RELACIÓN ENTRE LA RESISTENCIA FÍSICA Y EL PESO CORPORAL DE LOS ESTUDIANTES DE 3º AÑO DE LA U.E. “NUESTRA SEÑORA DE LOURDES II”.

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La obesidad también puede ser vista como un símbolo dentro de un sistema de prestigio. "El tipo de comida, la cantidad y la manera en la cual está servida están entre los criterios importantes de clase social. En la mayoría de las sociedades tribales, inclusive aquellas con un sistema social altamente estratificado, todo el mundo-la realeza y los plebeyos-, comían la misma clase de alimentos y si hubo una hambruna todo el mundo estuvo hambriento. Con la siempre creciente diversidad de elementos, la comida se ha convertido no solamente en un asunto de estatus social, sino también una marca de la personalidad y el gusto individual".

Antecedentes de la investigación

(Erickson, 2011). Estudio longitudinal en USA basado en más de 1.000 niños de 9 a 10 años de edad, midió la autoestima entre los niños obesos y los no obesos. Los niños obesos revelaron una disminución significativa en los niveles de auto-estima. Un mayor índice de masa corporal basal fue un predictor de pobre autoestima. Concluyendo que; os niños con baja autoestima tienen el doble de propensión a tener sobrepeso u obesidad en comparación con sus pares de peso normal. La obesidad conlleva una baja autoestima, así como una disminución de la calidad de vida.

(Pisabarro R; Irazábal M; Recalde E, 2006). Prevalencia del Sobrepeso y Hallazgos en la ayuda recibida. Durante el mes de noviembre de 2006 con el objetivo de evaluar la prevalencia de sobrepeso y obesidad en Venezuela se llevó a cabo un estudio de corte en todo el país. Sobre la base de datos recogidos a partir de una encuesta domiciliaria se obtuvo una muestra de 280 individuos mayores de 14 años. Los resultados evidenciaron que más de la mitad de la población venezolana (51%) tiene algún grado de sobrepeso; 17% es obeso y 5% se encuentra en situación de alto riesgo. Esto nos enfrenta a una realidad preocupante y constituyen un desafío para la salud pública nacional, demostrando la necesidad de adoptar medidas de prevención para contener lo que constituye una verdadera epidemia. Como metodología se utilizó la técnica de investigación social, la población utilizada fue de 280 jóvenes de los cuales se tomaron 82 jóvenes como muestra y se utilizaron técnicas como la aclaración de interrogantes a través de charlas, Las conclusiones a las que se llegaron fue la recopilación de una valiosa información sobre que hay una gran cantidad de personas las cuales desconoce las causas de estas y las que las conocen aun así no hace lo adecuado al igual que es muy poca la ayuda que se les presta a los presentes individuos.

(Álvarez, 2004) Complicaciones de la obesidad en la adolescencia. El número de personas que sufren de obesidad es el doble entre las edades de 13 y 19 años y drásticamente se aumenta después de esta edad. La gente que sufre de sobrepeso y obesidad ha sido objeto de bromas y ocasionalmente discriminación, se les ha considerado culpables de sufrir su condición, mientras que la verdad es que han sido víctimas de una enfermedad que afecta no solo el aspecto físico de la vida, sino también el emocional y el conductual, una enfermedad que ahora es considerada y tratada como "una enfermedad mortal, crónica y progresiva de proporciones epidémicas". El objetivo que persigue es indagar el peso de los jóvenes, conocer las características de nutrición en los jóvenes evaluados, e investigar si existe diferencia de sobrepeso y obesidad entre el sexo masculino y femenino. Como metodología se utilizó la técnica de investigación social, la población utilizada fue de 120 jóvenes de los cuales se tomaron 48 jóvenes como muestra y se utilizaron técnicas como la encuestas, Se determinó la talla de los jóvenes, y su nutrición diaria. Las conclusiones a las que se llegaron fue la recopilación de una valiosa información sobre que hay una gran población de jóvenes obesos a los cuales se les otorga ayuda.

Bases teóricas

1.- Capacidades físicas básicas

También llamadas cualidades físicas básicas, se pueden definir como las predisposiciones o caracteres (posibilidades, características) que el individuo posee, susceptibles de medida y mejora, que permiten el movimiento y el tono postural (Jackson, 2013).

1.1.- Clasificación de las capacidades físicas básicas

- Capacidades motrices: resistencia, fuerza, velocidad y flexibilidad. {Ver figura 1}

- Capacidades perceptivo-motrices: coordinación y equilibrio.

- Capacidades resultantes: agilidad.

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Figura 1. Clasificación de las capacidades físicas (Jackson, 2013).

2.- Resistencia física

Es la capacidad de todo el organismo, o solamente de una parte, para resistir la fatiga. {Ver figura 2} Uno de los aspectos más importantes en los procesos fisiológicos del organismo y que interviene en toda actividad humana es el sistema energético. Es decir, la producción de energía en las células para que el organismo pueda realizar diferentes funciones (Yáñez & Espinoiza, 2013).

La resistencia física es la capacidad psicofísica del deportista para resistir por un periodo de tiempo prolongado a determinada rutina. O en otros términos la resistencia es la capacidad para mantener un esfuerzo eficaz durante el mayor tiempo posible (Yáñez & Espinoiza, 2013).

El cuerpo humano está formado por un motor, donde se encuentran como piezas claves el corazón, el pulmón el hígado y otros sistemas importantes. Todos estos órganos no pueden funcionar si no se les suministra energía (Yáñez & Espinoiza, 2013).

La energía en el cuerpo humana, el combustible, se almacena en el hígado y el conjunto de los músculos en forma de glucógeno. El glucógeno por sí solo no puede realizar función alguna, Estos procesos se realizan por combustión de cada uno de los combustibles. En el cuerpo humano la combustión se produce en la célula. Para que se realice esta combustión es preciso que haya oxígeno (Yáñez & Espinoiza, 2013).

En el cuerpo humano la mezcla para la combustión se realiza por una perfusión con la sangre que se encuentra en el pulmón, que luego se repartirá por todo el cuerpo a las diferentes células. Es él mismo quien regula el glucógeno almacenándolo en el hígado, el resto la desecha o lo almacena en depósito en forma de grasa (Yáñez & Espinoiza, 2013).

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