INFLUENCIA DE LA FAMILIA EN EL COMPORTAMIENTO SEXUAL DEL INDIVIDUO

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En consecuencia, la educación sexual es el campo en que la familia es la mayor responsable, y en el que se tiene que hacer un mayor énfasis y esfuerzo en la construcción de valores. Para ello, hay que hablar del tema con naturalidad para crear un contacto físico y afectivo espontáneo expresándole cariño, afecto y seguridad al besarlo, tocarlo, arrullarlo, mirarlo, entre otras; de esta manera, se le estará estimulando a un desarrollo normal de su sexualidad, así, el niño podrá adquirir los roles de comportamiento correspondientes su sexualidad en relación a ser hombre o mujer. Es importante que estos roles o formas de comportarse sean amplios, flexibles y no rígidos, pues, las conductas distintivas de los hombres y mujeres se aprenden no están determinadas por sus características biológicas, por lo que, no es conveniente castigar a un niño por manifestar actitudes o conductas que los padres corresponden a su sexo, por ejemplo, los hombre no lloran; por consiguiente, explicar y vivenciar una sexualidad acorde con sus valores es una dificultad que enfrenta la familia, ya que, hablar de sexualidad en la familia implicará una coherencia entre lo que se dice y lo que se hace, por lo que, este tema debe ser siempre abierto, claro y congruente con nuestras creencias y valores. En resumen, todo el comportamiento sexual de individuo no es más que el reflejo de su persona y su educación recibida en el transcurso de la vida, así como, en el seno de la familia y también en el colegio, de ahí la importancia de estas instituciones para la formación del individuo