseguir el máximo desarrollo posible de capacidades en cada niño y niña, con unos mínimos que sirven de referencia. Es decir conseguir el máximo potencial de cada individuo. Es el más apropiado para la educación obligatoria y más aún en la etapa de educación infantil. La consecución del desarrollo de las capacidades de un niño de 0-3 años depende principalmente de las experiencias que se le posibiliten.

Elementos que configuran la evaluación y la observación (II).

Para un educador o una educadora la observación supone una mirada atenta al juego, que tiene como finalidad llegar a comprender y conocer, de una forma empírica y descriptiva, la realidad infantil. Además la observación es el principal instrumento de la evaluación en la etapa infantil.

Por su importancia y adaptación en la etapa que se está estudiando, se analizarán las implicaciones de la evaluación-observación del juego en la escuela infantil. La escuela es la institución encargada de conseguir el máximo desarrollo posible de capacidades.

Este proceso educativo es circular y se retroalimenta ya que la escuela se plantea un objetivo educativo, pone los medios para conseguirlo y analiza las características de su consecución, para poner nuevos medios e irlos ajustando progresivamente en un intercambio de mejora.

El educador o educadora tiene que realizar actividades acordes a la propuesta de enseñanza, que permitan evaluar su resultado:

La observación tiene un doble objetivo:

- Por un lado es la mejor manera de obtener datos sobre las competencias y capacidades de los niños y niñas.

- También sirve para analizar los procedimientos didácticos o la eficacia de las técnicas lúdicas con objeto de mejorarlas y adaptarlas a las necesidades de los niños y niñas.

La evaluación no se debe utilizar para:

- Una clasificación temprana de los individuos en cualquier sentido.

- Eliminar la actuación responsable de la enseñanza escolar sobre los síntomas, aunque el origen de la situación se haya localizado en el individuo, en su familia o en su entorno social.

Cualquier evaluador educativo tiene un compromiso con el pequeño, con su familia y con el entorno social al que pertenece, por ello debe utilizar los resultados de la observación para mejorarlos en beneficio de la persona interesada.

Autoevaluación

Indica cuáles de las siguientes afirmaciones son verdaderas.

En la propuesta de enseñanza el educador permite y no posibilita actividades significativas.

Tras la interpretación de los síntomas elabora un nuevo plan de actuación a partir de los resultados.

Con la observación se detectan los síntomas.

La observación es la mejor manera de obtener información sobre competencias y capacidades de niños y niñas.

Tipos de observación.

La observación requiere determinar el sujeto de la evaluación. Para ello se pueden establecer diferentes tipos de observación. En todas se evalúa la actuación de los niños y niñas, que puede estar acorde o no con lo esperado, independizando su identidad. Se observa algo externo a ellas: su comportamiento, su actuación o una habilidad determinada.

Los tipos de observación más comunes los podemos clasificar en los siguientes:

Observación directa

Observación indirecta

Observación diferida

Es la que realiza el propio educador o educadora sobre los niños y niñas.

El educador o educadora recoge información sobre la observación de otros profesionales.

Se recoge la información a través de medios técnicos para ser analizados y visualizados con posterioridad al momento.

Observación Participante

Observación no Participante

El educador observa las acciones de los niños y niñas siendo partícipe en los juegos. Esto puede modificar o interferir el comportamiento natural de los niños y niñas

El educador o educadora no interviene en los juegos que realizan los niños y niñas. Es más objetiva porque no tiene el peligro de interferir el comportamiento de niños y niñas.

Observación Estructurada

Observación No estructurada

Los instrumentos que se utilizan son muy concretos y definidos como las fichas o listas de comprobación y se suele realizar siempre en un mismo momento de juego.

Los instrumentos que se utilizan son más abiertos como diarios o anecdotarios y no tiene un momento concreto de observación de las conductas.

Observación Individual

Observación colectiva