ESTUDIO DE CASO: LAS RELACIONES INTERPERSONALES DE UN ADOLECENTE CON SÍNDROME DOWN

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Se piensa entonces, que el niño construye sus relaciones interpersonales, las relaciona con su entorno y por ende aprende de éste. Y es en éste punto, donde se establece la relación familiar y social, ya que conjuntamente brindan herramientas necesarias para dicha construcción.

Adicional a lo anterior Piaget[3] establece que el adolescente es un sujeto activo en el proceso de conocimiento porque construye conceptos a partir de la interacción con el entorno. Con ello no se refiere a la acumulación de la información o al simple hecho de imitar de lo que sucede a su alrededor, sino que a partir de esta desarrolla y afianza la capacidad de construir su propio medio de interacción.

MARCO TEÓRICO

Para la construcción del marco teórico, fue necesario abarcar diferentes teóricos, pensamientos y conceptos que se desarrollaran a continuación:

El desarrollo socio afectivo inicia desde la etapa prenatal y se extiende durante toda la vida; a través de ello se establecen vínculos afectivos y bases de aprendizaje, las cuales se desarrollan en un contexto social adquiriendo seguridad, confianza, comunicación y autonomía.

De esta manera se van fortaleciendo el manejo de las emociones, Según la teoría psicosocial de Erickson (1963) afirma “El desarrollo humano solo se puede entender en el contexto de la sociedad a la cual uno pertenece y remarca la relación entre el ego y las fuerzas sociales que tiene algún tipo de influencia sobre las personas en determinados momentos de la vida” (p.2). Esto quiere decir, que los niños y niñas sin importar si presentan algún tipo de discapacidad deberían crecer con un pensamiento innovador, competente y eficaz, el cual sea desarrollado para un bien individual y colectivo.

Por otro lado se refiere a que las personas son el reflejo del entorno familiar donde crecieron y con esto va evolucionando su personalidad y la capacidad de resolución de problemas.

De igual manera en este proceso las relaciones interpersonales juegan un papel esencial en el desarrollo tanto personal y social de las personas con discapacidad. Cabe mencionar que todos los individuos necesitan crecer y estimularse en un entorno que le propicie crecimiento personal y a su vez puedan interactuar, compartir y ser partícipe de las actividades que se ejecuten en cada uno de los ámbitos pertenecientes ya sea institucional, familiar o social.

Las relaciones se fortalecen a través de los estímulos que se reciben del mundo, las personas, las emociones y las demostraciones afectivas que reciben de su entorno. Es aquí donde los padres también cumplen una función sumamente importante, porque ellos son las principales fuentes que propician a los niños el ser autónomos y seguros, para así mismo poder adaptarse a diferentes rutinas del quehacer cotidiano y de igual manera hacen que los niños acaten reglas generales de convivencia dado que así obtendrán una mejor socialización con sus pares y darán a conocer sus principales necesidades, por lo tanto, los padres contribuyen a potenciar con mayor énfasis sus habilidades sociales para que se desarrollen de la mejor forma posible como personas.

Parte del desarrollo social de los individuos tienen que ver con la formación de los componentes culturales, actitudes, valores, creencias y costumbres y por ende estos juegan un papel importante en la manera de pensar, de sentir y de actuar de la gente en concordancia con las relaciones que establece con los otros y con el medio.

Según Barraza (1998), asume que “El niño empieza a socializar desde el momento de su nacimiento y a la medida de su crecimiento empieza a moldear la interrelación con los otros y su conocimiento sobre el mismo lo que va a adquirir una imagen a través de los demás” (p.2).

Se asume que en todos los ámbitos en los que se desenvuelve el niño con dicha discapacidad y la familia influyen en el medio social donde éste se va apropiando en gran parte de la construcción de hábitos adquiridos y de esta manera logra obtener bases que le permitirán su desenvolvimiento en el medio social, mejorando sus actitudes, competencias y habilidades fundamentales para su vida.

De igual forma el en contexto familiar se considera elemental que la familia se muestre fuerte, cariñosa y protectora, por ende se constituirá un entorno ideal para el crecimiento y desarrollo de los niños y las niñas, convirtiéndose en el mejor comienzo para garantizar la plena satisfacción de los derechos de su infancia. (COHEN, 2003. p. 192).

“la adquisición de sus aprendizajes son lentos así como sus respuestas, por tanto, necesitan un diagnóstico diferenciado y, mejor, una valoración del potencial de aprendizaje.” (González, E., 1999).

De lo anterior, es significativo considerar que las familias interioricen, profundicen y aborden alternativas acerca de la discapacidad, para así lograr obtener resultados favorables donde el niño establezca una buena relación con sus pares; por consiguiente es pertinente que los niños se involucren y participen en actividades que ayuden a potencializar su aprendizaje.

Las habilidades sociales, al tratarse de comportamientos que las personas muestran en situaciones de interacción social, constituyen respuestas específicas a las exigencias que plantean las situaciones, lo que hace necesario desarrollar en las personas repertorios flexibles y variados de conductas sociales, en vez de patrones rígidos y uniformes (García Sáiz y Gil, 1995).

Desde este punto de vista, las familias y el contexto social donde pertenecen las personas con síndrome de Down, implementar alternativas que permitan el pleno desarrollo de habilidades, potencialidades y destrezas a través de una forma flexible de enseñanza donde se tenga en cuenta sus capacidades de aprendizaje y de igual manera se les facilite aprender e interiorizar mejor cada termino para que obtengan nuevas metas.

Por otro lado al ofrecerles a las personas con discapacidad experiencias variadas, las cuales le ayudan a relacionarse en distinta situaciones sociales y de esta manera le permitan contribuir a descubrir diferentes formas de dar a conocer sus intereses o necesidades.

Estas personas con Síndrome de Down, pueden aprovechar su facilidad de relacionarse con las personas que los rodean ya que se van dando de manera espontánea y de allí se puede obtener múltiples benéficos para su aprendizaje. Eso sí con la ayuda de la familia y del contexto social puesto que estos trabajan positivamente para alcanzar a cabalidad el desarrollo de cada una de las etapas.

Ahora bien, desde que nacemos estamos