Toma de Presión Arterial
Enviado por mondoro • 9 de Marzo de 2018 • 5.117 Palabras (21 Páginas) • 374 Visitas
...
posterior a la actividad física respecto a los datos en reposo, se manifiesta un aumento considerable de la frecuencia cardiaca a 119 lpm, de la frecuencia respiratoria a 28 rpm, de la presión sistólica a 140 mmHg, y de la presión diastólica a 90 mmHg. (Tabla 2.)
Y finalmente en el registro posterior a la ingesta de alimentos con respecto a los datos en reposo, se manifiesta un aumento escaso de la frecuencia cardiaca a 63 lpm, de la frecuencia respiratoria a 20 rpm, de la presión diastólica a 80 mmHg y un descenso de la presión sistólica a 123 mmHg. (Tabla 3.)
En el caso del voluntario 3, se registró lo siguiente:
Voluntaria de sexo femenino, de 19 años de edad con un peso de 61 kg; en estado de reposo tiene una frecuencia cardiaca de 78 lpm, una frecuencia respiratoria de 15 rpm, una presión sistólica de 105 mmHg y una presión diastólica de 70 mmHg. (Tabla 1.)
En el registro posterior a la actividad física respecto a los datos en reposo, se manifiesta un aumento considerable de la frecuencia cardiaca a 124 lpm, de la frecuencia respiratoria a 29 rpm, de la presión sistólica a 145 mmHg, y de la presión diastólica a 85 mmHg. (Tabla 2.)
Y finalmente en el registro posterior a la ingesta de alimentos con respecto a los datos en reposo, se manifiesta un aumento escaso de la frecuencia cardiaca a 81 lpm, de la frecuencia respiratoria a 19 rpm, de la presión sistólica a 125 mmHg, y de la presión diastólica a 75 mmHg. (Tabla 3.)
En el caso del voluntario 4, se registró lo siguiente:
Voluntaria de sexo femenino, de 20 años de edad con un peso de 54,5 kg; en estado de reposo tiene una frecuencia cardiaca de 72 lpm, una frecuencia respiratoria de 16 rpm, una presión sistólica de 110 mmHg y una presión diastólica de 60 mmHg. (Tabla 1.)
En el registro posterior a la actividad física respecto a los datos en reposo, se manifiesta un aumento considerable de la frecuencia cardiaca a 102 lpm, de la frecuencia respiratoria a 48 rpm, de la presión sistólica a 130 mmHg, y de la presión diastólica a 80 mmHg. (Tabla 2.)
Y finalmente en el registro posterior a la ingesta de alimentos con respecto a los datos en reposo, se manifiesta un aumento de la frecuencia cardiaca a 92 lpm, de la frecuencia respiratoria a 18 rpm, de la presión sistólica a 120 mmHg, y de la presión diastólica a 65 mmHg. (Tabla 3.)
Se debe tomar en cuenta que en la circulación existen diversas sustancias periféricas que pueden aumentar o disminuir la resistencia a través de las sustancias vasodilatadoras o vasoconstrictoras. Como vimos en la práctica después de realizar la actividad física, y de la ingesta de alimentos aumentó la presión arterial, misma que es producida por el aumento de la resistencia periférica, ésta se da a lugar gracias a las sustancias vasoconstrictoras; donde destacan la noradrenalina, adrenalina, angiotensina II y vasopresina.
De esta manera cuando se estimula el sistema nervioso simpático durante el ejercicio, existe una gran liberación noradrenalina que excita el corazón y contrae los vasos. Por otro lado la vasopresina es mucho más potente que todas las sustancias mencionadas, está formada en el hipotálamo y segregada en porciones mínimas, caracterizada porque es un mecanismo que incluso puede elevar la presión arterial hasta la normalidad. (Guyton & Hall, 2012)
De esta manera se demuestra que el ejercicio físico o la ingesta de comida incrementa la secreción de algunas sustancias vasoconstrictoras, por consecuente aumenta la resistencia periférica provocando el aumento de la presión arterial.
Conclusiones:
En la práctica se aplicó la teoría de presión arterial, logrando relacionarla con las actividades de nuestro diario vivir, y de esta manera comprender su aumento y descenso en algunas condiciones.
Se logró tomar la presión arterial siguiendo el procedimiento adecuado, puesto que muchas veces no se divisan sus niveles aumentados pasando inadvertida durante largos periodos de tiempo. Sin embargo, la alteración de la presión no tratada puede regularmente ser la causa de muchas cardiopatías.
Así mismo se identificó las variaciones de la presión arterial de acuerdo a las situaciones fisiológicas en las que se encuentre el paciente, como después de haber realizado actividad física o de haber ingerido alimentos, provocando un aumento de la presión ante la resistencia periférica.
Anexos:
Figura 1. Figura 2.
Fuente: Janeth Sánchez Fuente: Janeth Sánchez
Figura 3. Figura 4.
Fuente: Janeth Sánchez Fuente: Janeth Sánchez
Figura 5. Figura 6.
Fuente: Janeth Sánchez Fuente: Janeth Sánchez
Figura 7. Figura 8.
Fuente: Janeth Sánchez Fuente: Carol Merino
Tablas
Voluntario 1 (Karla) Voluntario 2 (Ian) Voluntario 3 (Janeth) Voluntario 4 (Anita)
Sexo Femenino Masculino Femenino Femenino
Edad 20 años 20 años 19 años 20 años
Peso 57 kg. 64 kg. 61 kg. 54,5 kg.
Frecuencia Cardiaca 90 lpm 60 lpm 78 lpm 72 lpm
F. Respiratoria 15 rpm 18 rpm 15 rpm 16 rpm
Presión sistólica 110 mmHg 125 mmHg 105 mmHg 110 mmHg
Presión diastólica 90 mmHg 75 mmHg 70 mmHg 60 mmHg
Tabla 1. Datos en Reposo.
Voluntario 1 Voluntario 2 Voluntario 3 Voluntario 4
Frecuencia Cardiaca 113 lpm 119 lpm 124 lpm 102 lpm
F. Respiratoria 26 rpm 28
...