PASIÓN EN LOS PROFESORES

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________________________________________________________________________ Paulo Fierre (2002)

1. Enkvist, I. La buena y la mala educación. Ejemplos internacionales. (2011)

2. Anderson Y Brewer (1946)

¿Serán grandes arquitectos, médicos, diseñadores o por qué no, maestros? Hoy en día ejercen sus oficios con la pasión y dedicación que pienso todo profesional debe tener o han seguido estas enseñanzas tradicionalista, espero sinceramente que no, que este tipo de maestros les halla enseñado más bien lo que no se debe hacer y seguir un enfoque integrador.

Fried3 fue pionero en hablar sobre la “Pasión” en la enseñanza y el aprendizaje, en su libro The Passionate Teacher hablada de una “conexión entre la pasión por enseñar y la calidad del aprendizaje”. Pero para este año fue muy poco vistoso y fácilmente evadido, y docentes quienes adquirían el libro no comentaban mucho de sobre él, no porque fuera un mal libro, más bien era porque se sentían aludidos, ya que hablaba de la pasión que deben tener los educadores al enseñar, que no es solo ir a dar la información que se posee a los estudiantes, sino crear en ellos una chispa de curiosidad, de inventiva que los empuje a seguir buscando el saber y a fomentar el crecimiento de su ser. No es hasta casi diez años después que aparece Christopher Day4 con su libro The Passionate Teacher, que nos presenta la necesidad de la pasión en la enseñanza y el aprendizaje, “una buena enseñanza es fundamental para elevar los niveles, es obvio que es responsabilidad tanto del docente como de la escuela garantizar que el profesorado continúe manteniendo la pasión, ejercitando el amor, la preocupación y el respeto necesarios para una buena enseñanza, para tratar de “profundizar” y para mantener viva la esperanza de un futuro mejor” y nos habla del docente apasionado. Este es aquel que tiene valores bien definidos de sinceridad, justicia y sabiduría practica; compromiso, esto quiere decir que debe haber un aprendizaje con responsabilidad centrado en la persona; preocupación por una enseñanza reflexiva y regida por la investigación tanto individual como una colaboración de docente y alumno; además el educador debe tener una visión para el aprendizaje y el rendimiento de todos, es decir debe dar esperanza; sembrar en ellos la curiosidad por el conocimiento de la enseñanza; ayudarles a encontrar a cada discípulo su identidad, en la que se dé una relación estrecha entre la cognición y la emoción; Por último el fin moral de un educador es el de ser siempre perseverante, valeroso, ser persistente ante la adversidad.

Sin duda que los procesos para crear métodos ideales en la enseñanza han servido, pero no han sido transcendentales en el aprendizaje de los estudiantes, pienso entonces que sí es de transcendencia el ejercicio de la pasión en los educadores. Porque este una de las principales causas de que no se estén educando personas en todo el sentido del ser, cuando le pones pasión a lo que haces, se ve la diferencia, porque se hace lo que se gusta y se vive para ello, hay muchos docentes hoy en día que saben de esto y quieren instruir a sus alumnos a que ellos también consigan eso que les gusta y que lo ejerzan con dedicación, como también está el problema de ciertos docentes que saben mucho, tienen mucho conocimiento por compartir pero no saben cómo transmitir todo eso a sus estudiantes, ya que o no tienen pasión al ejercer su oficio o por el contrario si tienen pasión pero no tiene la manera adecuada para crear una conexión con sus educandos, porque eso también es importante, hay que saber llegar a los alumnos, es ahí donde las herramientas de la pedagogía son importantes en el ejercicio de un buen aprendizaje.

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3. Robert Fried, The Passionate Teacher (1995)

4. Christopher Day, A Passion for Teaching (2004)

La pasión bien dirigida logra que las personas que estamos formando sigan construyendo su camino a la integración de todo su ser, conociéndose plenamente y decidiendo que futuro quiere tener, transmitiendo esa pasión a las nuevas generaciones ellos también serán capaces de ejercer sus profesiones con dedicación e inspirar a las futuras generaciones, ya que con esta no solo se hacen perfectas las cosas, se hacen de manera alegre, se da un paso más en la construcción de un mundo mejor, todos podemos elegir quien queremos ser y es una decisión que le pertenece a cada quien, pero debido a quienes nos orientaron desde nuestro inicios es que vamos “encaminado” si alguien en nuestra infancia o adolescencia nos inspiró, ya sea por su ideales o por sus conocimientos, ciertamente lo que vimos en esa persona fue la pasión con la que sentía de verdad esos ideales, esa persona fueron entonces nuestros maestros, los que nos encaminaron a lo que hoy en día somos o luchamos por ser.

Cartagena de Indias, Noviembre 25 de 2013