Evaluando y Valorando la práctica docente y los contenidos temáticos

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¿CÓMO SE RELACIONAN LA VALORACIÓN Y LA EVALUACIÓN?

Tanto la valoración como la evaluación proporcionan retroalimentación permanente a los maestros, alumnos y padres con el objeto de mejorar el aprendizaje de los estudiantes. La valoración y la evaluación se utilizan cuando los maestros:

- Recopilan el conocimiento previo sobre lo que el estudiante sabe y puede hacer (diagnostica).

- Hacen seguimiento al progreso del estudiante (formativa).

- Evalúan los logros en los desempeños, productos o resultados del estudiante con el objeto de establecer una calificación que se consigna en las libretas o reportes de calificaciones (sumativa o acumulativa).

El proceso de valoración revela lo que un estudiante comprende, sabe y puede hacer.

El proceso de evaluación indica la calidad del desempeño con base en el programa curricular.

Los puntajes o calificaciones que se derivan de las valoraciones formativas o diagnósticas no se deben usar para reportar sobre los niveles de logro durante el curso de un nuevo aprendizaje, deben emplearse sí, para identificar el punto en el cual se encontraban los estudiantes al comenzar ese aprendizaje con el objeto de poderlos guiar hacia el alcance de un mayor desarrollo. Estos puntajes deben ser empleados para informar o para demostrar progreso durante un período de tiempo.

Los puntajes que se derivan de las valoraciones sumativas se deben utilizar para informar sobre los niveles de logro en los casos en que los maestros están evaluando los productos del desempeño del estudiante. [1]

Es importante evaluar porque:

- Es una oportunidad más de aprendizaje.

- Se obtiene información sobre el grado en que se han alcanzado los propósitos y los aprendizajes esperados.

- Se da a conocer el grado en que se han logrado las competencias.

- Se tienen indicadores de los logros y las debilidades de los alumnos.

- Es necesario evaluar, acreditar y promover al alumno.

Es importante evaluar para:

- Guiar la práctica docente.

- Regular el proceso de enseñanza y de aprendizaje.

- Conocer las dificultades de los alumnos en sus aprendizajes.

- Obtener información sobre el tipo de ayuda que debe brindarse a los alumnos.

- Ajustar la ayuda mediante aproximaciones sucesivas a las características individuales de los alumnos. [2]

La evaluación y valoración de la práctica docente y contenidos temáticos de acuerdo a mis experiencias vividas.

De acuerdo a todo lo visto me es grato redactar mi experiencia vivida tanto en las observaciones como en conducciones que he realizado como docente en formación, tomando en cuenta algunos puntos que se relacionan con el presente ensayo.

Al entrar a la normal estaba segura que no habría mucha dificultad en cuanto al trabajo que se realizaría ya que según yo solo era cuestión de entregar trabajos y a veces solo iban a ser observaciones, pero desde el primer día que estuve observando al maestro dando su clase me di cuenta de lo complejo que resultaba ya que se trata de lidiar con diferentes factores que obstaculizan de algún modo el aprendizaje de los alumnos, pero a la ves pensaba que el maestro debía emplear otras estrategias al ver que algunos alumnos no le daban la atención adecuada a la clase, desde ese momento me programe diferentes actividades que según yo aplicaría en el momento de conducir mis clases para que estas fueran amenas e interesantes para mis alumnos.

Pero los días pasaban y la verdad cada día aumentaba mi inseguridad al observar que por más que la maestra o maestro trataba de captar la atención de los alumnos a veces no daba resultado, aunque debo reconocer que había maestros muy buenos que en realidad lograban el objetivo de tener un control total del grupo, además de que me gusto su forma de trabajo ya que se llevaban una evaluación constante de cada alumno lo que facilitaba el aprendizaje de estos porque los maestros se daban cuenta en que se estaba fallando y podían diagnosticar a tiempo esas fallas e implementaban estrategias que ayudaban a mejorar el aprendizaje de los alumnos.

El primer día de observación fue difícil, no es lo mismo estar observando, ni estar como alumno que estar frente a un grupo que sabes que es tu total responsabilidad y de ti depende su aprendizaje, empezando con la planeación que también me fue difícil realizarla ya que tenía que cuidar cada detalle y no dejar nada fuera de los contenidos temáticos que mi titular me entrego para mi conducción.

A mi consideración los términos Evaluación y Valoración son aplicados en todo momento dentro de la formación docente, un ejemplo claro de esto son los contenidos temáticos con los que tenemos que trabajar, ya que desde el momento que se nos presentan comenzamos a hacer una evaluación detallada de todo para ver de qué forma los vamos a aplicar dentro del área de trabajo.

Recuerdo que antes el maestro solo se basaba en el examen para evaluar nuestros conocimientos y así asignaba una calificación, dejando a un lado la evaluación diaria, esto por supuesto que nos afectaba porque solo leíamos para el examen que se nos iba a aplicar y memorizábamos las repuestas lo cual olvidábamos en un corto plazo. [2]

Si bien es cierto, cada persona dará a dichos contenidos el enfoque que crea conveniente, ya que de ahí partirá el punto donde se tendrá que valorar si los métodos aplicados cubrieron las necesidades requeridas por los alumnos.

El decir que vamos a dar una valoración no solo significa poner una calificación o una buena nota, se refiere a tener un criterio más amplio y una visión más extensa para identificar el verdadero aprendizaje que los estudiantes requieren.

Dentro de la práctica docente estos términos se aplican cuando nosotros como docentes en formación hacemos una recopilación de todo lo aprendido y de lo vivido en los lugares donde se nos designó para observaciones o prácticas, aquí a parte de la evaluación que se nos hace como alumnos nosotros mismos nos tenemos que hacer una autoevaluación para poder mejorar nuestras habilidades como futuros profesores